Mierda

No s¨¦ si debido a mis escasas luces soy el ¨²nico que tiene un grave y permanente problema de comunicaci¨®n por tratar de comprender el discurso de la mayor¨ªa de la clase pol¨ªtica. Nunca s¨¦ lo que pretenden expresar, aunque reconozco su camale¨®nica capacidad para decir un d¨ªa una cosa y al siguiente la contraria. Sin el menor sonrojo, por supuesto. Sin que les pongan una multa o los entrullen.

Por ello, agradezco captar di¨¢fanamente el significado de lo que sale por su boca. Por ejemplo, que ?scar Puente, alcalde de Valladolid y alguien afortunadamente bronco y c¨¢ustico cuando algo le repele en su gremio, haya definido a Toni Cant¨®, profesional de la trashumancia y la deserci¨®n bien pagadas, como un mierda y un memo. Con el primer calificativo me aclaro sobre el comportamiento y fecalidad de ese se?or que afirmaba impunemente que era actor. El segundo, sobra. O en cualquier caso, es un memo que sabe buscarse una lujosa vida en la ci¨¦naga. O sea, algo de execrable listeza poseer¨¢.

Y Ayuso le destina, en oce¨¢nica soledad, a una movida involuntariamente c¨®mica denominada Oficina del Espa?ol. Asegura la agradecida Ayuso para justificar las diez monedas de plata que recibe el traidor, que ese cargo no es descabellado. Tampoco un chiringuito, sino un organismo pol¨ªtico para un pol¨ªtico. Y que el presidente del pa¨ªs es el m¨¢ximo especialista en buscarle curro a sus amigos en las administraciones. Ninguna duda por mi parte, cositas eternas y asquerosas de la naturaleza no solo humana, sino pol¨ªtica. El resumen que hace Puente del futuro trabajo de Cant¨® no es l¨ªrico ni espiritual, pero s¨ª realista y castizo: ¡°Va a cobrar 75.000 euros por rascarse los huevos a dos manos¡±.

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