Un Porsche y una embestida mortal tras una noche de p車ker: retrato del privilegio de los ricos en Brasil
La polic赤a pide por tercera vez la prisi車n preventiva para un empresario de 24 a?os que mat車 con un deportivo a un conductor de Uber al chocar a m芍s de 150 kil車metros por hora en S?o Paulo
Fue una embestida brutal una noche de fin de semana en una de esas avenidas de varios carriles que cruzan S?o Paulo, capital econ車mica de Brasil. Un Porsche 911 Carrera GTS a toda velocidad embisti車 brutalmente a un humilde Renault Sandero. El conductor del autom車vil, Ornaldo da Silva Viana, de 52 a?os, que se ganaba la vida a base de infinitas carreras para Uber, sufri車 una parada cardiorrespiratoria y muri車 poco despu谷s en el hospital. El...
Fue una embestida brutal una noche de fin de semana en una de esas avenidas de varios carriles que cruzan S?o Paulo, capital econ車mica de Brasil. Un Porsche 911 Carrera GTS a toda velocidad embisti車 brutalmente a un humilde Renault Sandero. El conductor del autom車vil, Ornaldo da Silva Viana, de 52 a?os, que se ganaba la vida a base de infinitas carreras para Uber, sufri車 una parada cardiorrespiratoria y muri車 poco despu谷s en el hospital. El otro conductor era Fernando Sastre de Andrade Filho, un empresario de 24 a?os que hab赤a salido de fiesta con el deportivo de su padre y volv赤a a casa con un amigo. La pol谷mica por el suceso, ocurrido el 31 de marzo, sigue viva porque ofrece un buen retrato del privilegio del que disfrutan los ricos (y blancos) en un pa赤s tan desigual como Brasil. La polic赤a ha pedido por tercera vez que Sastre, acusado de homicidio doloso y de darse a la fuga, entre en prisi車n preventiva, seg迆n la prensa brasile?a.
En un pa赤s donde alguna vez se ven hombres mestizos o negros contra la pared en plena calle siendo cacheados o custodiados por agentes de polic赤a, el privilegio blanco (y rico) qued車 en evidencia desde los primeros momentos tras el choque, pasadas las dos de la madrugada del domingo de Pascua.
La madre del conductor del Porsche se present車 en el lugar del accidente, se encontr車 con su hijo y convenci車 a los dos agentes de la polic赤a militar presentes de que necesitaba llevarlo al hospital a hacerse una radiograf赤a. As赤 que, contra cualquier protocolo en esas circunstancias, los polic赤as permitieron que el principal sospechoso abandonara la escena del delito sin someterse a una prueba de alcoholemia. Aunque con algunas reticencias, como muestran las grabaciones de sus c芍maras corporales, los polic赤as confiaron en la palabra de aquella se?ora.
Cuando los agentes se presentaron en el hospital donde se supon赤a que Sastre Filho hab赤a sido llevado por su madre, sorpresa, all赤 no estaban ni 谷l ni ella. Fueron a su apartamento, tampoco. Casi dos d赤as tard車 el acusado en presentarse en una comisar赤a.
Poco a poco fueron trascendiendo otros detalles que alimentaban la indignaci車n popular en un pa赤s donde los super ricos son una casta aparte, y donde 1,5 millones de personas se ganan la vida o redondean sus salarios conduciendo para clientes de aplicativos como Uber. Y todo, agravado por la actitud de los polic赤as la noche del suceso. Resulta que el joven el empresario de la construcci車n que destroz車 el b車lido azul intenso de su padre hab赤a perdido el carn谷 de conducir por infracciones varias, incluidas multas por exceso de velocidad. Cuando aquella madrugada embisti車 al conductor de Uber, hac赤a solo 12 d赤as que hab赤a recuperado el permiso.
El copiloto del Porsche, amigo de Sastre Filho, result車 herido grave: cuatro costillas rotas y le tuvieron que extirpar el bazo. Cuando se recuper車 lo suficiente para declarar ante la polic赤a, les cont車 a los investigadores que el conductor del deportivo hab赤a bebido aquella noche. Ambos hab赤an pasado juntos, y con sus respectivas parejas, una velada que acab車 con unas partidas de p車ker y una bronca entre el empresario veintea?ero y su novia, que no le consideraba en condiciones de ponerse al volante.
Viana, que aquella noche estaba trabajando como conductor de Uber, tuvo la mala suerte de cruzarse en su camino. Ese era su oficio y estaba orgulloso de ello. Padre de tres hijos, estaba casado y era un hombre religioso, alguien con el que f芍cilmente empatiz車 esa mayor赤a de brasile?os cada ma?ana salen al trabajo a ganarse con enorme esfuerzo en largu赤simas jornadas el sustento para mantener a sus familias. ※Hola familia, vamos a la lucha. Est芍 todo en orden, vamos a ver lo que el buen Dios nos manda hoy, 谷l siempre manda buenas carreras. Excelente trabajo. Dios va a bendecir esta noche nuestro trabajo§, le dice Viana a su familia en un v赤deo que esta difundi車 tras su muerte.
Para colmo, dos c芍maras callejeras de vigilancia que hab赤a en el lugar del suceso no funcionaban aquella madrugada. Seg迆n la polic赤a, estaban en proceso de actualizaci車n tecnol車gica. Aunque el acusado de homicidio declar車 ante la polic赤a que iba ※un poco por encima§ de los 50 kil車metros por hora permitidos en la avenida, la investigaci車n policial ha determinado que Sastre hab赤a pisado muy fuerte el acelerador. El Porsche volaba a m芍s de 150 kil車metros por hora. La colisi車n fue de una violencia brutal. La parte trasera del Renault Sandero qued車 absolutamente comprimida.
En vista de la fuga y las circunstancias del accidente, la polic赤a ha solicitado por tercera vez que Sastre Filho sea encarcelado cautelarmente, decomisarle el pasaporte y dejar en suspenso su licencia de conducir. El caso est芍 bajo secreto de sumario pero las filtraciones son constantes. La segunda vez que la polic赤a pidi車 su entrada en prisi車n, el juez le permiti車 eludir la c芍rcel con una fianza de medio mill車n de reales (97.000 d車lares).
Este caso recuerda al protagonizado por otro ni?o rico. El empresario Eike Batista era el hombre del momento, el que encarnaba el 谷xito de Brasil cuando, en 2012, su primog谷nito, llamado Thor, arroll車 y mat車 a un ciclista en una carretera de monta?a en R赤o de Janeiro. Cay車 en desgracia con la trama Lava Jato. Cuando se llev車 por delante a un camionero que iba en bici, Thor ten赤a 22 a?os. Unos meses antes la polic赤a le hab赤a decomisado un Ferrari por circular sin matr赤cula delantera, era conocido por gastar a espuertas en la noche carioca. Condenado en primera instancia, fue absuelto despu谷s y su familia indemniz車 a la de la v赤ctima. A los cuatro meses, estaba de nuevo al volante.
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