Cuesti¨®n de cadencia: ?qu¨¦ nos hace imparables en el senderismo?
Cuando practicamos senderismo, hiking o monta?ismo, la falta de condici¨®n es uno de los principales enemigos a vencer. Aprende el secreto para no terminar exhausto y sin ox¨ªgeno en tu pr¨®xima aventura natural
Durante los dos a?os recientes, las actividades al aire libre han tenido un repunte considerable, explicado en buena medida por el confinamiento y la b¨²squeda de una vida m¨¢s sana, as¨ª como el aire puro y los paisajes imponentes que los entornos naturales pueden brindar. Se estima que al cierre de 2021, cerca de 8.1 millones m¨¢s personas en comparaci¨®n con 2019 hicieron al menos una caminata al aire libre, cifra que va en aumento, de acuerdo con un informe de la Outdoor Foundation, ¨¢rea filantr¨®pica de Outdoor Industry Association.
Trekking, hiking, monta?ismo, downhill, una caminata tranquila, incluso un camping o un picnic han sido la gran v¨¢lvula de escape para miles de personas, quienes est¨¢n en b¨²squeda de nuevas experiencias, de una vida m¨¢s sana o de desaf¨ªos que los pongan a prueba.
No son pocos quienes han confesado en m¨¢s de una ocasi¨®n sentirse felices o sorprendidos al llegar a la cumbre de un ca?¨®n o una monta?a, lograr una caminata de m¨¢s de cuatro horas, o sencillamente de mantener la emoci¨®n por la aventura, as¨ª como la curiosidad por desconectarse de la vida moderna y enfrentarse ante los indecibles paisajes naturales.
Para Jes¨²s Rivera, gu¨ªa de alta monta?a quien lleva cerca de 14 a?os haciendo este tipo de actividades, la atracci¨®n y pasi¨®n por la aventura tiene distintos significados y or¨ªgenes para cada persona. ¡°En mi caso representa interactuar con aspectos positivos del mundo, saber que te sientes libre y capaz de vivir de forma imparable. Y cuando llegas, conoces y te enamoras de entornos as¨ª, cada vez buscas m¨¢s y mejores escenarios, siendo testigo de esa magnificencia y del asombro de ver que puede existir todo eso y de esa manera¡±, precisa.
Justamente la diversidad de ¨®pticas, sensibilidades y objetivos es lo que hace que los bosques, los desiertos, las ca?adas o las monta?as puedan regalarnos sus maravillas y beneficios al organismo de forma tan generosa y excitante sin importar nuestra edad, condici¨®n u objetivo con el cual emprendemos la aventura.
Para Gabriela Gissel Gonzalez Huchin, marchista profesional de 30 a?os, las actividades en ambientes naturales y terrenos elevados es vital para su desarrollo como atleta de alto rendimiento. ¡°Desde los doce a?os de edad comenc¨¦ a subir al Nevado de Toluca, buscando la altura debido a que se generan m¨¢s gl¨®bulos rojos, que mejora tu nivel de oxigenaci¨®n. Pero yo creo que adem¨¢s, la monta?a te fortalece f¨ªsica y mentalmente, te familiarizas y conectas de una forma especial con los ¨¢rboles, la belleza de la naturaleza, el silencio; todo eso te transporta a otro mundo al que vives cotidianamente¡±, explica Gissel.
Entre los beneficios de una buena caminata, nos explica Antonio M¨¢rquez de Voortus, proyecto eco sustentable enfocado a la aventura exterior y el confort, se encuentran ¡°el fortalecimiento del sistema inmunol¨®gico, estimula la disminuci¨®n de enfermedades infecciosas, combate la depresi¨®n, ayuda al hoy necesario descanso mental, en buena medida derivado del ritmo en el que est¨¢n las ciudades actualmente y para el cual no est¨¢ preparado el cuerpo humano de forma natural, entre otras cosas. Salir a la naturaleza y tener este cambio de escenarios y velocidades te ayuda a tener un descanso o suspiro mental¡±, asegura el cofundador de Voortus.
Cadencia, la clave
No obstante lo bello y significativo que las actividades exteriores puedan resultar, uno de sus escenarios recurrentes nos encuentra sudando y agotados de forma inmediata, incluso sufriendo el mal de altura o de monta?a, que es el nombre com¨²n con el que se le denomina a la hipoxia o falta de ox¨ªgeno y adaptabilidad en lugares con una altitud distinta a la que estamos habituados.
