Gloria Porras: ¡°El Estado de Guatemala estaba en coma; ahora hay esperanzas de cambio¡±
La magistrada de la Corte Suprema, a quien se le neg¨® ser renovada en el cargo y obligada al exilio, analiza las decisiones tomadas por el presidente Bernardo Ar¨¦valo. ¡°Es un tanque de ox¨ªgeno para el pa¨ªs¡±, afirma
La exmagistrada guatemalteca Gloria Porras se muestra esperanzada tras la elecci¨®n de nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia y de las cortes de apelaciones en Guatemala. La abogada, a quien se le neg¨® en 2021 ser renovada en el cargo como jueza de la Corte de Constitucionalidad por el Congreso y fue obligada al exilio, dice que la llegada al poder del presidente Bernardo Ar¨¦valo es ¡°un tanque de ox¨ªgeno¡± para un pa¨ªs agobiado por la corrupci¨®n y la impunidad. Porras, quien ha afirmado en entrevista telef¨®nica que el ¡°Estado de Guatemala estaba en coma¡±, dice que los cambios impulsados por Ar¨¦valo y la renovaci¨®n de las cortes en la ¨²ltima semana alientan la posibilidad de contar con un sistema judicial independiente, que acompa?e al mandatario en su cruzada para desmantelar lo que en ese pa¨ªs han llamado el ¡°pacto de corruptos¡±, una mara?a pol¨ªtica, judicial y empresarial que deriv¨® en un Estado antidemocr¨¢tico durante la Administraci¨®n del entonces presidente Alejandro Giammattei.
Porras ha dicho desde su exilio de que ¡°los jueces son los principales actores, quiz¨¢ no exclusivos, pero s¨ª los m¨¢s importantes para lograr la protecci¨®n de los derechos humanos en un Estado democr¨¢tico¡±, por lo que espera que las nuevas cortes funcionen con m¨¢s libertad e independencia, sin el control que ahora han tenido de lo que ella llama ¡°personajes oscuros¡±, que incluyen tanto a pol¨ªticos corruptos, empresarios poderosos o funcionarios judiciales de dudosa vena democr¨¢tica como la fiscal general Consuelo Porras, alzada como principal opositora al Gobierno de Ar¨¦valo. El presidente ha intentado su destituci¨®n, sin ¨¦xito. Porras fue renovada en su cargo por Giammattei en 2022, a pesar de ser acusada de frenar investigaciones anticorrupci¨®n.
Jueces y fiscales que han mantenido una postura independiente y han intentado hacer justicia con libertad en Guatemala han tenido que dejar el pa¨ªs por temor a represalias, incluyendo encarcelaciones arbitrarias. Es el caso de Porras. ¡°Debido a diferentes decisiones que tom¨¦ en el ejercicio de mi cargo me toc¨® sufrir dos eventos: la postura del Congreso de la Rep¨²blica de impedir arbitrariamente la juramentaci¨®n para que yo pudiera asumir el cargo de magistrada para un tercer periodo y una criminalizaci¨®n en mi contra con m¨¢s de 80 denuncias penales, adem¨¢s del ataque constante que recib¨ªa en redes sociales¡±, cuenta la exmagistrada.
Pregunta. ?Qu¨¦ ha significado el exilio para usted?
Respuesta. Ha sido un tiempo muy dif¨ªcil para m¨ª, porque creo que tuve la capacidad, y no lo digo en buen sentido, porque fue muy perjudicial para m¨ª, de alinear a los tres poderes del Estado: al presidente Giammattei, al presidente del Congreso, Al¨¢n Rodr¨ªguez, y a la presidenta de la Corte Suprema, que en su momento actuaron en sinton¨ªa para obligarme a realizar un exilio forzado. No ha sido f¨¢cil, pero a pesar de que todas estas acciones han sido complejas me han brindado la oportunidad de tener nuevos conocimientos, nuevas experiencias y no he perdido mi fe en la justicia. Present¨¦ una petici¨®n ante la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que me ha devuelto la fe en que en alg¨²n momento puedan restablecer todos estos derechos que me fueron violados por el Estado de Guatemala.
