La UE llega a Sudam¨¦rica para calmar los ¨¢nimos ante la controvertida ley antideforestaci¨®n

EL PA?S ofrece en abierto la secci¨®n Am¨¦rica Futura por su aporte informativo diario y global sobre desarrollo sostenible. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscr¨ªbete aqu¨ª.

El jefe de pol¨ªtica medioambiental de la Uni¨®n Europea, el lituano Virginijus Sinkevicius, empez¨® este viernes una gira por Sudam¨¦rica en un intento de aliviar las cr¨ªticas en la regi¨®n sobre una ley controvertida de la UE que prohibir¨¢ las importaciones de bienes vinculados a la deforestaci¨®n de bosques. Este viernes aterriz¨® por primera vez en Paraguay el comisionado de Medio Ambiente. El lunes se desplaz¨® a Bolivia y desde all¨ª viajar¨¢ a Ecuador. En los siete d¨ªas de viaje, defender¨¢ ante varias voces del sector y jefes de Gobierno la ley que ¨¦l mismo define como ¡°un punto de inflexi¨®n en la lucha global contra la deforestaci¨®n¡±. Si bien hay varias organizaciones medioambientales que aplauden la medida, los peque?os productores temen que la deficiente implementaci¨®n y la falta de tecnificaci¨®n del continente los dejen fuera del mercado. El propio ministro de Industria y Comercio de Paraguay, Javier Gim¨¦nez*, se?al¨® que es una medida opcional: ¡°Si el exportador paraguayo decide que no quiere cumplir este [reglamento] 1115, que no cumpla y no exporte a la Uni¨®n Europea. Es as¨ª de simple¡±, recogieron medios locales.

En un intento de calmar los ¨¢nimos, durante su primera parada, anunci¨® una inversi¨®n de unos 13 millones de d¨®lares en el proyecto Forest4Life Paraguay. ¡°Estoy seguro que este bosque es para el futuro¡±, agreg¨® el comisario, quien se?al¨® que este plan no es s¨®lo ¡°para Paraguay, sino para todo el planeta¡±. Uno de los ejes del proyecto es el fortalecimiento de tres ¨¢reas protegidas del pa¨ªs: la Reserva Natural del Bosque Mbaracay¨², en coordinaci¨®n con la fundaci¨®n Mois¨¦s Bertoni; la Reserva Parque Nacional San Rafael, con la ayuda de la Asociaci¨®n Guyra Paraguay; y la Reserva de la Biosfera del Chaco, en la que trabajar¨¢n con WWF. ¡°Hemos encontrado muy claramente un lenguaje en com¨²n, un lenguaje sobre el cual podemos desarrollar nuestras relaciones a futuro¡±, declar¨®. Durante su visita a Bolivia, tambi¨¦n firm¨® un convenio de cooperaci¨®n de unos 33 millones de d¨®lares para mitigar la deforestaci¨®n, la lucha contra los incendios forestales, y para proteger las cuencas, humedales y ¨¢reas protegidas.

El reglamento de la Uni¨®n Europea sobre deforestaci¨®n (EUDR), aprobado a finales de 2023, pone el foco en productos como el cacao, caf¨¦, soja, aceite de palma, madera, carne de vacuno, el caucho y todos sus derivados (como el cuero, la madera, el papel o el chocolate). De acuerdo con la normativa, a partir del 30 de diciembre de 2024, no podr¨¢n entrar a la UE productos procedentes de tierras que hayan sido deforestadas despu¨¦s de diciembre de 2020. As¨ª, todas las empresas vinculadas a este tipo de exportaci¨®n tendr¨¢n que incluir un etiquetado que certifique que para la producci¨®n de los mismos ning¨²n suelo ha sido deteriorado. Seg¨²n el comisionado, la pol¨ªtica est¨¢ centrada en plantarle cara a la deforestaci¨®n y garantizar al consumidor transparencia y trazabilidad de todo lo que consume, desde un motor fundamental: el mercado.

Inicialmente, estas metas no tendr¨ªan porqu¨¦ ser algo negativo. Entre 1990 y 2020, la deforestaci¨®n llev¨® por delante una superficie mayor al de todo el ¨¢rea de la UE, unos 420 millones de hect¨¢reas, seg¨²n la FAO. Y un 10% de esta devastaci¨®n es atribuible al consumo de los veintisiete pa¨ªses europeos. La deforestaci¨®n tambi¨¦n ha dejado a la propia Amazonia en n¨²meros rojos, cada vez m¨¢s cerca del punto de no retorno; el momento en el que el bioma no podr¨¢ recuperarse por s¨ª mismo.

