Tus datos se venden por 7 c¨¦ntimos de euro
Un informe de Amnist¨ªa Internacional revela la venta de informaci¨®n de 1,8 millones de musulmanes por 126.851 euros. Este comercio se expande gracias al ¡®big data¡¯
?Cu¨¢ntas veces al a?o marca usted una casilla en la que autoriza al acceso y cesi¨®n de sus datos? ?Cinco, diez? Haga bien la cuenta. Aunque la espada de Damocles apunte a las redes sociales, en realidad, los datos se ceden en cualquier transacci¨®n. Al contratar una tarjeta de cr¨¦dito, hacer una compra, dar de alta una wifi, participar en una encuesta, al visitar p¨¢ginas web¡ Datos que individualmente no tienen valor, juntos constituyen una nueva miner¨ªa, m¨¢s valiosa que la del oro. No son solo los datos privados de cada persona, sino los de cada actividad individual, cada compra o cada emoticono con el que se reacciona a los comentarios en las redes sociales, el big data permite obtener las preferencias pol¨ªticas, religiosas, sexuales y alimenticias, as¨ª como la situaci¨®n econ¨®mica, sanitaria, policial e incluso emocional de cada persona. Los algoritmos secretos que usan estas empresas son cada vez m¨¢s sofisticados y, por tanto, las posibilidades, infinitas.
Un equipo de investigadores de Amnist¨ªa Internacional (AI) revela la oferta por parte de una de estas empresas, Exact Data, de los datos de 1,8 millones de musulmanes por 138.380 d¨®lares (126.851 euros), es decir, a raz¨®n de 7,5 centavos (7 c¨¦ntimos de euro) por persona. La compa?¨ªa en cuesti¨®n, ¡°presume de tener una base de datos total de 200 millones de contactos de Estados Unidos que se pueden filtrar mediante 450 categor¨ªas, tales como religi¨®n y etnia¡±, detalla el informe y ha podido comprobar este peri¨®dico en la propia web. Este sitio, ExactData.com, tambi¨¦n ofrece ¡°un abanico de listas de contactos preconfiguradas¡±, por ejemplo, las de ¡°estadounidenses hispanos no asimilados¡± (en referencia a los que no est¨¢n integrados en la sociedad de EE UU, independientemente de su condici¨®n legal)¡±.
En Europa hay alrededor de? 50 grandes empresas ¡®data brokers¡¯; en el mundo, nadie lo sabe
Muchas de las empresas que viven de la venta de datos privados de personas no se esconden en Internet.
¡°El hecho de que se pueda comerciar con estas listas y puedan acabar en manos indebidas, hace posible que se utilicen para iniciativas que podr¨ªan vulnerar los derechos humanos, como la creaci¨®n de sofisticados perfiles que pueden atentan contra la privacidad¡±, advierte el director de Comunicaci¨®n de AI Espa?a, Miguel ?ngel Calder¨®n.
Justo dentro de un a?o, en mayo de 2018, empezar¨¢ a aplicarse un nuevo reglamento europeo de protecci¨®n de datos m¨¢s estricto que el actual, que se espera mejore el control de los ciudadanos sobre los datos personales que ceden a terceros, resalta Calder¨®n.
Una de las autoras de esta investigaci¨®n, asesora de Tecnolog¨ªa y Derechos Humanos de esta organizaci¨®n, Tanya O¡®Carroll, explica desde Londres que el comercio con datos privados ¡°es un negocio floreciente¡±. ¡°El inmenso avance experimentado por el big data en la ¨²ltima d¨¦cada ha permitido que los data brokers [empresas de comercio de datos] lo sepan todo de ti¡±, afirma esta experta. ¡°Los datos peque?os y abstractos, que no tienen ninguna importancia por s¨ª solos, cruzados, por ejemplo, con los me gusta de Facebook, cobran gran valor¡±.
O¡®Carroll resalta uno de los aspectos m¨¢s relevantes de esta situaci¨®n: el anonimato de esta industria. ¡°No es transparente. Saben mucho de ti, pero t¨² no sabes ni qui¨¦n tiene tus datos ni el nombre de estas empresas¡±. Solo en Europa, operan al menos 50 empresas de data brokers, seg¨²n la lista recopilada por Amnist¨ªa Internacional. ?Y en el resto del mundo? ¡°Es imposible saber las que hay en Estados Unidos o en Asia. Cientos¡±, responde O¡®Carroll. ?Qu¨¦ puede hacer entonces cada usuario por protegerse de este comercio o, al menos, por tener alg¨²n control sobre sus datos?
