El primer taller clandestino de Espa?a constata las armas 3D como una gran amenaza europea
La polic¨ªa espa?ola lidera la preparaci¨®n de un congreso espec¨ªfico en oto?o para coordinar y mejorar la respuesta a este nuevo desaf¨ªo
Cuando la polic¨ªa entr¨® en un taller clandestino de armas y explosivos en Tenerife, no esperaba ver una impresora 3D en marcha terminando el armaz¨®n gris de un rev¨®lver. Era la primera vez que en Espa?a se encontraban armas impresas en una operaci¨®n policial. La investigaci¨®n hab¨ªa empezado tras la detecci¨®n de un simpatizante del supremacismo blanco que compraba material qu¨ªmico que puede usarse en explosivos. La posibilidad ...
Cuando la polic¨ªa entr¨® en un taller clandestino de armas y explosivos en Tenerife, no esperaba ver una impresora 3D en marcha terminando el armaz¨®n gris de un rev¨®lver. Era la primera vez que en Espa?a se encontraban armas impresas en una operaci¨®n policial. La investigaci¨®n hab¨ªa empezado tras la detecci¨®n de un simpatizante del supremacismo blanco que compraba material qu¨ªmico que puede usarse en explosivos. La posibilidad de que el sospechoso pudiera estar imprimiendo armas surgi¨® al final, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. La impresi¨®n casera de armas 3D es de hecho perfectamente posible sin levantar ninguna alarma policial: hay planos v¨¢lidos en la web abierta, las partes met¨¢licas indispensables son legales de adquirir y las impresoras 3D cuestan cientos de euros y no tienen ning¨²n control.
Este caso ha llevado a la polic¨ªa espa?ola a constatar su intuici¨®n sobre el peligro del desarrollo de las armas 3D. ¡°No nos lo esper¨¢bamos¡±, dice la inspectora espa?ola que lidera la acci¨®n dedicada a combatir nuevas amenazas en armas de fuego en el grupo europeo que combate el tr¨¢fico il¨ªcito (Empact Firearms). ¡°Nunca es agradable algo as¨ª, pero es reconfortante comprobar que no voy mal encaminada y que estoy proyectando una amenaza cierta¡±, explica a EL PA?S. La detenci¨®n se produjo en septiembre, aunque se ha mantenido bajo secreto de sumario hasta ahora.
¡°Tratamos de medir el grado de amenaza contactando con otras polic¨ªas europeas, organismos internacionales y agencias como Interpol y Europol¡±, dice la inspectora. ¡°Hemos hecho un seminario para detectar amenazas a futuro de aqu¨ª a 2030 y hemos detectado que la principal amenaza es la impresi¨®n de armas¡±, a?ade.
La intuici¨®n de la inspectora ha llevado Espa?a acoger¨¢ en oto?o un encuentro europeo sobre armas 3D. En Madrid debatir¨¢n polic¨ªas y expertos externos cu¨¢l es el riesgo real de este tipo de armas y cu¨¢les son los mejores modos de combatirlo, como control de armas, bal¨ªstica o legislaci¨®n. Durante el encuentro se imprimir¨¢ un arma 3D y se probar¨¢ en el campo de tiro del complejo de la Polic¨ªa en Canillas (Madrid). Aunque internet ya est¨¢ lleno de planos y experimentos, el proceso ha sido tan r¨¢pido que la polic¨ªa a¨²n no ha probado ninguna terminada. Aunque sean f¨¢ciles de construir, tambi¨¦n tienen riesgos si algo se ejecuta mal.
La ¡®vieja¡¯ Liberator
El riesgo de las armas 3D impresas en casa surgi¨® hace casi una d¨¦cada con la pistola Liberator, aunque al principio parec¨ªa m¨¢s una curiosidad que un peligro. Pero en los ¨²ltimos a?os la conjunci¨®n de impresoras capaces muy baratas y la proliferaci¨®n de planos por internet ha convertido el peligro en una amenaza real.
El material del taller clandestino de Tenerife inclu¨ªa dos impresoras de categor¨ªas distintas. La m¨¢s cara era una Prusa Mk3S, con un coste completo de alrededor de los 800 euros sin montar y de unos 1.000 ya montada. ¡°Tiene una gran calidad y precisi¨®n y es bastante asequible¡±, dice Juan Gonz¨¢lez, especialista en impresi¨®n 3D y autor del canal Govaju en YouTube. La segunda impresora del taller era una Creality Ender 5 Plus, de unos 500 euros. La primera marca es checa y la segunda, china. ¡°Las diferencias entre ambos modelos no eran considerables, b¨¢sicamente de precio. Son gama de entrada¡±, a?ade Gonz¨¢lez. Es m¨¢s raro que un usuario casero tenga dos impresoras: ¡°Quien tiene una acaba adquiriendo otra para doblar la producci¨®n¡±, dice. Pero quien quiere experimentar con armas 3D no pretende en principio ¡°doblar la producci¨®n¡±.
