¡°La miner¨ªa y los proyectos de carbono act¨²an igual, no nos consultan a las comunidades amaz¨®nicas¡±
Fabio Valencia Vanegas, el representante legal del territorio ind¨ªgena Pir¨¢-Paran¨¢ del Vaup¨¦s, en Colombia, habla sobre dos acciones de tutela que ha interpuesto el Macroterritorio de Yurupar¨ª
EL PA?S ofrece en abierto la secci¨®n Am¨¦rica Futura por su aporte informativo diario y global sobre desarrollo sostenible. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscr¨ªbete aqu¨ª.
Fabio Valencia Vanegas (42 a?os, Vaup¨¦s), representante legal del territorio ind¨ªgena Pir¨¢-Paran¨¢ de este mismo departamento, fue uno de los 12 l¨ªderes que, a principios de diciembre, visitaron el noveno piso del Palacio de Justicia de Colombia, en Bogot¨¢, para reunirse con varios magistrados de la Corte Constitucional. Se encontraron all¨ª en un ejercicio hist¨®rico, un ?di¨¢logo intercultural? como lo llam¨® la Corte, como respuesta a una acci¨®n de tutela que las comunidades del Macroterritorio de la Gente de Afinidad de Yurupar¨ª, en la Amazonia colombiana, pusieron contra el Gobierno y varias de sus entidades, por fallar al proteger su territorio de la amenaza minera y la contaminaci¨®n por mercurio. ¡°Ancestralmente nosotros no tenemos el inter¨¦s por las explotaciones¡±, asegura ahora Valencia en entrevista telef¨®nica con Am¨¦rica Futura, desde Mit¨², capital de Vaup¨¦s.
El Macroterritorio de Yurupar¨ª - con 3,5 millones de hect¨¢reas, 63 pueblos ind¨ªgenas, 34 lenguas y 5.973 habitantes - cobija a las comunidades que, seg¨²n la cosmovisi¨®n e historia oral de los pueblos amaz¨®nicos de la zona, recibieron el conocimiento tradicional de los Jaguares de Yurupar¨ª (Hee Yaia ~Kubua Baseri Keti Oka). Se trata de una manifestaci¨®n que, en 2011, fue reconocida por la UNESCO como parte de la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Como cuenta Valencia, protegerla ha implicado que los ind¨ªgenas tomen v¨ªas legales. Adem¨¢s de la tutela que llev¨® al di¨¢logo intercultural, en junio manifestaron que las empresas que venden bonos de carbono han entrado al territorio a hacer sus proyectos de manera irregular, sin consultar a las comunidades.
Pregunta. ?Qu¨¦ es el Macroterritorio de Yurupar¨ª?
Respuesta. ?Por qu¨¦ nosotros le decimos macroterritorio? Porque hay un primer territorio donde se ubican los siete pueblos ind¨ªgenas que habitamos, pol¨ªticamente hablando, el Pir¨¢-Paran¨¢. Desde la ancestralidad se asientan all¨ª los makunas, itana, barasano, eduria, tatuyo, carapana y tuyuca. Ellos recibieron esos territorios desde el origen de la humanidad para que controlen, mantengan y transmitan el conocimiento de los Jaguares del Yurupar¨ª. Son los portadores de su conocimiento y su espiritualidad. A partir de ah¨ª se ampl¨ªa, porque a lo largo y ancho del r¨ªo Pir¨¢, a su margen, viven otros pueblos que tambi¨¦n son portadores del conocimiento de los Jaguares de Yurupar¨ª. Si se identifican las rutas por las que pasaron nuestros ancestros, hay una afinidad en c¨®mo proteger la vida, la biodiversidad, entre los pueblos.
P. ?Y cu¨¢l es la disputa que hay con la miner¨ªa en este territorio?
R. Desde la ancestralidad nosotros no tenemos el inter¨¦s de las explotaciones o el inter¨¦s de la miner¨ªa. La miner¨ªa, o los minerales, hacen parte de la vida y del cuerpo humano, tanto de la naturaleza como de la humanidad. Entonces nosotros no lo tocamos, ni lo extraemos. Porque aunque el otro mundo dice que es tan valioso, para nosotros no: es otra manera de valores de la vida. Ac¨¢ es prohibido extraer y tocar ese tipo de explotaci¨®n de miner¨ªa. Pero hoy en d¨ªa hay muchos intereses econ¨®micos. Intereses de algunas personas de la regi¨®n en coordinaci¨®n con otras personas que no son de la regi¨®n, que empiezan a hacer solicitudes de miner¨ªa, ya sean lo que llamamos ilegales o legales. Estos dos tipos de solicitudes, de intereses particulares, ambos, para nosotros, afectan el territorio. No solo porque usan mercurio para extraer minerales, que nos contamina, sino porque la miner¨ªa, el oro, para nosotros hace parte de la vida, del cuerpo humano.
