En defensa de Roy
Es injusto se?alar al embajador de Colombia en Londres, Roy Barreras, de la decisi¨®n del Reino Unido de volver a exigirles visa a los colombianos. La restricci¨®n brit¨¢nica es arbitraria y discriminatoria
S¨ª, el embajador Roy Barreras, en este a?o que lleva como el jefe de la delegaci¨®n colombiana ante el Reino Unido, se la ha pasado en un incesante ir y venir entre Londres y Bogot¨¢, como si no existieran correos electr¨®nicos, WhatsaApp, videollamadas, fax, tel¨¦fonos o, en su defecto, tel¨¦grafo. Como si su trabajo no fuera el de embajador ante una naci¨®n de importancia mayor, sino m¨¢s bien el de asesor externo de Gustavo Petro con despacho con vistas al almac¨¦n Ha...
S¨ª, el embajador Roy Barreras, en este a?o que lleva como el jefe de la delegaci¨®n colombiana ante el Reino Unido, se la ha pasado en un incesante ir y venir entre Londres y Bogot¨¢, como si no existieran correos electr¨®nicos, WhatsaApp, videollamadas, fax, tel¨¦fonos o, en su defecto, tel¨¦grafo. Como si su trabajo no fuera el de embajador ante una naci¨®n de importancia mayor, sino m¨¢s bien el de asesor externo de Gustavo Petro con despacho con vistas al almac¨¦n Harrod¡¯s.
El embajador viene cuando el presidente lo requiere para ¡°gestiones pol¨ªticas¡± y otras veces para adelantar ¡°gestiones pol¨ªticas propias¡±; para muchos se hizo tan com¨²n ver al embajador Roy en Bogot¨¢ que el comentario en el mundillo pol¨ªtico dec¨ªa, entre risas: ¡°al embajador Roy le gust¨® tanto Londres, que por eso viaja a Inglaterra cada dos o tres semanas¡±.
Pero esta vez la culpa no es de Roy. Es injusto se?alarlo como responsable de la penosa p¨¦rdida de la exenci¨®n de visa para ingreso al Reino Unido que gozamos durante cortos dos a?os. Un embajador poco puede hacer en lo que concierne a las decisiones de un Estado cualquiera sobre su pol¨ªtica de fronteras y en el caso de la decisi¨®n sobre Colombia, creo que hay mucho de discriminaci¨®n hacia el pa¨ªs y una gran excusa para que el Gobierno del primer ministro Keir Starmer pueda mostrar la sanci¨®n a los colombianos como un ¨¦xito de su nueva pol¨ªtica migratoria.
?O acaso no es una llamativa coincidencia que justo a dos d¨ªas del anuncio de la nueva exigencia para nosotros, el nov¨ªsimo Gobierno ingl¨¦s anuncie que se propone ¡°enderezar¡± un sistema migratorio completamente deficiente? As¨ª lo dice el titular del comunicado: Government restoring order of broken immigration system. Y luego el mismo texto desarrolla el anuncio culpando a los antiguos Gobiernos conservadores de ser aquellos que abrieron la puerta para que se disparara la llegada de inmigrantes. No hablan de colombianos. Hablan en gen¨¦rico. Pero los colombianos somos los sacrificados.
La organizaci¨®n Horizon Refugee, que hace seguimiento a los casos de solicitantes de asilo en el Reino Unido, se?ala que Colombia no est¨¢ en los 20 primeros pa¨ªses con nacionales pidiendo asilo a ese Estado y, sin embargo, nos ganamos la loter¨ªa. ?Por qu¨¦?
Porque para el gobierno brit¨¢nico es m¨¢s f¨¢cil hacerle ese desplante a Colombia antes que a cualquier otro de los pa¨ªses que est¨¢n por encima en la lista. Una naci¨®n con el estigma del narcotr¨¢fico, la delincuencia, la guerra y la pobreza no podr¨¢ cuestionar una decisi¨®n as¨ª. Es m¨¢s, ¡°ya estar¨¢n acostumbrados¡±, debieron pensar en el Home Office.
Y s¨ª, este puede ser un problema menor. Un ¡°drama de ricos¡±, pues ir al Reino Unido es algo muy costoso, por no decir que prohibitivo. Sin embargo, ahora entiendo al presidente con su anuncio de reciprocidad y de exigencia de visa a los visitantes que llegan desde el terru?o del Rey Carlos. Nos quitaron la visa porque quisieron, no porque est¨¦n ahogados en solicitudes de asilo. As¨ª que lo rec¨ªproco deb¨ªa ser as¨ª: algo igualmente arbitrario. Por eso, en esta ocasi¨®n, me voy en defensa de Roy.