Un negocio de familia: la sorprendente ruta de una constructora multimillonaria
Despu¨¦s de servir en el ej¨¦rcito en Irak y Afganist¨¢n, convertirse en polic¨ªa, casarse y ser padre, un favor imprevisto hizo a Joshua Albarez regresar a un oficio que lleva en la sangre
Cuando parec¨ªa que Joshua Albarez hab¨ªa conseguido todo lo que quer¨ªa en la vida: era oficial de polic¨ªa, su sue?o desde ni?o, hab¨ªa conocido ¡°accidentalmente¡± a su esposa Tiffany, y construido con ella una linda familia, una circunstancia inesperada lo inspir¨® a apostarlo todo con vigor e ilusi¨®n por un negocio al que, aunque le corre por las venas, nunca pens¨® dedicarse.
De Joshua puede decirse que naci¨® equipado para construir. ¡°Desde que ten¨ªa 12 o 13 a?os acompa?aba a mi padre a trabajar en San Antonio. En esa ¨¦poca mi abuelo paterno ten¨ªa una empresa de montaje de estructuras de acero y mi pap¨¢ y sus dos hermanos trabajaban de supervisores, dirigiendo las cuadrillas de constructores¡±, cuenta Joshua. ¡°Ellos ten¨ªa varias cuadrillas que trabajaban ac¨¢ y a veces en M¨¦xico, pero siempre necesitaban ayuda. As¨ª que pas¨¦ muchos veranos recogiendo basura, alcanzando herramientas. Una de las primeras cosas que aprend¨ª fue a arrojar las herramientas a los trabajadores que estaban hasta a 40 pies de altura¡±, cuenta.
Como todo adolescente, prefer¨ªa quedarse en casa paseando en bicicleta o jugando con los amigos, pero esta circunstancia le ayud¨® aprender desde temprana edad un oficio que a?os m¨¢s tarde le permitir¨ªa darle un cambio radical a su vida. ¡°A medida que crec¨ªa fui aprendiendo m¨¢s cosas, hasta que la construcci¨®n se convirti¨® sin que me lo propusiera en parte de mi vida¡±, explica.
Despu¨¦s de desmovilizarse a los 22 a?os del cuerpo de Infanter¨ªa de Marina de los Estados Unidos, donde estuvo enrolado por cuatro a?os ¡ªy en los que particip¨® en misiones en Irak, por siete meses entre 2007 y 2008, y en Afganist¨¢n por seis, en el 2009¡ª, su padre, Mark Albarez, ya ten¨ªa una compa?¨ªa propia reci¨¦n creada y estaba trabajando en el acero de una construcci¨®n en Round Rock, un pueblo al norte de Austin. ¡°Era un edificio comercial, un supermercado que se llamaba La Michoacana Meat Market. ?l necesitaba ayuda y yo necesitaba dinero¡±, recuerda. ¡°As¨ª que inmediatamente empec¨¦ a trabajar en la construcci¨®n porque era lo que ten¨ªa a mano, un trabajo que me resultaba f¨¢cil, y que sab¨ªa hacer¡±.
Despu¨¦s Joshua se convirti¨® en oficial de polic¨ªa, que siempre fue lo que quiso ser desde ni?o, y como si de una pel¨ªcula se tratara, as¨ª fue como conoci¨® a su esposa Tiffany. ¡°Era polic¨ªa en la ciudad donde ella administraba varios complejos de apartamentos. Una ma?ana nos llam¨® a la estaci¨®n porque encontr¨® el port¨®n de un estacionamiento da?ado. La noche anterior yo hab¨ªa trabajado en el turno nocturno y respond¨ª a una llamada porque una mujer ebria se estrell¨® contra ese port¨®n y su auto se incendi¨®. As¨ª que respond¨ª a esa llamada por la noche, y luego, a la ma?ana siguiente, a la de Tiffany. Y ya ella te contar¨¢ el resto¡±, bromea Joshua.
¡°Boy, that was just the meet-cute, if you will¡±, dice riendo Tiffany. Un lindo encuentro inesperado que dio pie a una profunda amistad. ¡°Nos hicimos muy buenos amigos. Fue entra?able encontrar a alguien que tuviera tantas cualidades que coincidieran con mi visi¨®n de la vida, mi actitud, mi perspectiva en general. Nos emparejamos en todo, m¨²sica, comida, actividades, todo estaba a la par. Luego, Josh, sigui¨® viniendo y abri¨¦ndose camino hasta que un buen d¨ªa me invit¨® a salir¡±, cuenta Tiffany. ¡°As¨ª fue como empez¨® todo¡±.