Sin embargo, muchas organizaciones de la regi¨®n creen que no es suficiente con ¡°una bondadosa y bienintencionada ley¡±, como la denomina Wendy Arenas, directora ejecutiva de la Fundaci¨®n Alisos, que forma parte del Acuerdo Cero Deforestaci¨®n de la cadena de Cacao de Colombia. Para la antrop¨®loga, esta norma puede suponer un gran rev¨¦s a los pa¨ªses latinoamericanos -que tienen a la UE como el tercer socio principal, despu¨¦s de Estados Unidos y China- y, sobre todo, a los peque?os productores.

¡°Al no haber sido negociada con los pa¨ªses productores, esta norma tambi¨¦n se puede interpretar como una barrera al mercado. Y entendemos que la Uni¨®n Europea tiene autonom¨ªa para definir sus propias normatividades y regulaciones. Sin embargo, estas afectan un entorno global mucho m¨¢s grande. Los productores deber¨ªan tener m¨¢s voz¡±, sentenci¨® por tel¨¦fono. Su pa¨ªs se qued¨® fuera de la gira del comisionado europeo al igual que Brasil, lo que ha generado cierta sorpresa en la regi¨®n por ser uno de los que m¨¢s afectado se ver¨¢ por la norma.

¡°Puede ser estigmatizante¡±

Lo que exige la UE es que los productos tengan una cadena de trazabilidad transparente. Para ello, piden a las empresas que describan de manera precisa el producto, la informaci¨®n detallada del proveedor y que geolocalicen todas las parcelas de origen de los productos, proporcionando coordenadas geogr¨¢ficas, fechas de producci¨®n, pruebas de no deforestaci¨®n y evidencias de legalidad. ¡°?Qu¨¦ productores pueden permitirse esto?¡±, se pregunta Arenas. Ella cree que los peque?os productores no podr¨¢n hacerlo. Del mismo modo, la UE utilizar¨¢ un sistema comparativo de riesgo -country benchmarking system- para asignar un nivel de riesgo al pa¨ªs de producci¨®n; algo as¨ª como un ranking. Esta es una de las medidas m¨¢s criticadas por los pa¨ªses latinoamericanos. ¡°Puede ser estigmatizante para nuestros pa¨ªses¡±, dicen los expertos.

Para Arenas, el ejemplo m¨¢s flagrante de que ¡°falt¨® conversaci¨®n¡± es en el caso del cacao o el caf¨¦, mucho m¨¢s que en las grandes industrias de la ganader¨ªa o el aceite de palma. ¡°El cacao no es un motor de deforestaci¨®n, sino en contados casos¡±, dice, ¡°y no se est¨¢ valorando el esfuerzo de estos peque?os productores que cultivan cacao como ¨²nica alternativa a otros cultivos il¨ªcitos. No se est¨¢ premiando. Se les ense?a el garrote y no la zanahoria¡±.

Aunque para Daniel Coronel, coordinador para Per¨² de Tropical Forest Alliance, esta medida puede ¡°desincentivar¡± la deforestaci¨®n, cuenta c¨®mo la ley europea est¨¢ a¨²n lejos de poderse encajar en pa¨ªses como los de la regi¨®n, por su escasa tecnificaci¨®n y el escaso acceso a las propiedades de la tierra. No poder venderle a la UE abrir¨ªa un hueco enorme en la econom¨ªa agr¨ªcola peruana, que exporta el 51% del caf¨¦ y cerca del 30% del cacao a esta regi¨®n. De eso viven unas 350.000 familias productoras. ¡°La UE tiene una responsabilidad muy grande. Porque podr¨ªa ocasionar que productores que no tengan tecnolog¨ªa o a recursos financieros, terminen saliendo de cadenas de suministros y acaben en la miner¨ªa o coca, como alternativa. Y eso s¨ª que deforesta. Van a tener que acelerar los canales de comunicaci¨®n y apoyar con los instrumentos de trazabilidad y monitoreo para que no se quede nadie fuera o no sea contraproducente¡±.