Las mujeres a las que no escucha Nayib Bukele
La exabogada del presidente, dos candidatas, una experta electoral, una economista y una periodista relatan a EL PA?S el clima de violencia que viven bajo la ¡°figura patriarcal¡± del mandatario salvadore?o
El ¨²ltimo mensaje que Nayib Bukele envi¨® a Bertha Mar¨ªa Dele¨®n dec¨ªa: ¡°Esto no te lo voy a perdonar nunca¡±. La que hab¨ªa sido su abogada durante cuatro a?os no pudo evitar re¨ªrse. Dice que le pareci¨® una amenaza infantil. Era febrero de 2020, el presidente hab¨ªa entrado con los militares en la Asamblea Legislativa de El Salvador, un ¨®rgano que entonces no controlaba y no quer¨ªa aprobarle un pr¨¦stamo para tareas de seguridad. Antes de dar cualquier otro golpe se puso a rezar. Fue esa imagen la que Dele¨®n co...
Reg¨ªstrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
El ¨²ltimo mensaje que Nayib Bukele envi¨® a Bertha Mar¨ªa Dele¨®n dec¨ªa: ¡°Esto no te lo voy a perdonar nunca¡±. La que hab¨ªa sido su abogada durante cuatro a?os no pudo evitar re¨ªrse. Dice que le pareci¨® una amenaza infantil. Era febrero de 2020, el presidente hab¨ªa entrado con los militares en la Asamblea Legislativa de El Salvador, un ¨®rgano que entonces no controlaba y no quer¨ªa aprobarle un pr¨¦stamo para tareas de seguridad. Antes de dar cualquier otro golpe se puso a rezar. Fue esa imagen la que Dele¨®n comparti¨® en su cuenta de Twitter, con el mensaje de que se trataba de un ¡°berrinche¡± del mandatario. ?l le escribi¨® para que borrara la publicaci¨®n y ella se neg¨®. La bloque¨® de las redes sociales y justo despu¨¦s la abogada empez¨® a recibir ataques digitales masivos y coordinados, la segu¨ªan con motos, la vigilaba un dron en el jard¨ªn de su casa, le abrieron el coche. Lo ¨²ltimo fue el exilio. Dele¨®n vive en Ciudad de M¨¦xico desde hace tres a?os, despu¨¦s de enterarse de que iban a detenerla: ¡°Nunca dimension¨¦ qu¨¦ tanto pod¨ªa escalar su nivel de represalia¡±. Lejos de su pa¨ªs, dice, hace lo que siempre hizo: seguir expresando hasta lo que no quiere escuchar el presidente.
Nayib Bukele se presenta este domingo a una reelecci¨®n que proh¨ªbe la Constituci¨®n de El Salvador, con unos sondeos que le dan hasta el 80% de intenci¨®n de voto. El actual presidente, que ha acabado con las pandillas que atemorizaron al pa¨ªs durante a?os, no ha hecho ning¨²n acto de campa?a, pero s¨ª suena su voz en la radio y en la televisi¨®n pidiendo el voto para los diputados de su partido, Nuevas Ideas. Despu¨¦s de arrasar en las elecciones legislativas de 2021, Bukele destituy¨® a jueces y magistrados para colocar a figuras de confianza y controlar la Corte Constitucional y la Fiscal¨ªa. Ahora aspira a hacer desaparecer cualquier oposici¨®n.
Frente a la concentraci¨®n de poder, las voces de resistencia. ¡°Las m¨¢s numerosas y claras¡±, dice la experta electoral Ruth Eleonora L¨®pez, ¡°son las de las mujeres¡±. Son ellas quienes sufren la mayor carga econ¨®mica, las que buscan a sus desaparecidos y detenidos, quienes ven c¨®mo se hunde el presupuesto de combate a la violencia de g¨¦nero y c¨®mo las diputadas oficialistas cambian su biograf¨ªa en redes sociales de feminista a madre y esposa. ¡°Bukele es una figura mesi¨¢nica, un l¨ªder patriarcal, un presidente padre que vela por nosotros y que se presenta ungido por Dios¡±, resume la activista en derechos humanos Celia Medrano, ¡°es un hombre altamente conservador con una tendencia muy clara a manipular la religi¨®n hacia el mensaje de que las mujeres tenemos que estar en nuestra casa¡±. Ellas frente a la voz autoritaria y el castigo, frente al tono dominante y el bast¨®n de mando. Ellas, convertidas en adversario. ¡°Nuestro papel es combatir esa narrativa¡±.
Claudia Ortiz llega corriendo al peque?o espacio que su partido, Vamos, ha alquilado dentro de una soleada casa de San Salvador. La diputada ha representado los ¨²ltimos tres a?os una postura diferente al oficialismo y busca que el domingo la elijan para otros tres. Las opciones son pocas. Hasta ahora la Asamblea ten¨ªa 84 miembros y solo 20 pertenec¨ªan a otros partidos, pero el a?o pasado el Gobierno aprob¨® una reforma electoral que reduce a 60 los diputados para estas elecciones. El Ejecutivo aduce que es para ahorrar, pero los n¨²meros apuntan a que el presupuesto solo pasa de 56 a 55 millones de d¨®lares. Ruth L¨®pez explica que es una maniobra m¨¢s del presidente para monopolizar el poder. Cada vez m¨¢s, ser la mano discordante en El Salvador tiene un precio.