P. ?En qu¨¦ consiste esa petici¨®n?
R. Todas los procesos a nivel de la justicia nacional fueron agotados por mi parte y al no haber obtenido justicia a nivel nacional acud¨ª ante la Comisi¨®n a denunciar estas violaciones. No solo la falta de juramentaci¨®n arbitraria, sino tambi¨¦n el proceso de criminalizaci¨®n del que he sido objeto durante varios a?os.
P. ?Por qu¨¦ considera que los poderes de Estado de Guatemala la quer¨ªan fuera?
R. Los tres poderes, cada uno con un rol diferente, pero debidamente coordinados, desde a?os antes de mi exilio pretend¨ªan despojarme de inmunidad y procesarme por las decisiones que adopt¨¦ en el ejercicio de mi cargo como magistrada.
P. ?Cu¨¢les fueron esas decisiones que tanto resquemor generaron?
R. Las decisiones que tom¨¦, en su mayor¨ªa, ten¨ªan como centro a los seres humanos, a los grupos vulnerables y todas, de alguna manera, directo o indirectamente, afectaban intereses econ¨®micos y pol¨ªticos que no les gustaban, no solo a los tres poderes del Estado, sino a algunos sectores econ¨®micos del pa¨ªs. De alguna forma se alinearon, a trav¨¦s de un plan que ahora puedo ver con mayor claridad, para impedir que continuara como magistrada de la Corte.
P. ?Qu¨¦ grupos econ¨®micos?
R. La mayor¨ªa de decisiones que tom¨¦ en forma colegiada, porque ninguna decisi¨®n que tom¨¦ era de car¨¢cter personal, ten¨ªan que ver con extracci¨®n de minerales y con el funcionamiento de hidroel¨¦ctricas.
P. ?Ve la posibilidad de regresar a Guatemala ahora que gobierna el presidente Ar¨¦valo?
R. Cuando sal¨ª del pa¨ªs el Estado de Guatemala estaba en coma. Creo que la llegada del presidente Ar¨¦valo y las decisiones que ha ido tomando constituyen un tanque de ox¨ªgeno para el pa¨ªs, especialmente por la elecci¨®n de nuevos jueces. Eso brinda la oportunidad de una esperanza para en alg¨²n momento regresar al pa¨ªs cuando existan condiciones.
P. ?El Estado guatemalteco sigue en estado de coma?
R. No. Creo que el presidente Ar¨¦valo sufri¨® una situaci¨®n muy parecida a la m¨ªa, porque el principal actor para impedir que yo tomara posesi¨®n del cargo para un tercer periodo fue el Congreso. Todos vimos con ese Congreso actu¨® para tratar de impedir la juramentaci¨®n y toma de posesi¨®n del presidente. Creo que haber superado ese obst¨¢culo y encontrarse en el cargo, tomando decisiones, tratando de entender no solo las cuestiones legales, sino la situaci¨®n pol¨ªtica del pa¨ªs en cada decisi¨®n que toma, me da una esperanza de un futuro mejor.
P. ?El presidente tiene posibilidades de cumplir su meta de combatir la corrupci¨®n en Guatemala?
R. Creo que lo est¨¢ haciendo. Como jueza puedo ver algunas decisiones que ¨¦l toma y que a veces son cuestionadas porque la sociedad en general hace peticiones al Gobierno y espera que las atienda de manera inmediata, pero creo que el presidente ha tomado decisiones importantes como, por ejemplo, respetar los procedimientos legales para cambio de fiscal general, porque entiende cu¨¢l es el contexto pol¨ªtico en el que se mueve. Para m¨ª es esperanzador, porque demuestra mucho m¨¢s car¨¢cter el respeto a la ley que tomar decisiones que la mayor¨ªa espera.
P. La fiscal general Consuelo Porras se ha alzado precisamente como la principal opositora al Gobierno de Ar¨¦valo. ?C¨®mo califica el rol que ella est¨¢ jugando?
