Solo no puedes, con los dem¨¢s s¨ª

Delegar en una multitud lo que antes hac¨ªa un grupo especializado y profesional, esa podr¨ªa ser una definici¨®n sencilla de crowdsourcing, una t¨¦cnica que ha florecido a la vez que lo han hecho las redes sociales. Manuel Cebri¨¢n, cient¨ªfico espa?ol que trabaja en el laboratorios de medios del Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT MediaLab), desvela las dos caras de este fen¨®meno en auge: ¡°Es imposible entenderlo sin las redes sociales porque es la manera que tenemos de ir m¨¢s all¨¢ de la b¨²squeda de voluntarios. El m¨¦todo habitual consiste en descomponer una tarea compleja, enviarla a las redes sociales, ya sea el correo, Facebook, Twitter... y recopilar y canalizar despu¨¦s el resultado para dotarlo de una unidad¡±.

No es que se trata de explotar a los usuarios, sino de conseguir que se sientan parte del proyecto. Dos ejemplos autorreferentes ser¨ªan los casos de Facebook y Twitter, ambos usaron a sus propios clientes para hacer la labor de traducci¨®n a otros idiomas. Esta no es la ¨²nica forma de crowdsourcing, pero s¨ª quiz¨¢ la m¨¢s conocida, la del trabajo voluntario. Dentro de este fen¨®meno se distinguen varias modalidades, el crowdfunding, para financiar proyectos con peque?as cantidades. En Espa?a esta fue la f¨®rmula escogida para hacer la pel¨ªcula del Cosmonauta. En los ¨²ltimos meses KickStarter se ha convertido en el paradigma de esta modalidad. Nacida en 2010 est¨¢ consiguiendo millones de d¨®lares en pocos d¨ªas para ideas rompedoras, como el juego Double Fine, o un reloj de pulsera que interacciona con tel¨¦fonos Android.

La cocreaci¨®n es quiz¨¢ la opci¨®n m¨¢s creativa y abier. As¨ª, Carlos Jean ha producido un disco con su denominado Plan B a partir de m¨²sica creada por los seguidores del programa El Hormiguero. La firma de zapatillas deportivas Munich comercializa modelos creados por entusiastas de la marca. Y la juguetera Lego tambi¨¦n ha convertido en realidad las sugerencias de sus coleccionistas. En estos casos no se trata tanto de delegar, como de refrescar el cat¨¢logo y buscar nuevas f¨®rmulas.

La t¨¦cnica para externalizar tarear ha florecido con las redes sociales

Esta forma de implicar a los internautas en tareas colectivas ha despertado, seg¨²n Google Trends, especial inter¨¦s en Holanda, Singapur, Estados Unidos, India, Suiza e Irlanda. El investigador del MIT se encuentra en Espa?a para impartir una conferencia con motivo del d¨ªa de Internet en el Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI) se basa tanto en estudios como en su propia experiencia. Desde que puso el foco en estudiar este fen¨®meno su equipo ha destacado de manera especial en este campo. En solo ocho horas superaron el reto propuesto por el Pent¨¢gono que consist¨ªa en localizar diez globos rojos distribuidos por Estados Unidos. Su labor fue reconocida con 37.000 euros que distribuyeron entre los que contribuyeron a localizar los globos. Seg¨²n Cebri¨¢n la motivaci¨®n no se incentiva solo con dinero, sino tambi¨¦n con reconocimiento y reputaci¨®n. ¡°Para las empresas puede ser una herramienta muy interesante para la detecci¨®n de talento¡±, a?ade.

Esta experiencia, y la siguiente, intentar unir todos los trozos de un papel salido de una trituradora tras digitalizarlo, le sirvieron para ver todo lo positivo y negativo de este fen¨®meno. ¡°El 85 por ciento de los env¨ªos con informaci¨®n son incorrectos¡±, se lamenta. Y no terminan ah¨ª los problemas, la competencia, representada por otros equipos que se presentaban al reto, tambi¨¦n se dedic¨® a emitir mensajes para crear confusi¨®n e impedir que ganasen el reto. Es decir, que en el crowdsourcing se mezclan el esp¨ªritu constructivo de qui¨¦nes quieren colaborar, con el ¨¢nimo destructivo de los equipos que persiguen la misma meta.

Las empresas tienen una buena herramienta para detectar talento

Este exempleado de Telef¨®nica, donde se dedicaba al an¨¢lisis de estructura de redes, destaca algunos ejemplos, como el caso de ¡°foto al piquete¡± durante la huelga del 29 de marzo. A Cebri¨¢n le inquieta que fuese la propia Comunidad de Madrid la que invitase a los ciudadanos a tomar fotos de piquetes. Una acci¨®n que r¨¢pidamente cont¨® con una respuesta contraria: ¡°foto al esquirol¡± y ¡°foto al empresario¡±.

¡°La sociedad ha consensuado que la polic¨ªa debe asumir ese papel, si empezamos a acusarnos, controlarnos y tomar la justicia por nuestro lado se pueden dar situaciones desastrosas. Echo en falta m¨¢s debate cient¨ªfico y sociol¨®gico al respecto¡±, concluye con ¨¢nimo de concienciar.