Unas confusas pol¨ªticas de privacidad
La globalizaci¨®n de Internet, con todas sus bondades, complica much¨ªsimo la tutela de nuestros datos. Espa?a tiene fama de ser uno de los pa¨ªses m¨¢s proteccionistas. Dos leyes, la General de Telecomunicaciones y la de Servicios de la Sociedad de la Informaci¨®n, velan por ello, como recuerda Jes¨²s Rub¨ª, adjunto a la directora de la Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos. "El nuevo reglamento europeo, que se aplicar¨¢ en 2018, supone un gran avance. Prev¨¦ que, en los casos de que la compa?¨ªa no tenga un establecimiento en la UE, cuando los servicios son para usuarios europeos o se monitoriza su conducta, la empresa tiene que cumplir la normativa europea de protecci¨®n de datos y tiene que asignar un representante. Es un paso muy importante".
Sobre el consentimiento de ceder los datos por parte de los usuarios, Rub¨ª explica que ¡°la situaci¨®n legal ha ido evolucionando hasta tener que detallarse las finalidades espec¨ªficas que se van a dar a esos datos. Y debe ser libre, y no denegarse de manera injustificada la prestaci¨®n del servicio para obtenerlo¡±. ¡°El principal problema¡±, concluye Rub¨ª, ¡°es que las pol¨ªticas de privacidad siguen siendo confusas y poco accesibles, porque, en muchos casos, las empresas ofrecen servicios muy diversos¡±.
Privacidad y seguridad
¡°La gente se ha acostumbrado a ceder sus datos para cualquier cosa sin pensar que es inseguro y que valen dinero¡±, contesta ?lvaro Ortigosa, director del Centro Nacional de Excelencia en Ciberseguridad (CNEC) de la Universidad Aut¨®noma de Madrid. ¡°Pero, adem¨¢s, aparte de pensar en la privacidad, deber¨ªamos pensar tambi¨¦n en la seguridad, en la vulnerabilidad de esas bases de datos, que son muy jugosas¡±, advierte Ortigosa.
Este experto cree que los usuarios deben apuntar las direcciones de todas las webs a las que han cedido sus datos puntualmente ¡°y escribir luego para que los borren. Por sistema¡±. En cuanto a los datos vinculados a un servicio, como la red wifi de la vivienda habitual, Ortigosa considera que la legislaci¨®n deber¨ªa obligar a las empresas a limpiar todos los datos de particulares cada ciertos meses de forma sistem¨¢tica.
Pero, ?c¨®mo trabajan estas empresas? Borja Gonz¨¢lez del Regueral, vicedecano de IE School of Human Science & Technology, explica que ¡°es un negocio en el que o bien se venden directamente los datos o bien se ceden, aunque con la nueva directiva europea, estas empresas est¨¢n obligadas, entre otras cosas, a informar al usuario de la cesi¨®n de los datos a terceras partes¡±. El principal problema, apunta este especialista del Instituto de Empresa, ¡°es que es tu responsabilidad leerte el contrato cuando cedes tus datos pero ?qui¨¦n se lee 15 p¨¢ginas cada vez que se compra unos pantalones por Internet?¡±. ¡°Por eso, se debe aumentar la transparencia¡±, opina Gonz¨¢lez del Regueral.
Pero los data brokers no solo obtienen informaci¨®n de las transacciones o de las redes sociales. ¡°Agregan numerosos datos de muchos sitios¡±, prosigue este experto. ¡°De los registros p¨²blicos o de cualquier actividad que est¨¦ en documentos que haya volcado en Internet alg¨²n organismo¡±. Y tampoco son los ¨²nicos que comercian con nuestra informaci¨®n privada. ¡°Los datos son un activo para cualquier empresa. La cuesti¨®n es saber cu¨¢l es la manera m¨¢s ¨¦tica de comerciar con ellos¡±.
Y ahora, vuelva a hacer la cuenta. ?Cu¨¢ntas veces ha cedido sus datos en el ¨²ltimo a?o? ?50? ¡°Hay una tendencia al alza en incorporar este negocio en las empresas tradicionales¡±, remacha Gonz¨¢lez del Regueral
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