Airbnb quiere que Barcelona sea como ?msterdam

El encuentro tiene lugar en el Ayuntamiento de ?msterdam, pero por momentos se dir¨ªa que acontece en el de Barcelona. Airbnb, el portal de alojamiento, ha tra¨ªdo a la capital holandesa a un grupo de periodistas espa?oles para reunirlos con representantes de su consistorio y lucir un acuerdo que permite a la compa?¨ªa cobrar la tasa tur¨ªstica ¡ªun 5% del importe del alojamiento, la m¨¢s cara de Europa¡ª a sus ciberhu¨¦spedes y entregarla despu¨¦s al ayuntamiento.

El Ayuntamiento de ?msterdam conf¨ªa a Airbnb el cobro de la tasa tur¨ªstica, pero no tiene acceso a los datos de los propietarios

¡°Barcelona¡±, ¡°Barcelona¡±, ¡°Barcelona¡±, repiten de continuo los miembros de Airbnb en sus intervenciones. Conf¨ªan en que el modelo de ?msterdam se repita en la Ciudad Condal, despu¨¦s de la sanci¨®n que la Generalitat le impuso a la compa?¨ªa a principio del verano: 30.000 euros por ofrecer pisos tur¨ªsticos ilegales. La comunidad catalana fue la primera en penalizar esta actividad, pero tambi¨¦n ha sido pionera en darle un marco legal preciso: est¨¢ permitido hospedar turistas durante un m¨¢ximo de 4 meses al a?o, no necesariamente consecutivos. A principios de agosto, Ada Colau propuso condonar la deuda de los pisos tur¨ªsticos si se destinaban a alquiler social. La tasa tur¨ªstica de Barcelona es de 0,65 euros por noche.

El Ayuntamiento de ?msterdam tambi¨¦n estaba preocupado por esta cuesti¨®n, pero opt¨® por llegar a un acuerdo con Airbnb. El sistema est¨¢ en vigor desde diciembre de 2014. La compa?¨ªa, a pesar de ser un mero intermediario entre el propietario particular y los hu¨¦spedes, se erige en recaudadora de impuestos a trav¨¦s de su potente portal web. ¡°Facilita las cosas a los due?os de las habitaciones y las casas, y les ahorra el papeleo con el ayuntamiento¡±, explica ?ngel Mesado, director de Pol¨ªtica P¨²blica de la compa?¨ªa en Espa?a y Portugal. Desde el consistorio aseguran salir bien parados tambi¨¦n: ¡°Nos aseguramos de que se cobra efectivamente ese impuesto a todos los usuarios, en igualdad de condiciones con quienes ya lo pagan en los hoteles¡±, afirma el responsable de vivienda del ayuntamiento holand¨¦s, Albert Eefting. Su consistorio tiene declarada la guerra a los hoteles ilegales. Asegura que cada semana se cierran de 2 a 3 de estos establecimientos de este tipo en la ciudad.

Hoteles hostiles

No hay representantes de los hoteles en la ciudad, pero est¨¢n presentes en las preguntas de los periodistas. ¡°Al principio eran hostiles, pero hay que entender que la econom¨ªa colaborativa y el modelo del home sharing han venido para quedarse. Mejor ordenarlos que oponerse, no tendr¨ªa sentido¡±, responde Laila Frank, asesora de viaje social del Ayuntamiento. Los datos hablan a favor, parecer que hay pastel para repartir entre todos, hosteleros y particulares: las cifras de pernoctaciones en la ciudad en el primer cuatrimestre de este a?o han subido un 4,9%.

En ?msterdam se cierran de 2 a 3 hoteles ilegales a la semana

Desde Airbnb argumentan que su perfil de turista es distinto del que se aloja en hoteles. ¡°El 93% por ciento de nuestros usuarios quiere vivir como la gente de ?msterdam y el 73% de los alojamientos est¨¢ fuera de las zonas tur¨ªsticas¡±, afirma Mesado.

