Una misi¨®n: lograr que el coraz¨®n del comercio pueda latir al un¨ªsono
Adyen integra todos los canales de venta del mundo f¨ªsico y el universo ¡®online¡¯ en sistemas ¨²nicos que homogeneizan la gesti¨®n de las compras, independientemente del ¨¢mbito del que procedan. Se trata del comercio unificado, una evoluci¨®n que trasciende las posibilidades del comercio multicanal y que redunda en un servicio de mucha mayor calidad al cliente
Un cliente que lo quiere a un clic. Un cliente que no se lo compra si no lo prueba antes. Un cliente que quiere pagar una experiencia personalizada. Un cliente que solo busca una transacci¨®n r¨¢pida y efectiva. Y, a lo mejor, todos estos clientes descritos son, en realidad, una misma persona. La posibilidad de c¨®mo efectuar una compra de un art¨ªculo se ha multiplicado. Hay casi infinitos caminos para llegar al objeto/servicio de deseo que han nacido en el universo online. Pero tambi¨¦n sigue existiendo, para muchas grandes marcas, un gran volumen de ventas que suceden in situ, en la tienda f¨ªsica. Y al existir todas estas maneras de bombear el caudal econ¨®mico de la actividad comercial, existe tambi¨¦n el riesgo del colesterol a gestionarlas: incomunicaci¨®n de equipos humanos, incomunicaci¨®n de equipos t¨¦cnicos y riesgos de fraude online por la creciente amenaza del cibercrimen.
La misi¨®n (y visi¨®n) que se autoimpone Adyen es hacer que este coraz¨®n del comercio lata al un¨ªsono a trav¨¦s de todas las posibles v¨ªas donde puede producirse este encuentro. Y es una visi¨®n que tiene nombre y apellidos: comercio unificado. ¡°Es una evoluci¨®n de lo que antes llam¨¢bamos comercio omnicanal: la posibilidad para el usuario de adquirir el producto de una marca por m¨²ltiples v¨ªas. Esa experiencia, para el cliente, ya era buena en el multicanal. Nosotros incidimos en el otro lado, en el del comercio, ofreciendo una serie de sistemas ¨²nicos que homogeneizan la gesti¨®n de las compras de una marca, venga la compra de donde venga ?Qu¨¦ significa esto? Que al final es mucho m¨¢s sencillo, mucho m¨¢s escalable y mucho m¨¢s automatizado¡±, explica Juan Jos¨¦ Llorente, country m¨¢nager para Espa?a y Portugal de Adyen.
Cliente y empresa, juntos
?Por qu¨¦ aporta tanto valor a las compa?¨ªas unificar sus canales de venta? Hay dos grandes motivos que integran a los dos actores de cualquier transacci¨®n: cliente y empresa. Desde el lado del cliente, la percepci¨®n del cambio ser¨¢ mucho menor. Pero, tal vez sin que ¨¦l lo perciba, el servicio que recibe es de mucha mayor calidad porque, al otro lado, la empresa tiene conectados todos sus canales y servicios con sistemas ¨²nicos, lo que le permite un conocimiento exhaustivo sobre cada tipo de cliente y, lo m¨¢s crucial, que esa informaci¨®n sea coherente y compartida por todas las posibles v¨ªas comerciales de una empresa: su dimensi¨®n online y sus tiendas f¨ªsicas. ¡°Por poner un ejemplo gr¨¢fico: en la omnicanalidad t¨² compras online un producto y luego te vas a una tienda f¨ªsica y lo devuelves. Pero lo que hay detr¨¢s de ese servicio es una operaci¨®n manual de la persona en tienda, que se pasa entre 5 y 10 minutos cogiendo la mercanc¨ªa, conect¨¢ndose a Internet para hacer la devoluci¨®n, cambiando el inventario¡ Es decir, pierde este tiempo para que los sistemas se hablen. En el comercio unificado esto est¨¢ totalmente automatizado. Los sistemas son ¨²nicos y se intercomunican entre s¨ª¡±, detalla Llorente.
Es una evoluci¨®n de lo que antes llam¨¢bamos comercio omnicanal: la posibilidad para el usuario de adquirir el producto de una marca por m¨²ltiples v¨ªasJuan Jos¨¦ Llorente, country m¨¢nager para Espa?a y Portugal de Adyen
Esos 10 minutos por persona no parecen mucho. Pero son 10 minutos por transacci¨®n. ¡°En el contexto actual, especialmente por la pandemia, se han multiplicado las compras online. Si antes ten¨ªas tres devoluciones, ahora tienes 30 y el mismo personal para gestionarlas. Se convierte en inviable si no tienes un sistema de comercio unificado¡±, asevera Llorente. Esta necesidad se plasma en datos. En el Informe Adyen del Retail 2022, presentado en el Espacio WOW de Madrid en noviembre del a?o pasado, la compa?¨ªa present¨® unas cifras que confirman que la digitalizaci¨®n es ya mayoritaria: el 67% de los retailers en Espa?a priorizan una estrategia de digitalizaci¨®n. Es decir, se someten a la omnicanalidad, porque Internet es ya en s¨ª misma una cantera inagotable de posibilidades de compra. Por tanto, se ven en la necesidad de unificar su gesti¨®n de dichas compras.
De cara al futuro cercano, Llorente apunta algunos sectores que a buen seguro explotar¨¢n todas las posibilidades del comercio unificado. ¡°Por un lado, el sector de la energ¨ªa es el que va m¨¢s lento, pero el que tiene m¨¢s margen de mejora para esta estrategia de poner al cliente en el centro de una experiencia unificada. Por otro, tengo muchas expectativas de las experiencias que nos van a dar a corto plazo los sectores del turismo y el retail, que en Espa?a suponen una parte enorme en el PIB. Me encantar¨ªa comprobar que tendremos referentes a nivel mundial en experiencia de hoteles¡±, apostilla el ejecutivo de Ayden.
Los datos, desde luego, parecen darle la raz¨®n: en 2022, los 25 millones de euros que el Ministerio de Turismo anunci¨® para ayudar a la digitalizaci¨®n del sector fueron todo un ¨¦xito de convocatoria, pues fueron solicitados por 168 empresas del sector.
Un cliente, un 'token'
Para personalizarse, curiosamente, los clientes necesitan volverse anónimos. La tokenización, una estrategia habitual en procesos online que requieren un gran blindaje de seguridad, es otra de las revoluciones del comercio unificado. El cliente se transforma en un número que lo hace anónimo pero que, a la vez, identifica sus datos de pago. “Ese token identifica al cliente y al establecimiento (físico u online) donde se realiza el pago, impidiendo que, en caso de fraude, el token pueda utilizarse en otro contexto. Como es de un estándar de seguridad mayor, la aceptación de pagos por parte de los bancos es mayor y, por tanto, también lo es la conversión de ventas de los retailers.” La preocupación por la seguridad, además, está justificada: desde 2001, el cibercrimen ha crecido un 1517%, hasta suponer al mundo una pérdida superior a la de 700.000 euros por hora. El año pasado se perdieron más de 8,3 billones de euros a nivel mundial. Es decir, unas 8 veces el valor del Producto Interior Bruto español.