Las incautaciones como la de Tenerife que ha habido en Europa pueden contarse con los dedos de las manos. Y sobran, dicen fuentes policiales. Ha habido casos en Reino Unido y Polonia, por ejemplo. Es algo muy incipiente, pero con gran velocidad de crecimiento y oportunidades.
El ¨²nico caso de uso real y que elev¨® las alarmas fue el ataque que dej¨® dos muertos en una sinagoga en Halle (Alemania) en octubre de 2019. El autor hab¨ªa comprado una impresora 3D en mayo y dijo en un manifiesto haber logrado ensamblar cinco armas. En im¨¢genes del tiroteo se ve c¨®mo las armas se le encasquillan varias veces y regresa a su coche, presunta prueba de que a¨²n no eran muy fiables. Aun as¨ª, mat¨® a dos personas.
El inter¨¦s por las armas fabricadas en casa y por el supremacismo del detenido en Tenerife le acercan al caso alem¨¢n. La polic¨ªa sospecha que podr¨ªa ser un perfil de lobo solitario, sin muchas conexiones sociales y en peligro de radicalizaci¨®n, que adem¨¢s ten¨ªa un pasado peculiar: presuntamente fue militar en Venezuela en ¨¦poca previa a Hugo Ch¨¢vez y luego vivi¨® 10 a?os en Estados Unidos, donde pudo entrar en contacto con interesados por las armas y la extrema derecha.
La polic¨ªa no descarta descubrir nuevas pistas analizando los dispositivos electr¨®nicos u ordenadores del detenido, aunque de momento no han encontrado manifiestos o declaraciones en redes abiertas. Ten¨ªa sin embargo ¡°el diario de Hitler y material militar de la Alemania nazi, con una foto vestido con traje militar nazi, fundas de pistola nazi y banderas que son utilizadas por grupos supremacistas¡±, dicen fuentes de la investigaci¨®n.
Los 19 armazones que ten¨ªa en casa eran todos de arma corta y hab¨ªa piezas suplementarias para intentar montar una pistola. La polic¨ªa sabe que hizo alguna explosi¨®n casera en el campo, pero no tiene la certeza de momento de si ensambl¨®, prob¨® y luego desmont¨® alguna arma impresa. Se est¨¢ investigando si con las piezas que ten¨ªa en casa pod¨ªa ensamblar una pistola funcional completa. El detenido ten¨ªa en su ordenador los planos descargados del FGC-9, un subfusil dise?ado en Europa, hecho de pl¨¢stico y con piezas libres que pueden encontrarse en internet, y una r¨¦plica de un fusil de asalto AR-15, que dispara balines de pl¨¢stico, pero que tiene partes que pueden adaptarse para el FGC-9, como la culata, el gatillo, el seguro o el pistolete.
Antes del aumento de la amenaza con armas 3D, la polic¨ªa ya persegu¨ªa de cerca un problema paralelo: el env¨ªo separado por paqueter¨ªa de armas desmontadas que se pod¨ªan volver a montar en destino. A pesar de la dificultad de analizar millones de paquetes, es un tipo de amenaza m¨¢s controlable: adem¨¢s de las armas terminadas, hay piezas esenciales que tambi¨¦n son trazables con un identificador. Con la impresi¨®n 3D la capacidad de las autoridades de encontrar al due?o o comprador de una pieza desaparece.
El congreso de oto?o en Madrid aspira precisamente a debatir la posibilidad de trazar de alg¨²n modo la compra de m¨¢s de una impresora para uso personal o buscar legislaci¨®n que permita reducir los riesgos. Fuentes policiales temen tambi¨¦n que despu¨¦s de las impresoras 3D de pl¨¢stico lleguen las de metal: ¡°Ya existen impresoras en metal: oro, titanio, pero son bastante m¨¢s caras. Se han visto bicicletas y pr¨®tesis. Aunque no baja de 200.000 o incluso medio mill¨®n de euros¡±, dice Gonz¨¢lez. Una de las dificultades relativas hoy para los criminales con las armas 3D es la munici¨®n, que todav¨ªa debe comprarse o conseguirse. En internet hay ejemplos de fabricaci¨®n casera, pero requiere m¨¢s destreza.
No solo la polic¨ªa busca controlar mejor esta nueva amenaza. Tambi¨¦n los peritos experimentan porque saben que pronto les llegar¨¢ la hora de ir a un tribunal a dar detalles: ¡°A¨²n no hemos tenido ning¨²n caso, pero se ha convertido en algo real. Yo tengo ya una impresora funcionando 24 horas para entenderla mejor¡±, dice Fernando Mairata de Anduiza, forense tecnol¨®gico y presidente de la Asociaci¨®n Profesional de Peritos de Nuevas Tecnolog¨ªas.
En el campo de las nuevas tecnolog¨ªas, solo los drones suponen otro riesgo creciente en el ¨¢mbito de terroristas solitarios, pero las fuerzas del orden tienen ya m¨¢s recursos para encontrar a sus due?os.