Aznar, pont¨ªfice
Conforme avanz¨® la entrevista se hizo claro que los ¨²nicos puentes que le interesaban eran los que le permit¨ªan salvar la orilla de las preguntas sin mojarse
Se present¨® Aznar a ?vole como un bridger, lo que podr¨ªa traducirse por puentista o puenteador, como los quinquis de mi barrio cuando afanaban bugas. O como un hacedor de puentes, es decir, un pontifex o pont¨ªfice, que le pega m¨¢s. Conforme avanz¨® la entrevista se hizo claro que los ¨²nicos puentes que le interesaban eran los que le permit¨ªan salvar la orilla de las preguntas sin mojarse. Tambi¨¦n insisti¨® en que ya hab¨ªa tomado el puente hacia su jubilaci¨®...
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Se present¨® Aznar a ?vole como un bridger, lo que podr¨ªa traducirse por puentista o puenteador, como los quinquis de mi barrio cuando afanaban bugas. O como un hacedor de puentes, es decir, un pontifex o pont¨ªfice, que le pega m¨¢s. Conforme avanz¨® la entrevista se hizo claro que los ¨²nicos puentes que le interesaban eran los que le permit¨ªan salvar la orilla de las preguntas sin mojarse. Tambi¨¦n insisti¨® en que ya hab¨ªa tomado el puente hacia su jubilaci¨®n, como dec¨ªa el anuncio aquel de la compa?¨ªa de seguros, y no lo va a descruzar, por mucho que a diario le pidan que vuelva.
Desde su lado del puente devolvi¨® tantas pelotas que lleg¨® a negar haber sido presidente del Gobierno. Encaden¨® una serie de respuestas ¡°y yo tampoco sab¨ªa nada¡±, y cuando ?vole replic¨®: ¡°Pero yo no era presidente del Gobierno¡±, Aznar dijo de carrerilla: ¡°Y yo tampoco¡±. Para cuando cay¨® en el lapsus, que corrigi¨® enseguida, la entrevista ya recordaba a un chiste de Gila, ese donde Sherlock Holmes hace que Jack el Destripador confiese mediante indirectas del tipo ¡°alguien ha matado a alguien¡±.
La puesta en escena ayudaba. Oscura, pobre, con una mesa en medio m¨¢s de interrogatorio que de di¨¢logo, aquello parec¨ªa un encuentro clandestino. Ignoro por qu¨¦ la filmaron as¨ª, ya que una de las mayores virtudes de Jordi ?vole es que, a diferencia de Aznar, crea climas de buen rollo que propician la suavidad y la confidencia. Si fue un tercer grado, el interrogador no sac¨® nada en claro, aunque el interrogado tampoco logr¨® su objetivo. Supongo que quer¨ªa darse brillo liberal, presentarse como un viejo l¨ªder sensato de un tiempo mejor, cuando no hab¨ªa populismos, pero solo vimos a un p¨²gil estilista que vence por puntos, cuando el oponente se cansa de preguntar en vano. El Aznar de siempre, vaya.