El pasado 24 de enero, durante una discusi¨®n legislativa, Ernesto Castro, presidente de la Asamblea y uno de los hombres claves de Bukele, dej¨® claro lo que implica tener el poder. ¡°Yo no estoy de acuerdo con nada de lo que usted diga¡±, le dijo a la diputada Claudia Ortiz, justo antes de apagarle el micr¨®fono para que no pudiera contestar. ¡°Fue un acto de violencia pol¨ªtica, pero tambi¨¦n sirvi¨® para dejar expl¨ªcito lo que ha sido esta legislatura, una legislatura donde el poder se expresa de la forma m¨¢s brutal: ¡®No te vamos a permitir que puedas trabajar ni representar a nadie porque los ¨²nicos que podemos representar al pueblo somos nosotros y t¨² eres un accidente¡±, dice la representante.
El pat¨ªbulo de las redes sociales
Bukele es un presidente tuitero. Desde el principio de su Gobierno quiso demostrar que se pod¨ªa gobernar desde el m¨®vil. Desde su cuenta de X alaba y castiga, reclama y premia. Detr¨¢s del reparto del presidente van los dem¨¢s. Un estudio que el partido Nuestro Tiempo present¨® ante el Tribunal Electoral evidenciaba que las pol¨ªticas de la oposici¨®n est¨¢n recibiendo casi 300 ataques diarios en redes sociales. ¡°Pobre pendeja, la Constituci¨®n nos la pasamos por los huevos, busca quien te coja mejor¡±. ¡°Si¨¦ntese se?ora y c¨¢llate¡±. ¡°Vieja¡±. ¡°Est¨¢n muertos¡±. Son algunos de los mensajes que Celia Medrano, defensora de derechos humanos y candidata a vicepresidenta con Nuestro Tiempo, recopil¨® para urgir al tribunal a que defendiera unas elecciones libres de violencia de g¨¦nero. No quiere, dice a este peri¨®dico, que la pol¨ªtica sea solo para ¡°mujeres valientes¡±. ¡°Lo que vemos a futuro es un pa¨ªs sometido, donde las mujeres estar¨¢n en una situaci¨®n cada vez m¨¢s restringida y las ¨²nicas mujeres que podr¨¢n estar ejerciendo la pol¨ªtica son las que est¨¦n alineadas con el pensamiento del presidente¡±, dice Medrano.
Pero no son solo las pol¨ªticas. ¡°No hay mujer en El Salvador, abogada, defensora de los derechos humanos, que estudie temas de corrupci¨®n... que no haya sido v¨ªctima de muy fuertes ataques del Gobierno y sus redes, que se coordinan desde la m¨¢s alta jerarqu¨ªa¡±, apunta Ruth L¨®pez, que es jefa de anticorrupci¨®n de la organizaci¨®n Cristosal, ¡°se ha configurado como un mecanismo de desprestigio¡±.
La economista Tatiana Marroqu¨ªn public¨® un video en Tiktok sobre el aumento del precio de la canasta b¨¢sica en El Salvador, porque la inflaci¨®n de los alimentos ha llegado al 16%, y la respuesta fueron decenas de insultos a su f¨ªsico. Su programa, La econom¨ªa es en femenino, donde explica que la pobreza extrema en el pa¨ªs ha pasado del 4% al 8% durante el Gobierno de Bukele o que si desde 2006 al 2019 se utilizaban unos 400 millones de la reserva de pensiones al a?o, en 2023 se utilizaron 1.000, tambi¨¦n ha tenido consecuencias: ¡°Me pusieron Pegasus en el celular. T¨² te enfocas en discutir cosas t¨¦cnicas y lo que recibes son ataques violentos y masivos. S¨ª termina haci¨¦ndote dar un par de pasitos para atr¨¢s¡±.
No est¨¢ mal reconocer el miedo, dice la periodista Clanci Rosa. ¡°En este Gobierno hemos bajado bastante el activismo, no porque no se quiera hacer, sino porque el Gobierno ha configurado un aparato de represi¨®n que genera miedo. El r¨¦gimen de excepci¨®n es tan ambiguo que da miedo que en una protesta puedas acabar presa¡±, apunta la fundadora de la revista feminista La Br¨²jula: ¡°es casi un crimen defender derechos¡±. Desde que entr¨® en vigor el r¨¦gimen de excepci¨®n hace 22 meses m¨¢s de 76.000 personas han sido detenidas, sin orden judicial, sin posibilidad de un abogado, sin comunicaci¨®n con su familia, sin investigaci¨®n. La asociaci¨®n Socorro Jur¨ªdico ha presentado m¨¢s de 5.000 habeas corpus para pedir la liberaci¨®n de presos sin ninguna vinculaci¨®n con las pandillas, ha documentado 224 muertes dentro de las prisiones. Esas madres, hermanas y esposas de detenidos se han convertido sin buscarlo en la oposici¨®n al presidente.
¡°Como feministas reconocemos que nuestra agenda avanza en un contexto democr¨¢tico. Antes la democracia no era completa, pero hab¨ªa un margen. Ahora nuestras posibilidades se est¨¢n cerrando, la lucha se complica¡±, apunta Clanci Rosa. Eso no las desanima. As¨ª lo resume Celia Medrano: ¡°Para las mujeres en el Gobierno de Bukele hay tres opciones: te sometes, te vas o resistes. Nosotras hemos elegido resistir¡±.
Siga toda la informaci¨®n de El PA?S Am¨¦rica en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.