La empresa china que planta cara a iRobot

La estrategia china se extiende por multitud de sectores tecnol¨®gicos: cuando un aparato originalmente inventado en otro pa¨ªs logra el ¨¦xito empresarial e irrumpe en el mercado de masas, las empresas chinas que los fabrican para otras extranjeras deciden establecerse por su cuenta y competir con las marcas originales ofreciendo aparatos similares a un precio significativamente m¨¢s reducido. El ejemplo m¨¢s claro de este modelo de negocio es el de los tel¨¦fonos m¨®viles inteligentes, pero hay muchos m¨¢s: desde c¨¢maras de acci¨®n que siguen la estela de las GoPro, hasta pulseras para monitorizar la actividad diaria como la exitosa MiBand, nacida al calor de FitBit.

Ahora, la ¨²ltima guerra de precios y de prestaciones llega propiciada por la popularizaci¨®n de un nuevo electrodom¨¦stico: el robot aspirador. Esos discos que aterrorizan a las mascotas y se arrastran por toda la casa para limpiar el suelo se han convertido en uno de los productos estrella del hogar inteligente. Sus ventas crecen a un ritmo del 80%, a pesar de que su principal exponente, los Roomba de la estadounidense Irobot, no son precisamente baratos. De hecho, el precio de la mayor¨ªa multiplica hasta por diez el de un aspirador tradicional. Pero los usuarios valoran positivamente el ahorro en tiempo y en esfuerzo a la hora de limpiar la casa y est¨¢n dispuestos a pagar la diferencia.

Conscientes del potencial de negocio, en la china Ilife se han propuesto darle un bocado al mercado con las armas de siempre. ¡°Productos con una gran relaci¨®n calidad-precio a los que se suman peque?as innovaciones y la ventaja de ser fabricantes y no ¨²nicamente dise?adores¡±, apunta a EL PA?S Ben Hu, responsable de Estrategia de la marca con sede en la meca de las manufacturas tecnol¨®gicas del gigante asi¨¢tico, la ciudad de Shenzhen. A juzgar por las ventas tanto en Amazon como en tiendas especializadas del estilo de Gearbest, de momento est¨¢n logrando su objetivo.

¡°En 2006 comenzamos a trabajar como fabricantes de electrodom¨¦sticos para otras marcas reputadas -como DeLonghi-, y en 2010 establecimos nuestro propio nombre comercial. Ahora nuestro principal producto son los robots aspiradores que dise?amos en nuestros centros de I+D y fabricamos en las tres instalaciones propias¡±, explica Hu. Actualmente, Ilife cuenta con mil empleados, de los cuales casi 200 son ingenieros. ¡°Y tenemos ya 500 patentes¡±, puntualiza Hu para demostrar que no se limitan a copiar. En cualquier caso, el secreto de su ¨¦xito es claro. ¡°Tenemos unos precios que rondan el 50% de los de la competencia¡±.

Actualmente, Ilife cuenta con mil empleados, de los cuales casi 200 son ingenieros. ¡°Y tenemos ya 500 patentes¡±, se?ala la empresa

En EL PA?S hemos podido probar dos de sus robots: el A4, su producto estrella, que cuesta unos 150 euros. Y el V3S, especializado en hogares con mascotas, que se puede adquirir por un precio similar. ¡°Las prestaciones m¨¢s relevantes en estos productos son la potencia de succi¨®n y la bater¨ªa¡±, explica Hu. ¡°Luego se valoran funciones adicionales como la posibilidad de que el robot se adapte a diferentes superficies y que no se limite ¨²nicamente a aspirar sino que tambi¨¦n pueda pasar la mopa, como hace el V3S¡±. En el futuro, a?ade el directivo, otro de los elementos m¨¢s importantes ser¨¢ la interconexi¨®n a trav¨¦s del Internet de las cosas.

No obstante, ah¨ª es, precisamente, donde fallan los productos de Ilife. Aunque en ambos casos realizan su funci¨®n correctamente, la diferencia con productos notablemente m¨¢s caros de la competencia, como los propios Roomba o el robot que ha dise?ado Xiaomi, est¨¢ en el n¨²mero de sensores que incorporan y en su capacidad para hacer un mapa detallado de la casa y lograr as¨ª una mayor eficiencia en la limpieza. Porque tanto el A4 como el V3S parece que se mueven de forma algo aleatoria, mientras que el de Xiaomi realiza una limpieza exhaustiva despu¨¦s de haber delineado el per¨ªmetro del hogar y de haber determinado d¨®nde se encuentran los principales obst¨¢culos, como mesas o sillas. De esta forma, los robots de Ilife pasan demasiado tiempo en una zona concreta y luego poco en otras. Y, aunque se puede programar su encendido, no tienen capacidad para ser operados de forma remota utilizando el tel¨¦fono m¨®vil y la conexi¨®n wifi de casa.