Adem¨¢s de las rocas, los terrenos irregulares o los senderos empinados, los entornos naturales suelen presentar un desaf¨ªo f¨ªsico considerable, especialmente para aquellos quienes no est¨¢n habituados al ejercicio regular o enfocado en la resistencia. Aunque esto var¨ªa entre persona y persona. Francisco Z¨¢rate, monta?ista amateur con m¨¢s de diez a?os de experiencia, afirma que ¡°hay gente que lo puede hacer con mucha facilidad, que no siente ninguna diferencia, pero tambi¨¦n existe a quien le puede dar mal de monta?a, incluso en niveles bajos de altura¡±.
A esto habr¨ªa que agregar que en el bosque, el desierto o la monta?a, el tiempo y la luz suelen comportarse de formas muy distintas a las que estamos habituados, por lo que un retraso, percance por fatiga o cansancio no s¨®lo pueden retrasar la aventura sino poner en riesgo toda nuestra experiencia.
Al respecto, el gu¨ªa Jes¨²s Rivera destaca que en el caso de la alta monta?a, es despu¨¦s del mediod¨ªa cuando el clima cambia de forma mucho m¨¢s abrupta e intempestiva, por lo que habitualmente estas aventuras comienzan por la noche, intentando terminar lo m¨¢s temprano posible. ¡°All¨¢ arriba se juntan nubes, corrientes de aire, vientos fuertes o irregulares, por lo que hacer alta monta?a por la tarde se torna muy complicado. Usualmente solemos hacer ascenso a la media noche, contemplando de seis a nueve horas y bajar¡±.
Tanto Jes¨²s como Gabriela, Francisco y Antonio coinciden en que una de las claves para ser imparables en nuestra carrera, caminata, ascenso o recorrido es mantener una cadencia constante, es decir un n¨²mero determinado de pasos dentro de un cierto lapso de tiempo. Y aunque por muchos a?os prevaleci¨® la idea de que el promedio de una cadencia ideal gira alrededor de 180 pasos por minuto, un estudio publicado en 2019 en el Diario de Fisiolog¨ªa Aplicada, perteneciente a la Sociedad Americana de Fisiolog¨ªa, demostr¨® que no existe una misma cadencia para una persona u otra, y que los motivos por los que ¨¦sta puede variar de forma m¨²ltiple.
Sin embargo, nuestros expertos consultados coinciden en que conseguir una cadencia constante requiere de una respiraci¨®n profunda y acompasada, algo de concentraci¨®n, as¨ª como conocer nuestro ritmo interno. No hay necesidad de correr o hacerlo de forma irregular.
Francisco Z¨¢rate reflexiona en que muchas veces, en estas aventuras, ¡°cuando vamos en grupo nos forzamos a ir m¨¢s r¨¢pido de lo normal y eso puede llevarnos a tomar malas decisiones. Si uno se presiona puede tomar un mal camino o lastimarse, o ir m¨¢s r¨¢pido de lo normal, lo cual puede quebrarnos. Llevar tu propio ritmo te ayuda a conocerte para exigirte m¨¢s, pero poco a poco¡±.
Para evitar que nuestra aventura, carrera o caminata se vea interrumpida es importante tambi¨¦n tomar las precauciones correctas. Adem¨¢s de la cadencia, nos explica Gabriela Gissel, ¡°t¨¦cnicamente hay que cuidar mucho la pisada, todo el tiempo, ya que el terreno suele ser irregulares, esto adem¨¢s de contar con un buen equipo, botas, as¨ª como procurar caminar y correr antes para que lo disfrutes m¨¢s e ir subiendo la intensidad¡±.
En caso de mal de monta?a, afirma Jes¨²s Rivera, no hay mejor remedio que descender, ya que de lo contrario podr¨ªamos complicarlo a¨²n m¨¢s. ¡°Hay que llevar un ritmo constante pero suave para no enfriarnos y no caer en la noci¨®n de que no estamos avanzando. Pasos suaves para no demandar m¨¢s ox¨ªgeno que el que podemos dar¡±.