M¨®viles que sienten y padecen
El investigador Fabian Hemmert trabaja en la interacci¨®n de tel¨¦fonos con el cuerpo humano
La tecnolog¨ªa m¨®vil sigue rompiendo barreras. La ¨²ltima, a cuenta del investigador alem¨¢n Fabian Hemmert, es la l¨ªnea que separaba los aparatos tecnol¨®gicos del espectro emotivo y sensorial de los seres humanos.
Dispositivos GPS que no gu¨ªan por la vista, sino por el tacto, solo distribuyendo su peso gravitatorio seg¨²n la direcci¨®n a seguir, o aparatos m¨®viles que responden al lenguaje corporal con m¨¢s o menos aprecio al usuario que los sostiene, han dejado de formar parte de la ciencia ficci¨®n. A eso se dedica Hemmert en el Design Research Lab de la Universidad de Berl¨ªn con sus investigaciones sobre retroalimentaci¨®n h¨¢ptica (interacci¨®n con la tecnolog¨ªa a trav¨¦s de los sentidos). ¡°Se trata de ser conscientes de la relaci¨®n que mantenemos con nuestro tel¨¦fono m¨®vil¡±, explica Hemmert tras intervenir en el congreso de tecnolog¨ªa m¨®vil Bdigital Apps de Barcelona.
El investigador ha ido un paso m¨¢s all¨¢ del contacto m¨®vil-humano a trav¨¦s de la pantalla t¨¢ctil para desarrollar aparatos que interact¨²an emocionalmente con su due?o. ¡°Mi investigaci¨®n se centra en c¨®mo nuestro cuerpo entiende el mundo digital. Desde el punto de vista cognitivo tenemos muchos retos, m¨¢s de los que podemos aceptar, y nuestro cuerpo no se utiliza para nada. Quiero que los ordenadores utilicen m¨¢s las capacidades del cuerpo", explicado.
El programador alem¨¢n present¨® ayer algunos de los prototipos en los que est¨¢ trabajando. As¨ª, en base al peso del propio tel¨¦fono y a un centro gravitatorio m¨®vil, Hemmert ha dise?ado una f¨®rmula para guiarse por GPS ¡°sin tener que mirar el m¨®vil y perderse las vistas de la ciudad mientras caminas¡±. El usuario, con el aparato en la palma de la mano, percibir¨¢ cambios en la distribuci¨®n del peso del dispositivo que le marcar¨¢ la direcci¨®n correcta, sin tener que clavar su mirada en la pantalla.
Matamos nuestros momentos de soledad y aburrimiento cogiendo el m¨®vil y escap¨¢ndonos al mundo de las telecomunicaciones
Sin embargo, lo que ha encumbrado al joven investigador como uno de los principales expertos mundiales en el futuro de la comunicaci¨®n m¨®vil, es su capacidad para dotar de emociones a los prototipos. ¡°Exploramos la relaci¨®n con nuestros tel¨¦fonos m¨®viles. El prototipo tiene como un coraz¨®n dentro que late m¨¢s o menos r¨¢pido seg¨²n est¨¦ relajado o emocionado¡±.
Hemmert explora las posibilidades de interacci¨®n entre el m¨®vil y el cuerpo, ¡°como un tamagochi¡±, bromea. ¡°Trabajamos con el prototipo y el lenguaje corporal, que es algo que nosotros hacemos muy bien de forma natural, pero la tecnolog¨ªa no. Nuestro proyecto puede reaccionar a tu mano de forma amorosa o m¨¢s t¨ªmida¡±.
Entre roces y caricias con sus prototipos, a Hemmert le queda tiempo para reflexionar sobre el papel que juegan los m¨®viles en la vida de una de una persona. ¡°Matamos nuestros momentos de soledad y aburrimiento cogiendo el m¨®vil y escap¨¢ndonos al mundo de las telecomunicaciones, pero no creo que esto sea bueno, porque la soledad y el aburrimiento tambi¨¦n son formas de invertir en nosotros mismos. En la parte emocional somos como Darth Vader, medio humano, medio m¨¢quina. No podemos existir sin m¨¢quinas. Pero es importante no convertirnos en ordenadores y seguir siendo humanos¡±, reflexiona.
El alem¨¢n augura que, aunque estamos en una era donde la relaci¨®n con los m¨®viles es muy intensa, ¡°en el futuro se relajar¨¢¡± el papel de los aparatos tecnol¨®gicos en la vida humana. ¡°Esta relaci¨®n es como con los coches. Empezaron siendo funcionales cuando salieron, ahora son como una marca de estatus e identidad, pero en el futuro volver¨¢n a ser funcionales y no tendremos una relaci¨®n tan personal con ellos¡±.
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