Eso s¨ª, Ilife ha dise?ado un sistema alternativo que puede resultar m¨¢s f¨¢cil de utilizar para quienes no est¨¢n acostumbrados a los?smartphones¡¯. Ambos incluyen un peque?o mando a distancia con el que se le puede pedir al robot que limpie el per¨ªmetro o que se concentre en una peque?a zona en la que se ha podido caer algo. As¨ª, los resultados son mucho m¨¢s satisfactorios cuando primero se recorre el per¨ªmetro de una habitaci¨®n y luego se le deja ir a su libre albedr¨ªo. La potencia de succi¨®n es m¨¢s que suficiente -en el A4 se puede regular hasta 1.000 Pa., mientras que el V3S se queda en 650 Pa pero cuenta con funci¨®n de mopa-, resultan bastante silenciosos, y la bater¨ªa dura tranquilamente hora y media dependiendo de la superficie que limpien -las alfombras y la moqueta gastan m¨¢s-.

Adem¨¢s, ambos modelos cuentan con el filtro HEPA que logra atrapar el polvo en el aire -muy importante para quienes sufran enfermedades respiratorias- y, comparados con otras marcas, destacan por una mayor habilidad para evitar quedarse enganchados en mara?as de cables, aunque los flecos de las alfombras son su gran enemigo porque se enredan en las escobillas circulares que utilizan para limpiar esquinas. Afortunadamente, los aparatos detectan r¨¢pido el problema y se desconectan autom¨¢ticamente antes de provocar un desaguisado.

Entre los puntos negativos del V3S est¨¢n el compartimiento excesivamente peque?o que incorpora para almacenar la suciedad, que requiere ser vaciado despu¨¦s de uno o dos usos, y la falta de precisi¨®n de los sensores infrarrojos destinados a evitar que se caiga por las escaleras, algo que ha sucedido en dos ocasiones durante nuestra prueba (aunque en la mayor¨ªa de las ocasiones s¨ª ha sabido detectar el escal¨®n y ha dado media vuelta). El A4, por su parte, compensa su falta de funci¨®n mopa con un contenedor m¨¢s generoso, mayor potencia, y sensores mejor calibrados. En ambos casos, el regreso autom¨¢tico a su puesto de carga lleva su tiempo, pero resulta satisfactorio.

La diferencia con productos notablemente m¨¢s caros de la competencia est¨¢ en el n¨²mero de sensores que incorporan y en su capacidad para hacer un mapa detallado de la casa

¡°La l¨ªnea de productos A es potente y s¨®lida, mientras que la V busca dar una soluci¨®n integral¡±, enumera Hu. ¡°Los clientes son cada vez m¨¢s exigentes, as¨ª que debemos mejorar el servicio postventa, que ha sido tradicionalmente el punto m¨¢s d¨¦bil de las empresas chinas¡±, reconoce el representante de Ilife. Por eso, la empresa ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de internacionalizaci¨®n que comenzar¨¢ en Estados Unidos con el aterrizaje?offline, con tiendas f¨ªsicas. ¡°All¨ª vamos a comenzar a contratar personal local, y nos gustar¨ªa hacer lo mismo en Europa. Pero es complicado porque ese ¨²ltimo es un mercado muy fragmentado, as¨ª que, de momento, nos aliaremos con distribuidores locales para tener presencia f¨ªsica¡±, avanza.

Es una estrategia similar a la que utilizaron hace d¨¦cadas las empresas japonesas primero y las surcoreanas despu¨¦s. De hecho, ya hay compa?¨ªas chinas, como Huawei o ZTE, que crean empleo en Espa?a y Latinoam¨¦rica para adaptarse a los mercados locales. ¡°Desde China nos podemos dar a conocer gracias a los nuevos canales que ha abierto el comercio electr¨®nico, pero es necesaria una presencia m¨¢s s¨®lida si queremos tener ¨¦xito¡±. De momento, tanto en Amazon como en Gearbest Ilife suele estar entre las marcas m¨¢s vendidas de robots aspiradores. Pero, ?merecen la pena sus productos?

Aunque es evidente que no est¨¢n a la altura de otros mucho m¨¢s caros en cuestiones de conectividad, realizan su funci¨®n de forma satisfactoria. A la espera de que el Internet de las cosas se convierta en una realidad y los aparatos?hablen entre s¨ª gracias a las nuevas redes 5G, son una alternativa interesante para quienes no est¨¦n dispuestos a gastar m¨¢s de 500 euros por un aparato que, en definitiva, sustituye a otro que se puede adquirir por una fracci¨®n de ese precio. Adem¨¢s, tanto los filtros de recambio como otros componentes que tendr¨¢n una vida m¨¢s corta que la del aparato se pueden encontrar f¨¢cilmente en los portales de Internet. En cualquier caso, Hu avanza que el robot que Ilife lanzar¨¢ este a?o, el A6, s¨ª ser¨¢ un duro contrincante para los Roomba.