R. Se est¨¢ jugando un partido sin ning¨²n ¨¢rbitro independiente. No me enfoco tanto en lo que el Ministerio P¨²blico pide, sino en lo que los jueces resuelven, por eso dec¨ªa que en este momento el pa¨ªs tiene un tanque de ox¨ªgeno, una gran posibilidad, con jueces independientes que puedan darle otra cara al organismo judicial. Esta renovaci¨®n puede ser interesante y limitar peticiones arbitrarias. El presidente est¨¢ haciendo un llamado a la sociedad civil para que se mantenga atenta a este cambio.
P. ?Cree que estos jueces pueden conformar una Corte independiente?
R. No puedo hablar de una Corte totalmente pura, porque creo que ser¨ªa un sue?o pensar en que todos los electos por el Congreso vayan a gozar de la confianza de la poblaci¨®n, pero creo que la renovaci¨®n es importante y que hay algunas personas muy calificadas no solo a nivel profesional, sino a nivel ¨¦tico. Van a tener una oportunidad de administrar una justicia independiente. Tendr¨¢n que hacer una evaluaci¨®n de si ellos quieren seguir avalando un proceso antidemocr¨¢tico, que me tiene en el exilio, o volverse del lado de la justicia. Si se logra un equilibrio hay oportunidad para que el presidente pueda gobernar el pa¨ªs, porque todos vemos las limitaciones que tiene desde el Congreso y desde otros ¨®rganos del Estado.
P. ?A qui¨¦nes les interesa que en Guatemala no haya una justicia independiente?
R. Mi salida y la salida de otros actores, jueces y fiscales, y tambi¨¦n el intento de evitar que el presidente Ar¨¦valo tomara posesi¨®n del cargo para el que fue leg¨ªtimamente electo, no son hechos individuales, sino que todos tienen un mismo patr¨®n que ha sido elaborado, estudiado y ejecutado por actores antidemocr¨¢ticos como los ha se?alado no solo el Gobierno de Estados Unidos, sino m¨¢s de 40 pa¨ªses. En mi caso fue el Congreso, que despu¨¦s de haber sido electa en un proceso p¨²blico y transparente, impidi¨® mi juramentaci¨®n. Cuando entendemos que todas estas acciones no son aisladas, sino que es un plan con los mismos actores que est¨¢n detr¨¢s y que ahora sus rostros ya son visibles, creo que tenemos mayores oportunidades de actuar y de rescatar a la gente independiente, a los abogados buenos del pa¨ªs. Ahora les toca a los nuevos jueces quitarse el cartel de que el organismo de justicia est¨¢ integrado por t¨ªteres que obedecen ¨®rdenes de personajes oscuros del pa¨ªs.
P. ?Qu¨¦ personajes oscuros?
R. En mi caso lo he mencionado con absoluta claridad: los diputados que evitaron mi juramentaci¨®n, magistrados de la Suprema que autorizaron de manera arbitraria que yo fuera despojada de inmunidad. Pervirtieron el sistema, buscaron de alguna manera criminalizarme, entiendo que la intenci¨®n era procesarme arbitrariamente y esa es la raz¨®n por la que estoy en el exilio.
P. ?El presidente Ar¨¦valo tiene posibilidades de gobernar sin que otros poderes, como el econ¨®mico, entorpezcan su mandato?
R. Esta renovaci¨®n de las cortes nos da esa esperanza. No podemos perder la esperanza. Esta esperanza no solo me alienta a m¨ª, sino que a otros exiliados y a otros procesados en Guatemala por ser funcionarios independientes y abogados correctos que quieren hacer un cambio en el pa¨ªs. Es una gran oportunidad para cambiar la historia de estos ¨²ltimos cinco a?os, que ha sido devastadora. Si la cabeza de la Corte est¨¢ bien, el cuerpo puede funcionar. Si tenemos una buena Corte Suprema de Justicia, que sea equilibrada, s¨ª podemos pensar que el sistema podr¨ªa funcionar con m¨¢s libertad, de forma independiente.