¡®Press Start¡¯: un documental para desenterrar la historia del videojuego espa?ol

Cuando empez¨® la pandemia, Diego Vargas se dispon¨ªa a comenzar un proyecto de v¨ªdeo en Ceuta. ¡°Primera ola de covid-19 y encerrado en el hotel¡±, resume por tel¨¦fono el desarrollador y productor director ejecutivo del estudio Ikigai Play. Por tel¨¦fono, su mujer le coment¨® que en aquellos d¨ªas hab¨ªa visto Highscore, un documental sobre la historia de los videojuegos centrado en los grandes ¨¦xitos japoneses y estadounidenses.

Aquella recomendaci¨®n y el tiempo de recogimiento forzado fueron el caldo de cultivo de ...

Cuando empez¨® la pandemia, Diego Vargas se dispon¨ªa a comenzar un proyecto de v¨ªdeo en Ceuta. ¡°Primera ola de covid-19 y encerrado en el hotel¡±, resume por tel¨¦fono el desarrollador y productor director ejecutivo del estudio Ikigai Play. Por tel¨¦fono, su mujer le coment¨® que en aquellos d¨ªas hab¨ªa visto Highscore, un documental sobre la historia de los videojuegos centrado en los grandes ¨¦xitos japoneses y estadounidenses.

Aquella recomendaci¨®n y el tiempo de recogimiento forzado fueron el caldo de cultivo de Press Start, el punto de vista espa?ol de este sector, que Vargas y su equipo llevan cocinando desde hace un a?o y para el que est¨¢n buscando financiaci¨®n en la plataforma de micromecenazgo Kickstarter. ¡°No es un documental para la industria sino un documental de celebraci¨®n en el que la gente se sorprende y se d¨¦ cuenta de por qu¨¦ el videojuego es cultura¡±, promete. Con la recaudaci¨®n esperan costear los traslados para la grabaci¨®n de las entrevistas que les quedan pendientes y la posproducci¨®n de la serie.

Vargas conoce la industria por fuera y por dentro. Durante mucho tiempo, experiment¨® el sector del videojuego espa?ol igual el resto de los mortales: como un simple jugador. ¡°Siempre he querido hacer videojuegos, desde peque?o¡±, reconoce. Pero por aquel entonces la ausencia de programas de formaci¨®n reorient¨® sus pasos a la publicidad. ¡°Me tir¨¦ 20 a?os hasta que un d¨ªa en una entrega de premios vi un estand de U-tad [el Centro Universitario de Tecnolog¨ªa Digital, que ofrece programas formativos en desarrollo de videojuegos o animaci¨®n, entre otros]¡±, recuerda.

Entonces comenz¨® a cumplir su sue?o. Logr¨® pagar la matr¨ªcula con una inesperada devoluci¨®n de Hacienda, desarroll¨® sus primeros juegos, gan¨® sus primeros premios¡­ Incluso conoci¨® a sus h¨¦roes: ¡°Estaba Tim Schafer en la GameLab y se interes¨® por nuestro juego. Le dije: ¡®Gracias, t¨ªo, por haberme hecho tan feliz durante tantos a?os¡¯. Me dio un golpe de realidad, me fui corriendo y vomit¨¦ en la calle¡±.

Una vez dentro de la industria, Vargas conoci¨® tambi¨¦n sus inclemencias. El primer proyecto que montaron con Ikigai Play fue ¡°un fiasco absoluto¡± despu¨¦s de cuatro a?os de trabajo. ¡°Eso para el equipo fue un palazo impresionante. Acabamos volviendo a nuestros trabajos¡±, comenta. Runner Heroes cosech¨® muy buenas cr¨ªticas, pero no lleg¨® a dar ganancias. ¡°Nos pas¨® como a La Abad¨ªa del Crimen¡±, resume, recordando el t¨ªtulo que en su momento pas¨® desapercibido y ahora es un juego de culto.

Esas luces y sombras extendidas a lo largo de cuatro d¨¦cadas son las que aspira a retratar en Press Start, desde la llegada de los ¡°pioneros del p¨ªxel¡± y t¨ªtulos como La Pulga, considerado el primer videojuego patrio, pasando por la llamada edad de oro del videojuego espa?ol en los ochenta, con estudios como Indescomp, Opera Soft, Erbe, Dinamic Multimedia o Pyro, la crisis de la pirater¨ªa o el pelotazo de PC F¨²tbol, hasta la ¨²ltima oleada de ¨¦xitos independientes. Todo contado por sus protagonistas, que forman ya un elenco de 76 voces cercanas a la industria.

?Una nueva edad de oro?

Vargas encuentra paralelismos en los extremos de la historia que se dispone a contar. ¡°En la primera ¨¦poca tambi¨¦n eran estudios que trabajaban en su casa, pero el concepto ha cambiado much¨ªsimo. Queremos que se vea la calidad brutal de talento que hay en Espa?a y c¨®mo se ha aprendido a hacer videojuegos¡±, se?ala. Pero considera perdida la fuerte identidad que el pa¨ªs tuvo en el exterior durante el pasado dorado de la industria. ¡°Inglaterra estaba deseando que salieran nuestros juegos¡±, subraya.

Lo que no descarta es que el trono sea recuperable. El productor asiste con optimismo al empuje de t¨ªtulos como Gris, de Nomada Studios; Rime, de Tequila Works; o Blasphemous, de The Game Kitchen. ¡°Se est¨¢ ganando otra vez esa identidad. Pero no se est¨¢ ganando el conocimiento. Si t¨² a un espa?ol le dices que Gris est¨¢ hecho en Espa?a, es probable que no lo sepa¡±, argumenta. En este contexto, Press Start busca hacer justicia a las glorias pasadas ?¨Cy a los momentos no tan gloriosos?¨C y poner en valor los contenidos que se est¨¢n desarrollando en la actualidad. ¡°Esa es otra gran raz¨®n por la que hacemos este documental. No se puede perder esta memoria¡±.

Pese a todo, el intento de sacar adelante Press Start a base de financiaci¨®n colectiva no est¨¢ avanzando al ritmo que Vargas esperaba. Llevan recaudados 7.000 euros de los 165.000 que aspiran a conseguir. Y el plazo para su campa?a concluye en apenas 10 d¨ªas. ¡°No tengo explicaci¨®n de por qu¨¦. La campa?a no est¨¢ funcionando, pero hay aceptaci¨®n. Todo el mundo quiere ver un documental as¨ª¡±, comenta. Si la v¨ªa de Kickstarter no funciona, el siguiente paso ser¨¢ ofrecerlo a productoras. ¡°Lo estamos haciendo as¨ª porque creemos que esto es un trabajo de comunidad en el que todo el mundo puede participar¡±.

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