Los ?ngeles, cercada por el fuego: tres enormes incendios dejan cinco muertos y a 155.000 bajo ¨®rdenes de evacuaci¨®n

La noche del martes no dio tregua, ninguna tregua, en el condado de Los ?ngeles. Tampoco el d¨ªa: este mi¨¦rcoles los arrasadores fuegos y los vientos de m¨¢s de 160 kil¨®metros por hora han ido llev¨¢ndose a su paso todo lo que se les ha puesto por delante. Coches, matorrales, casas y barrios enteros han desaparecido engullidos por las llamas que ya han quemado m¨¢s de 10.000 hect¨¢reas. Tres zonas son las m¨¢s preocupantes: la primera, donde empez¨® todo el martes, en Pacific Palisades, al sudoeste, entre la costa del Pac¨ªfico y la monta?a; la segunda, la del fuego de Eaton, que afecta a dos localidades al noreste de la ciudad, Pasadena y su gemela del norte, Altadena, que ha dejado cinco fallecidos por el momento; y la tercera, la declarada m¨¢s tarde, la del fuego de Hurst en la zona de Sylmar. Hay m¨¢s de 1.000 edificios destruidos y unos 155.000 residentes est¨¢n bajo ¨®rdenes de evacuaci¨®n. La alcaldesa de la ciudad californiana, Karen Bass, ha declarado el estado de emergencia, y el presidente Joe Biden ha emitido una declaraci¨®n de ¡°cat¨¢strofe grave¡± para el Estado y enviar¨¢ apoyos federales para asistir en la contenci¨®n de las llamas y la atenci¨®n a los afectados.

Los servicios de emergencia han ordenado la evacuaci¨®n de m¨¢s de 37.000 habitantes de la zona de Pacific Palisades, donde se han quemado unos 15.800 acres, m¨¢s de 6.400 hect¨¢reas. All¨ª comenz¨® el primer foco sobre las 10:30 de la ma?ana. Se fue extendiendo tanto al norte como al sur por el ca?¨®n de Topanga, una zona que desde la playa se convierte r¨¢pidamente en monta?a. Las autoridades han pedido a los habitantes que huyan a la mayor rapidez; los atascos han sido inmensos, haciendo que algunos de ellos abandonen sus coches en mitad de las carreteras y echen a correr. En esta zona, el incendio segu¨ªa hacia el este y rozaba la popular localidad de Santa M¨®nica, hasta que en la tarde-noche del martes se dieron ¨®rdenes de evacuar all¨ª tambi¨¦n. Muchas de las escuelas del ¨¢rea, de las que han sobrevivido, estar¨¢n cerradas por lo menos este mi¨¦rcoles.

Es aqu¨ª donde la situaci¨®n es m¨¢s incontrolable. Seg¨²n ha explicado el jefe de bomberos, Anthony C. Marrone, el incendio de Pacific Palisades est¨¢ ¡°controlado al 0%¡±. Como contaban las noticias locales, los bomberos son incapaces de extinguir los incendios de las casas, y est¨¢n tratando simplemente de que no salten de una a otra para que no afecten a otros barrios. Los fuertes vientos, adem¨¢s, han impedido en varias ocasiones del d¨ªa que helic¨®pteros e hidroaviones vuelen para rociar el agua desde arriba. Adem¨¢s, como informa el diario Los Angeles Times, esta zona est¨¢ teniendo problemas porque los hidrantes se est¨¢n quedando sin agua. El departamento de aguas est¨¢ trabajando para que vuelvan a tener suministro. Seg¨²n conocedores de la zona y del sistema, es un problema habitual de la ciudad, tanto por la falta de puesta al d¨ªa de las estructuras y porque las mismas est¨¢n muy anticuadas.

Pacific Palisades es conocida, tambi¨¦n, por ser el hogar de muchos nombres conocidos del mundo del espect¨¢culo. Es una zona pintoresca, con hermosas vistas, entre la monta?a y el mar, menos tur¨ªstica que Malib¨² y Santa M¨®nica y con acceso a la naturaleza y a la playa. De ah¨ª que algunos de ellos hayan sido evacuados, como los actores Ben Affleck y Mark Hamill; J.J. Reddick, el entrenador de Los Angeles Lakers; el actor Eugene Levy (que ha contado a People c¨®mo se vio atrapado por el humo en la zona de Temescal Canyon); la actriz Jamie Lee Curtis (¡±Mi familia est¨¢ a salvo¡±, ha afirmado) o el tambi¨¦n int¨¦rprete James Wood, que ha ido contando en X (el antiguo Twitter) c¨®mo se ha marchado sin nada y que desconoce si su casa ha sobrevivido. En total, en las zonas de Palisades, Calabasas y Los ?ngeles se han evacuado ya 37.000 residentes y hay 15.000 estructuras en riesgo.

El segundo incendio en gravedad y alcance es el de Pasadena y Altadena, dos localidades al noreste de la ciudad de Los ?ngeles y rodeadas, como es habitual en todo el condado, de abundante vegetaci¨®n y monta?as. El fuego Eaton, como se llam¨® originalmente, cerca ambas, con ¨®rdenes de evacuaci¨®n que tambi¨¦n afectan a las zonas de Arcadia y Sierra Madre. Han sido evacuados ya 32.000 residentes, mientras que hay 13.000 estructuras en riesgo. La zona de la pintoresca Pasadena, una de las joyas del condado por sus museos y su arquitectura, ya ha visto quemarse m¨¢s de 4.290 hect¨¢reas (10.600 acres). Es aqu¨ª donde hay dos fallecidos, seg¨²n han confirmado las autoridades en una conferencia de prensa celebrada esta ma?ana.

El tercero de los incendios m¨¢s graves es el de Hurst, que afecta especialmente a la ciudad de Sylmar, y que ya ha quemado 500 acres (m¨¢s de 200 hect¨¢reas), seg¨²n el departamento de bomberos del condado. Hurst se encuentra al norte, en el condado de San Fernando, y todos los bomberos del ¨¢rea est¨¢n tratando de extinguir las llamas.

Todo ello hace que se hayan cortado carreteras de todo el sur de California, y que las autoridades hayan advertido de que no se salga a no ser que sea necesario. Entre ellas, la c¨¦lebre Pacific Coast Highway, la carretera que une toda la costa del Pac¨ªfico, ha sido cerrada en parte. Tambi¨¦n trozos de la interestatal 10, de la 210 y de la I-5. Universidades como la de Pepperdine, en pleno Palisades, han suspendido las clases. El anuncio de las candidaturas a los premios del sindicato de actores, que se daban a conocer este mi¨¦rcoles, tambi¨¦n ha sido cancelado.

La causa de los incendios se desconoce por el momento, pero ha sido una sucesi¨®n de hechos lo que los ha desencadenado. Diciembre y enero deber¨ªan ser algunos de los meses m¨¢s lluviosos en el condado de Los ?ngeles, con alrededor de 10 millones de habitantes, pero apenas ha ca¨ªdo una gota. Los meses anteriores, tampoco, lo que ha propiciado una extrema sequedad en la abundante vegetaci¨®n de Los ?ngeles y de las ciudades de su alrededor. Adem¨¢s, desde la ma?ana del martes los vientos empezaron a ser extremos, superando poco a poco los 60, 80, 100 y hasta los 160 kil¨®metros por hora. Pese a la cercan¨ªa con la costa del Pac¨ªfico, tambi¨¦n la humedad relativa es muy baja, lo que ha propiciado que cada peque?a mecha prenda mucho m¨¢s.