El malestar de los cubanos aumenta tras casi tres d¨ªas de apag¨®n masivo
La falta de suministro el¨¦ctrico despierta protestas y descontento social en la isla. Hospitales y hogares, al l¨ªmite
Cuando Susana Cuesta se despert¨® el domingo, en su casa del centro de la ciudad de Pinar del R¨ªo a¨²n no hab¨ªa llegado la luz. Luego supo que no se trataba solo de su barrio, sino de casi toda Cuba, que permanece desde el mediod¨ªa del viernes sumergida en un apag¨®n nacional que las autoridades no han logrado restablecer. ¡°Tengo mucho miedo, incertidumbre, impotencia¡ No s¨¦ a d¨®nde vamos a parar¡±, relata Cuesta por mensaje. ¡°Mi refrigerador se termin¨® de descongelar completamente. Se me ech¨® a perder la leche de las ni?as y ahora estoy cocinando muslos y contramuslos de pollo y unos bistecs de cerdo para que me duren un poquito m¨¢s y no se pudran¡±.
Son muchos quienes, en la isla, suman ya m¨¢s de 50 horas sin un servicio tan b¨¢sico como el de electricidad. Otros han tenido luz dos o tres horas y luego han vuelto a quedar completamente a oscuras. El panorama se vuelve desolador: hay personas cocinando con le?a en las aceras, largas filas para alcanzar los escasos cilindros de gas licuado y una incomunicaci¨®n generalizada ante la imposibilidad de recargar las bater¨ªas de sus celulares.
Los hospitales empiezan a colapsar. Una fuente que prefiri¨® permanecer en el anonimato asegura que en el centro pedi¨¢trico de la provincia de Pinar del R¨ªo hay varios ni?os con escabiosis ¡ªenfermedad contagiosa de la piel¡ª que no pueden ba?arse por falta de agua y de combustible que la bombee. La mayor¨ªa de las salas del hospital se mantienen en penumbra, excepto las de terapia intermedia, intensiva y onco-hematolog¨ªa. Algunos padres han decidido ingresar por su voluntad, con camas improvisadas en los pasillos, a ni?os que necesitan climatizaci¨®n o respiradores.
Aunque los cubanos llevan meses lidiando con inc¨®modos y prolongados apagones de varias horas, el pasado viernes el pa¨ªs declar¨® la ¡°emergencia energ¨¦tica¡± tras el colapso del sistema el¨¦ctrico nacional y el fallo de la central t¨¦rmica de Antonio Guiteras, la mayor de la isla. Las autoridades afirman estar trabajando para restituir el suministro, pero tres d¨ªas despu¨¦s Cuba sigue paralizada. La empresa estatal Uni¨®n El¨¦ctrica (UNE) asegur¨® el s¨¢bado que se hab¨ªa restablecido el 11% del total, sobre todo en la zona occidental del pa¨ªs, pero los esfuerzos no han sido suficientes. El sistema ha vuelto a caerse horas despu¨¦s y los cubanos permanecen con la incertidumbre de cu¨¢ndo podr¨¢n finalmente tener acceso a electricidad.
Las causas de la emergencia nacional no son nuevas: los expertos ya preve¨ªan una situaci¨®n similar desde hace tiempo. El Gobierno ha explicado que ¡ªadem¨¢s del bloqueo que mantiene Estados Unidos contra Cuba y con el que justifica la mayor parte del deterioro y las calamidades que sufre la isla¡ª el estado de la infraestructura es cr¨ªtico, con una evidente falta de combustible que no puede costear con las escasas divisas disponibles y un reciente incremento de la demanda. Aun as¨ª, el primer ministro, Manuel Marrero, ha afirmado que el pa¨ªs no est¨¢ ¡°en un abismo sin fondo¡±, pese a haber tenido que suspender las actividades docentes, culturales y recreativas, as¨ª como la actividad en los centros de trabajo que consideran no imprescindibles. Es decir, en la gran mayor¨ªa.
Generadores, demasiado caros
La vida se ha convertido en una cuesti¨®n de supervivencia para muchos. En los ¨²ltimos tiempos ha aumentado la venta informal de generadores el¨¦ctricos o paneles solares para superar el d¨ªa a d¨ªa. Son, sin embargo, pocos los que pueden agenciarse uno de estos, que tienen precios de hasta 2.000 d¨®lares (algo m¨¢s de 1.800 euros). ¡°Las personas que tienen plantas es porque tienen familia en el extranjero o una buena posici¨®n econ¨®mica aqu¨ª como para pagarse una¡±, cuenta Cuesta. ¡°La gran mayor¨ªa no tenemos, pero algunos vecinos se solidarizan y nos ayudan a cargar los celulares y los ventiladores [recargables] para los ni?os. La realidad es que no todo el mundo puede, porque son caros¡±.
El malestar que trae el apag¨®n ha provocado protestas, cacerolazos y otras manifestaciones de descontento en algunos puntos del pa¨ªs. En zonas de la capital como El Vedado, San Miguel del Padr¨®n, Lawton o Centro Habana, as¨ª como en provincias como Santiago de Cuba o Villa Clara, algunos han salido a la calle a protestar por una situaci¨®n que se ha ido completamente de las manos. El apag¨®n masivo iniciado el viernes es ya uno de los m¨¢s largos en la historia de una isla que ha vivido no pocos apagones, sobre todo desde la ca¨ªda de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y la consecuente p¨¦rdida de su principal socio comercial. Por si fuera poco, los meteor¨®logos han emitido una alerta por el hurac¨¢n Oscar, que amenaza con atravesar la costa norte cubana. Algo que agravar¨ªa una situaci¨®n ya de por s¨ª al l¨ªmite.
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