?Qui¨¦n ganar¨¢ Eurovisi¨®n 2023? Los favoritos seg¨²n las apuestas, el idioma y el orden de actuaci¨®n
Analizamos los finalistas de este a?o y su encaje en el retrato hist¨®rico de los ganadores de festival
La final de Eurovisi¨®n a¨²n no se ha celebrado, pero todos los ojos ya est¨¢n puestos en la principal favorita, la sueca Loreen. Su canci¨®n Tattoo cuenta con el 50% de las opciones de victoria, seg¨²n las cuotas de una docena de casas de apuestas.
El siguiente gran candidato es el finland¨¦s K??rij?, al que los apostadores dan un 21% de las opciones. Ucrania, que defiende el t¨ªtulo conseguido el mayo pasado en Italia, es la tercera favorita, con un 6%. La espa?ola Blanca Paloma, que competir¨¢ con la canci¨®n Eaea, se encuentra en un tercer grupo, con un 3%.
En el siguiente gr¨¢fico puede consultar las opciones de todos los participantes en la final y escuchar en Spotify cada canci¨®n pinchando en el bot¨®n.
Las apuestas suelen predecir bien Eurovisi¨®n. Los ¨²ltimos tres a?os han acertado el ganador final del concurso y desde 2016 siempre han dado al ganador y el segundo clasificado entre sus tres favoritos. Con estos datos, la espa?ola Blanca Paloma no cuenta con demasiadas opciones, aunque el a?o pasado Chanel y su SloMo batieron ligeramente las previsiones que le daban como quinta clasificada, y acab¨® tercera.
Si atendemos a la popularidad de los finalistas en Spotify, la sueca tambi¨¦n parte con ventaja, pero la siguen de cerca dos nuevos actores: la noruega Alessandra, con Queen of Kings, y el italiano Marco Mengoni, con Due vite.
La edici¨®n menos ac¨²stica de la d¨¦cada
En las canciones de esta final de Eurovisi¨®n sonar¨¢n menos acordes de guitarra y piano, y no solo entre las favoritas. Las m¨¦tricas de Spotify revelan que la gala ser¨¢ la m¨¢s electr¨®nica de la d¨¦cada y tambi¨¦n estar¨¢ entre las m¨¢s en¨¦rgicas.
Aun as¨ª, entre las dos propuestas con m¨¢s posibilidades de vencer hay diferencias claras: las dos son en¨¦rgicas, pero Tattoo es m¨¢s triste y menos bailable, mientras que Cha Cha Cha, de K??rij?, es m¨¢s positiva y un poco m¨¢s ac¨²stica.
Las dem¨¢s finalistas siguen una senda parecida. Solo se desmarcan las canciones de Armenia y Estonia. La int¨¦rprete de esta ¨²ltima actuar¨¢ acompa?ada ¨²nicamente de un piano, mientras que la representante armenia tocar¨¢ los dos extremos: aunque pasa la mitad de su actuaci¨®n de forma similar y sentada en el suelo, la termina con un acompa?amiento m¨¢s plural.
Canciones en ingl¨¦s, imparables. Mezclas, no tan rentables
En el predominio de lo electr¨®nico y el origen n¨®rdico se acaba el parecido entre Tattoo y Cha Cha Cha. La propuesta de la sueca Loreen est¨¢ escrita ¨ªntegramente en ingl¨¦s, mientras que K??rij? subir¨¢ al escenario rapeando en finland¨¦s.
Si nos fiamos de la historia del certamen, Suecia parte con ventaja: dos de cada cinco victorias se cantaron en la lengua de Shakespeare, que es la predominante desde 1999, cuando se permiti¨® a cada participante elegir el idioma de su canci¨®n. Este dominio se ha visto amenazado desde 2017, cuando Salvador Sobral gan¨® cantando en portugu¨¦s su Amor pelos dois. Las dos ¨²ltimas ganadoras, Italia y Ucrania, tambi¨¦n participaron en su idioma.
El s¨¢bado solo sonar¨¢n ¨ªntegramente en otros idiomas 9 de las 26 canciones. Una de ellas ser¨¢ la espa?ola.
Tambi¨¦n habr¨¢ propuestas mixtas como Heart of Steel, con la que el d¨²o Tvorchi representar¨¢ a Ucrania. Solo este pa¨ªs puede presumir de haber rentabilizado las recurrentes mezclas de ingl¨¦s con otras lenguas: suyas son las dos ¨²nicas victorias cosechadas por las 83 canciones de este tipo que se han presentado en la historia de festival. Los c¨®cteles que no inclu¨ªan el ingl¨¦s (17) nunca han ganado.
A Espa?a tampoco le ha ido mal: Chanel escal¨® el a?o pasado al tercer puesto con el tema SloMo y su estribillo biling¨¹e: take a video, watch it slow mo, mo, mo¡
Suecia acaricia el r¨¦cord de Irlanda
En 1996, Irlanda se convirti¨® en el pa¨ªs que m¨¢s veces ha ganado Eurovisi¨®n. Siete triunfos que nadie ha conseguido igualar¡ ?Hasta ahora? Si se cumplen las apuestas, Suecia tambi¨¦n conseguir¨¢ su s¨¦ptima victoria en el festival, e Irlanda, eliminada en la primera semifinal, no podr¨¢ hacer nada por remediarlo.