La representante del ayuntamiento tercia: ¡°Si solo alquilas tu habitaci¨®n un par de semanas al a?o, pagar la tasa tur¨ªstica es un rollo, as¨ª que pensamos en qu¨¦ podr¨ªamos ofrecerle a la ciudad para que fuera f¨¢cil. ?msterdam es una ciudad muy emprendedora. La gente piensa mucho en hacer algo sencillo, que funcione, que sirva".

La capital holandesa est¨¢ experimentando un auge de home sharing. El sentido pr¨¢ctico de los holandeses ¡ªvalga el t¨®pico, ya que sus representantes elegidos en el ayuntamiento lo sacan a colaci¨®n¡ª ha hecho que esta modalidad de aprovechamiento econ¨®mico de la casa propia haya crecido un 85% de julio de 2014 al mismo mes de este a?o. Un 90% ha aumentado el n¨²mero de amsterdameses que se sirve de la f¨®rmula cuando sale de su ciudad.

¡°La gente quiere esta f¨®rmula, el fen¨®meno no va a parar y adem¨¢s es razonable¡±, abunda Frank, que afirma que puso a Airbnb una l¨ªnea roja con la que, a juzgar por los gestos de asentimiento de sus representantes, no tuvieron especial problema: ¡°El alojamiento tiene que ser justo, seguro y tranquilo¡±.

Airbnb recauda los impuestos de parte del ayuntamiento pero ?qu¨¦ sucede con los datos de los propietarios, que no pueden cederse a terceros? El responsable de vivienda del ayuntamiento asegura escuetamente que el consistorio "tiene medios" de saber si las cifras de recaudaci¨®n que les facilita la compa?¨ªa son correctas.

Una actividad en auge

Airbnb naci¨® en 2008 en San Francisco, con el nombre de Air bed and breadfast. Sus fundadores quer¨ªan aprovechar el espacio sobrante de su casa para alojar hu¨¦spedes y conseguir unos d¨®lares extras. El modelo cuaj¨® en Nueva York y Par¨ªs, tan solo un a?o m¨¢s tarde; Barcelona y ?msterdam seguir¨ªan al poco tiempo. Sus usuarios pueden encontrar alojamiento en 34.000 ciudades de 190 pa¨ªses. El ¨²ltimo en unirse a la lista es Cuba. El crecimiento en Espa?a es espectacular: en 2013 se vali¨® del servicio 230.000 viajeros, 620.000 en 2014. Las expectativas para este a?o esperan superar los 1.300.000 usuarios.

Solo en ?msterdam, hay 12.000 ofertas de alojamiento en Airbnb (seg¨²n los datos de junio de este a?o), frente a las 16.000 de Barcelona y las 7.000 de Madrid. El acuerdo con ?msterdam es esgrimido por Airbnb como perfectamente trasladable a Espa?a. ?Qu¨¦ tal los han recibido los equipos de Ada Colau y Manuela Carmena?: ¡°Hemos visto despu¨¦s de las elecciones auton¨®micas y municipales en Madrid, Barcelona y otros sitios que las situaci¨®n ha cambiado¡±, asegura el director de Pol¨ªtica P¨²blica de la compa?¨ªa. "Hay una actitud m¨¢s receptiva". Esa actitud no se ha concretado de momento en acuerdos. En el caso de Barcelona, est¨¢n a la espera de que el nuevo equipo de gobierno municipal responda a la invitaci¨®n que les han lanzado desde la compa?¨ªa. Fuentes de Airbnb se?alan que con quienes m¨¢s se han reunido son con la Comunidad de Madrid y la Generalitat de Catalu?a, pero a¨²n sin resultados concretos significativos.

La compa?¨ªa tiene su sede europea en Irlanda, para¨ªso de las tecnol¨®gicas por sus bajos impuestos y ubicaci¨®n fiscal de Google, Amazon, Twitter o Facebook. Aclaran que no son como estas compa?¨ªas: "somos comisionistas, bueno, cargamos por usar la plataforma, pero solo de un 10% a un 15%. El resto del dinero se queda en el territorio donde se genera".