El cortometraje ¡®A Lien¡¯ lleva el horror de las deportaciones a la alfombra roja de los Oscar
La pel¨ªcula, nominada a Mejor Cortometraje de Ficci¨®n, reproduce el drama de una familia que acude a una cita para obtener una ¡®green card¡¯, en la que el padre acaba detenido

Una pareja y su hija peque?a acuden a una cita del Servicio de Inmigraci¨®n y Ciudadan¨ªa de Estados Unidos. Ella, estadounidense, y ¨¦l, centroamericano. Llevan varios a?os casados y la audiencia debe servir para que ¨¦l, como permite la ley, obtenga la anhelada green card, la tarjeta de residencia permanente. Lo que no deber¨ªa ser m¨¢s que un tr¨¢mite rutinario se convierte en una pesadilla cuando los agentes de ICE (el Servicio de Inmigraci¨®n y Control de Aduanas) lo detienen y deportan. Nada extra?o en los tiempos que corren de redadas a diestro y siniestro contra los migrantes indocumentados.
Esta vez, sin embargo, los protagonistas, Sophie y Oscar, son dos actores que reproducen el drama que est¨¢n viviendo miles de parejas de estatus migratorio mixto, amenazadas por la posible expulsi¨®n de uno de los c¨®nyuges. Realidad y ficci¨®n se mezclan en el cortometraje A Lien, que ha sido nominado y compite por la categor¨ªa de Mejor Cortometraje de Ficci¨®n. Dirigido por los hermanos Sam y David Cutler-Kreutz, de Nueva Jersey, la pel¨ªcula logra en sus 15 minutos mostrar la angustia e impotencia de las personas que ven como sus vidas dan un giro inesperado cuando se sumergen en los intrincados mecanismos de un sistema de inmigraci¨®n roto.
El corto se estren¨® en 2023, aunque las cinco semanas de Gobierno de Trump lo ha devuelto a la actualidad. En una entrevista con EL PA?S, Sam Cutler-Kreutz explica de d¨®nde surgi¨® la idea de realizarlo: ¡°Le¨ª un art¨ªculo en The New York Times en 2018 sobre este proceso y nos sorprendi¨® mucho la crueldad e injusticia. Sent¨ª que ten¨ªamos que hacer algo para defenderlo, mostrar el hecho de que est¨¢n tratando de hacer lo correcto, de pasar por el proceso legal, y acaban siendo perseguidos¡±.
La tensi¨®n no cesa en el cuarto de hora que dura la grabaci¨®n y en la que han usado t¨¦cnicas propias de las pel¨ªculas de terror para recrear la angustia de los protagonistas. Con el nerviosismo propio de acudir a una cita tan importante, la pareja se separa y, mientras Sophie se queda intranquila en la sala de espera, Oscar, acompa?ado de su hija Nina, pasa a ser interrogado por un agente. A partir de ah¨ª, la comunicaci¨®n entre la pareja queda limitada a los mensajes de texto y v¨ªdeo del tel¨¦fono celular, que evolucionan hasta el p¨¢nico causado por el devenir de los hechos. ¡°Es una especie de pel¨ªcula de terror sobre documentos¡±, la define Cutler-Kreutz. ¡°El tel¨¦fono se convierte en una c¨¢mara incontrolable, porque Oscar puede controlar lo que Sophie ve, pero ella est¨¢ limitada. El espectador est¨¢ limitado, lo que crea un ambiente aterrador¡±, explica.
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El presupuesto de A Lien fue m¨ªnimo y la mayor parte de los participantes trabajaron sin cobrar. Para elegir a los actores protagonistas, los hermanos Cutler-Kreutz buscaron entre unos 6.000 aspirantes. Victoria Ratermanis interpreta a Sophie, William Martinez a Oscar, y Koralyn Rivera, a la hija de ambos.
Debido a la falta de presupuesto el rodaje solo dur¨® cuatro d¨ªas y se realiz¨® en unas instalaciones que pod¨ªan emular una de las oficinas de USCIS (el Servicio de Inmigraci¨®n y Ciudadan¨ªa de Estados Unidos), pero sin llegar a pisar una de ellas. El guion fue el resultado de entrevistar a varios afectados y abogados de los migrantes, que contaron la experiencia de las personas que acuden creyendo que van a conseguir un documento que les permita residir de forma legal y la cita se convierte en una trampa para detenerlos y expulsarlos del pa¨ªs.
Cutler-Kreutz subraya que, a pesar de que los funcionarios aparecen sin mostrar empat¨ªa por la familia, no quisieron demonizar a los agentes de ICE. ¡°No hay villanos en este escenario. Si todos en el sistema piensan que est¨¢n haciendo su trabajo correctamente, el problema est¨¢ en el sistema, no en las personas. A eso se refiere la pel¨ªcula. Puede haber buenas personas en un sistema que tiene problemas y necesita ser reformado¡±, sostiene.
A Lien ha pasado por varios festivales y obtenido una buena aceptaci¨®n por parte de la cr¨ªtica y del p¨²blico, pero la nominaci¨®n al Oscar lleg¨® como una sorpresa. ¡°Es una locura, surrealista. Sinceramente, nunca esper¨¦ que esta pel¨ªcula llegara tan lejos. En cierto modo, creo que esper¨¢bamos que perdiera su relevancia¡±, reconoce. Una expectativa que est¨¢ lejos de producirse una vez que la Administraci¨®n de Donald Trump se emplea a fondo en aumentar el n¨²mero de deportados, sin discriminar entre quienes son delincuentes y quienes no.
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Cutler-Kreutz espera que la pel¨ªcula sirva para ¡°ver la inmigraci¨®n de una manera m¨¢s humanista y tratar de entender que las vidas de las personas est¨¢n en juego, las vidas de sus familias est¨¢n en juego, y que la mayor¨ªa de las personas que est¨¢n en este pa¨ªs, que son inmigrantes, est¨¢n haciendo todo lo posible por hacer lo correcto¡±.
Despu¨¦s de A Lien, los hermanos Cutler-Kreutz realizaron otro cortometraje, Trapped, que est¨¢ present¨¢ndose en varios festivales, y su pr¨®ximo proyecto es debutar con un largometraje. De momento, sin embargo, disfrutan del ¨¦xito de A Lien. ¡°Es muy emocionante que podamos llevar al equipo a los Oscar y devolverles una peque?a parte de toda la pasi¨®n, el arduo trabajo y el talento que pusieron en la pel¨ªcula. Estoy emocionado de caminar por la alfombra roja con ellos¡±, admite.
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