Las otras favoritas no tienen tanta ventaja. Noruega cuenta con tres victorias y Finlandia solo prob¨® las mieles del ¨¦xito en 2006, cuando Lordi llen¨® el escenario de orcos. De hecho, ambos pa¨ªses destacan m¨¢s por sus fracasos: est¨¢n entre los candidatos que m¨¢s ¨²ltimos puestos han cosechado en el festival.
En el gr¨¢fico se pueden explorar todas las ganadoras y tambi¨¦n las que quedaron en cada posici¨®n. El Reino Unido tiene el imbatible r¨¦cord de 16 ediciones rozando el ¨¦xito con un segundo puesto. Le siguen a gran distancia Francia (5) y Espa?a (4).
?A d¨®nde van los preciados twelve points? No muy lejos
Actuaciones cada vez m¨¢s espectaculares y escenarios con pantallas de suelo al techo no consiguen a¨²n eclipsar la magia del reparto de puntos y la oportunidad que brinda a los espectadores para acusar a cada pa¨ªs de votar a sus vecinos.
El reparto por regiones desde 1975 hasta 2022 evidencia que los jurados no suelen mirar muy lejos cuando toca asignar sus codiciados 12 puntos. En este contexto, cabe esperar que hasta los candidatos m¨¢s desamparados se beneficien de una de las certezas del festival: los cuatro puntos cardinales se prefieren a s¨ª mismos en la mayor¨ªa de las ocasiones.
Reparto de puntaciones m¨¢ximas. Origen y destino de los 12 puntos otorgados por el jurado de cada regi¨®n desde 1975 a 2022
Origen de
los 12
puntos
Destino
de
los 12 puntos
Sur
Norte
Oeste
Este
Norte
Sur
Oeste
Este
Se excluyen Israel y Australia.
Fuente: Datagraver.com y elaboraci¨®n propia.
Los 12 puntos del sur se quedan en el sur en la mitad de las ocasiones, y lo mismo ocurre con el norte. Ambas regiones coinciden adem¨¢s con los vecinos del oeste en su aversi¨®n a votar al este, que en ning¨²n caso recibe m¨¢s del 15% de las puntuaciones m¨¢ximas.
Estos favoritismos son parecidos en el caso del televoto. Pero el equilibrio podr¨ªa cambiar este a?o. En la final del s¨¢bado la voz del p¨²blico no solo llegar¨¢ desde los pa¨ªses con derecho a participar en el festival. Este a?o se admitir¨¢n votaciones del resto del mundo.
La maldici¨®n de actuar al principio de la gala
Hay estudios que apuntan que los jurados, en especial los no profesionales, tienden a valorar mejor a quienes act¨²an al final del concurso. Los datos de puntuaciones otorgadas por el jurado profesional y el p¨²blico a trav¨¦s del televoto desde 2009, cuando entra en juego esta doble v¨ªa, evidencian el coste de actuar al principio.
Durante las ¨²ltimas 13 ediciones, los finalistas que han actuado entre el primer y el sexto puesto rara vez han conseguido hacerse con m¨¢s del 8% de los votos. Si la maldici¨®n sigue vigente, los afectados este a?o ser¨¢n Austria, Portugal, Suiza, Polonia y Serbia.
Pasado el quinto puesto, las valoraciones son m¨¢s variadas: quienes act¨²an m¨¢s tarde han llegado a acumular mayores porcentajes de la puntuaci¨®n, pero tambi¨¦n se han quedado por debajo del 8%. El r¨¦cord lo tiene la ucrania Kalush Orchestra, que el a?o pasado concentr¨® un 19% de los puntos y actu¨® en duod¨¦cima posici¨®n.
Ganadoras hasta los 40, ganadores que no pasan de 50
Si Loreen gana en Liverpool ser¨¢ una ganadora at¨ªpica. M¨¢s que cuando concurs¨® por primera vez en 2012, con 28 a?os. La media de edad de las ganadoras es de 24 a?os, lejos de los 39 que tiene ahora la sueca, que se convertir¨ªa en la segunda vencedora m¨¢s veterana del concurso tras Linda Martin, que represent¨® a Irlanda en 1992 con 40 a?os.
En el extremo opuesto est¨¢ la belga Sandra Kim, que deslumbr¨® al jurado en 1986 y sembr¨® la pol¨¦mica cuando se supo que no ten¨ªa 15 a?os, como dec¨ªa su canci¨®n, sino 13.
Esa barrera de edad no parece ser la misma para los candidatos masculinos: la media de los ganadores asciende a 30 a?os. Adem¨¢s, los mayores tambi¨¦n lo son m¨¢s: George Olsen y Dave Benton hab¨ªan alcanzado ya el medio siglo cuando representaron a Dinamarca y Estonia, respectivamente.