P. ?Qu¨¦ esperan que suceda con estos di¨¢logos interculturales y con la tutela?
R. Ya se dio una primera reuni¨®n, una audiencia entre los pueblos ind¨ªgenas mencionados y la Corte Constitucional, estuvimos all¨¢. Lo pr¨®ximo es la entrada de los magistrados al territorio, que ellos nos visiten. Eesa fecha a¨²n no est¨¢ programada. Y, bueno, lo que esperamos es que se nos respeten los derechos que estamos reclamando [al territorio, a la autodeterminaci¨®n, a la vida, a la subsistencia, a la salud, a la soberan¨ªa alimentaria y a la integridad ¨¦tnica, cultural y social]. Que los magistrados le ordenen a las instituciones del Gobierno colombiano a que cumplan.
P. ?C¨®mo han sentido espec¨ªficamente los impactos de la miner¨ªa?
R. Hay estudios que han encontrado que los niveles de mercurio son m¨¢s altos de lo que est¨¢ permitido. Nos gustar¨ªa que estos estudios se sigan haciendo. Los niveles altos se han encontrado principalmente en los pescados, que son la vida, la nutrici¨®n y la alimentaci¨®n diaria de nuestras comunidades. Los pueblos ind¨ªgenas subsistimos a trav¨¦s de la comida, la carne y el pescado, y eso es lo que m¨¢s se afecta: la pesca.
P. Otra lucha m¨¢s reciente a la que se han enfrentado es contra las empresas de bonos de carbono que han llegado al macroterritorio. Tambi¨¦n elevaron una tutela sobre el caso en junio¡
R. S¨ª. Y es algo parecido. Est¨¢n llegando las empresas multinacionales para hacer proyectos de carbono, pero de manera unilateral. Como si fueran los due?os del territorio amaz¨®nico, empiezan a hacer proyectos sin consultas. Le ofrecen un peque?o porcentaje, un m¨ªnimo beneficio, solo a algunos pueblos y, a nombre de eso, se aprovechan de nosotros, de los dem¨¢s. En eso s¨ª no estamos de acuerdo. Otros no pueden ser los titulares de esos proyectos, cuando somos nosotros los que administramos el territorio. En eso la miner¨ªa y los proyectos de carbono act¨²an igual: no nos consultan a las comunidades amaz¨®nicas.
P: ?Qu¨¦ esperan que suceda con esta tutela contra los proyectos de bonos de carbono?
R: De nuevo, que se nos reconozca nuestro territorio. Somos los due?os de lo que directamente conservamos, mantenemos la vida en estos territorios. Entonces tambi¨¦n lo hemos manifestado ante la ley y no nos vamos a rendir ni a echar pa?atr¨¢s. Tambi¨¦n queremos que llegue el caso a la Corte Constitucional y que ordene que somos nosotros quienes debemos decidir c¨®mo hacer las cosas. Elaborar nuestros proyectos para el beneficio del territorio, sin intermediarios. Es lo que estamos buscando, que sean nuestros programas los que sean fortalecidos, que la financiaci¨®n sea directa y que sirva para desarrollar nuestros planes de vida.
P. ?Qu¨¦ significa para ustedes tener que apelar una vez m¨¢s a la ley para proteger lo que ya est¨¢ en la Constituci¨®n de Colombia?
R. Pues vemos una negligencia del Estado, porque es la que deja libre a las oeneg¨¦s, a las empresas, para que hagan estos proyectos. Y lo que est¨¢n haciendo es negociar un porcentaje m¨ªnimo con algunos pueblos para hacer sus proyectos, pero la parte grande, el beneficio grande, se lo llevan las empresas. Esa tutela se pone para eso: para que, igual que pasa con la miner¨ªa, se tenga en cuenta nuestra realidad geogr¨¢fica y cultural, que se reconozca nuestro sistema de conocimiento tradicional y nuestro propio gobierno.