?Es el ¡®sexting¡¯ un riesgo para los adolescentes?
Un metaan¨¢lisis de 23 estudios con 42.000 menores de edad asocia esta pr¨¢ctica con mayor actividad sexual y algunos trastornos mentales
La Universidad de Calgary (Canad¨¢) ha analizado los resultados de 23 estudios, en los que han participado casi 42.000 menores de 18 a?os, para responder a la cuesti¨®n de si existe alguna relaci¨®n entre el sexting y conductas sexuales concretas y la salud mental.
El sexting?consiste en producir y enviar contenidos (principalmente fotograf¨ªas o v¨ªdeos) de tipo sexual o er¨®tico de forma totalmente voluntaria y privada a otra persona, utilizando para ello el tel¨¦fono m¨®vil u otro dispositivo tecnol¨®gico, seg¨²n explica Laura Cuesta, profesora de Estrategia Digital y Social Media en la Universidad Camilo Jos¨¦ Cela.
Seg¨²n este metaan¨¢lisis, publicado en la revista JAMA Pedriatics, s¨ª que existe una asociaci¨®n entre h¨¢bitos sexuales espec¨ªficos (como la falta del uso de anticonceptivos o la cantidad de actividad sexual practicada) y trastornos como la ansiedad y la depresi¨®n. Los adolescentes que sextean tienen 2,16 posibilidades m¨¢s que el resto de no usar ning¨²n m¨¦todo anticonceptivo, y 1,79 de padecer estas patolog¨ªas, asegura el estudio. Adem¨¢s, tambi¨¦n relaciona el sexting con beber alcohol? (3,78 posibilidades de m¨¢s), el consumo de drogas (3,48 veces m¨¢s riesgo) y de tabaco (2,66 m¨¢s opciones de ser fumadores). Por otro lado, tambi¨¦n plantean que existe correlaci¨®n con el comportamiento delincuente, ya que figura con 2,50 puntos m¨¢s de probabilidad.
En este trabajo, se explica que los m¨¢s j¨®venes pueden sextear con intenciones relativamente inofensivas. Sin embargo, en el caso de que esas intenciones no sean tan inofensivas, se puede producir una decepci¨®n emocional. El estudio insiste, en cualquier caso, en que la correlaci¨®n no indica causalidad, es decir, que quien practica sexting no tiene necesariamente que incurrir en pr¨¢cticas de riesgo.
Seg¨²n este estudio, los adolescentes que sextean tienen 2,16 posibilidades m¨¢s que el resto de no usar ning¨²n m¨¦todo anticonceptivo y 1,79 m¨¢s probabilidades de padecer patolog¨ªas como la ansiedad y depresi¨®n
La autora, Sheri Madigan, es psic¨®loga, y ya hab¨ªa participado en otro estudio sobre sexting, donde se concluy¨® que este h¨¢bito es una pr¨¢ctica cada vez m¨¢s com¨²n entre los j¨®venes: "El sexting se est¨¢ convirtiendo en un componente normativo del comportamiento y desarrollo sexual de los adolescentes",?explica la autora. Seg¨²n sus datos, 1 de cada 7 menores de 18 a?os (15%) ha enviado alg¨²n mensaje de este tipo y 1 de cada 4 (27%), lo ha recibido.
Para Ricardo Fardi?o, psic¨®logo cl¨ªnico y uno de los autores de La lucha sexual de los adolescentes en la hipermodernidad, es habitual que si un adolescente "se siente rechazado por sus iguales, cuestionado de manera masiva o expuesto p¨²blicamente en aspectos de s¨ª mismo que sienten como m¨¢s fr¨¢giles"?puedan aparecer trastornos de tipo ansioso-depresivo.?
Pero, ?el sexting?tiene riesgos importantes para los m¨¢s j¨®venes? Seg¨²n el estudio, los adolescentes con menor edad pueden ser m¨¢s susceptibles a los riesgos asociados con el sexting debido a su relativa inmadurez, en comparaci¨®n con los adolescentes mayores. Adem¨¢s, Cuesta cree que siempre cabe la posibilidad de que cualquier contenido sea accesible para terceros por muchas razones (fallos t¨¦cnicos, hackers, descuidos, extorsiones, acoso, chantaje, robo de terminal, spyware, troyanos, etc¨¦tera).
Para las familias que puedan estar preocupadas por c¨®mo afrontar esta situaci¨®n con los adolescentes, Cuesta cree que pese a que son ellos los que tienen m¨¢s destreza tecnol¨®gica, no tienen ni la madurez ni la responsabilidad para tomar ciertas decisiones. ¡°A mi hija le habl¨¦ de la Teor¨ªa de los 10. Antes de publicar una foto, tendr¨ªa que pensar qu¨¦ sentir¨ªa al ver esa foto a las 10 horas de verla publicada, luego, a los 10 d¨ªas, despu¨¦s, a los 10 meses y, finalmente, a los 10 a?os. Si no se avergonzaba de ello, no habr¨ªa problema¡±, aporta.
En cuanto a c¨®mo deben actuar los propios adolescentes, Fardi?o cree que lo m¨¢s importante es proteger la intimidad: ¡°Les dir¨ªa que en la sexualidad es fundamental el autocuidado y el respeto por el otro. En este caso pasa porque no podemos hacer p¨²blica aquella imagen que nos ha llegado como una intimidad compartida. Eso es una agresi¨®n y podemos incurrir adem¨¢s en un delito¡±, zanja.
El estudio de Mendigan concluye con que ser¨¢ necesario continuar analizando el sexting y la asociaci¨®n que se hace entre este intercambio de mensajes y la salud mental de los adolescentes.
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