Nada indicaba que se les avecinara ning¨²n cambio radical en su vida. De hecho, Joshua, quien eventualmente ayudaba a su padre en alg¨²n trabajo de construcci¨®n, continuaba como oficial de polic¨ªa, cuando naci¨® Maverick, el hijo en com¨²n de la pareja ¡ªTiffany tiene dos hijos de un matrimonio anterior que ¨¦l ha ayudado a criar desde peque?os¡ª, y tom¨® tres meses de licencia de maternidad. Cuando se acercaba el tercer mes, su pap¨¢ le pidi¨® ayuda en un trabajo de construcci¨®n. ¡°Lo hice principalmente para ayudarlo, porque sab¨ªa que era dif¨ªcil poder terminar ese trabajo solo. Pero mientras estaba all¨ª trabajando not¨¦ que este era un ritmo diferente para m¨ª, que se me acomodaba bien, despu¨¦s de ser polic¨ªa durante tanto tiempo¡±, recuerda Joshua de lo que puede ser considerado su Eureka moment. ¡°Uno de esos d¨ªas, cuando regres¨¦ a casa le pregunt¨¦ a Tiffany: ?qu¨¦ te parece si comenzamos nuestra propia compa?¨ªa de construcci¨®n? Ella fue realmente la que me anim¨® a hacerlo. Me dijo: ¡®Hag¨¢moslo. ?Por qu¨¦ no?¡¯. Yo estaba un poco dudoso porque era abandonar un trabajo seguro, un sueldo estable¡±.
El optimismo con que Tiffany respondi¨® a la idea se explica por la gran seguridad que tiene en su propia capacidad y en la de su esposo. ¡°Tengo una inmensa experiencia en gesti¨®n de operaciones. As¨ª que sab¨ªa c¨®mo iniciar la empresa y Josh conoce mucho de construcci¨®n¡±, explica la joven graduada de administraci¨®n empresarial en West Texas A&M University con una maestr¨ªa en gerencia de la construcci¨®n por la Universidad Estatal de Texas. ¡°Aun as¨ª, hemos tenido que superar muchas barreras, como el machismo en la construcci¨®n. Tambi¨¦n vivimos juntos, trabajamos juntos. Lo hacemos todo juntos. ?D¨®nde est¨¢ el l¨ªmite entre ser esposos y tener una empresa juntos? Eso tambi¨¦n ha sido un obst¨¢culo. Pero, a pesar del desaf¨ªo, es extremadamente gratificante, porque estamos creando esta riqueza generacional. Estamos creando esta empresa en la que nuestros hijos pueden participar si lo desean en el futuro¡±.
M¨¢s de tres d¨¦cadas y varias compa?¨ªas de construcci¨®n despu¨¦s, lo que le ha permitido a Albarez Construction, una compa?¨ªa moderna y eficiente con proyectos multimillonarios, conseguir un ¨¦xito que le fue elusivo a generaciones anteriores es precisamente la preparaci¨®n y el camino que estos les pavimentaron. Ellos son la punta del iceberg en la que se resume el trabajo y la historia de resiliencia y creatividad de tres generaciones de mexicoamericanos emprendedores y trabajadores. ¡°Dir¨ªa que en cuanto a mi lado de la familia, ellos solo estaban tratando de sobrevivir cuando fundaron sus negocios de construcci¨®n, que es una ocupaci¨®n tan peligrosa, en un mercado extremadamente vol¨¢til. Mientras que yo tuve la oportunidad de conocer el negocio a trav¨¦s de ellos y educarme. Tomar decisiones m¨¢s informadas. Creo que eso nos permiti¨® estar donde estamos hoy¡±.
Tiffany est¨¢ de acuerdo. ¡°Nuestras familias estaban enfocadas completamente en la supervivencia, c¨®mo llegar aqu¨ª y vivir el sue?o americano. Y, ?qu¨¦ era el sue?o americano? Ni siquiera creo que lo hayan tenido muy claro o lo hayan alcanzado. Se limitaban a llevar comida a la mesa y comprar las cosas que necesitaban. As¨ª que para su abuelo, el mero hecho de tener una compa?¨ªa ya era una victoria, era signo de que estaba logrando cosas grandiosas. Creo que esa es la diferencia entre Josh y las generaciones anteriores, que nosotros tenemos otras prioridades. Nosotros queremos que nuestra compa?¨ªa sea sostenible y rentable, queremos construir algo monumental¡±.