La crisis clim¨¢tica, el tema ausente en la campa?a a la Presidencia argentina
En medio de la crisis econ¨®mica, al medio ambiente le cuesta abrirse espacio en el debate pol¨ªtico. Pero podr¨ªa representar una oportunidad para la econom¨ªa y la sociedad en uno de los pa¨ªses m¨¢s vulnerables al cambio clim¨¢tico de la regi¨®n
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Argentina camina por semanas decisivas que definir¨¢n las candidaturas para sus pr¨®ximas elecciones presidenciales. Despu¨¦s de que el actual presidente Alberto Fern¨¢ndez y expresidentes como Mauricio Macri y Cristina Fern¨¢ndez anunciaran su intenci¨®n de no aspirar a la Casa Rosada, la carrera pol¨ªtica por el cargo m¨¢s importante del pa¨ªs latinoamericano es incierta. Con m¨¢s de 15 precandidatos de m¨²ltiples partidos pol¨ªticos, el escenario final sobre qui¨¦nes aspiran a liderar el pa¨ªs se definir¨¢ a finales de este mes.
Como ha ocurrido en la mayor¨ªa de pa¨ªses de la regi¨®n, Argentina ir¨¢ a las urnas atravesando un momento pol¨ªtico, social y econ¨®mico complejo. En este momento, la desaprobaci¨®n del Gobierno de Fern¨¢ndez llega al 68% y el pa¨ªs pasa por una crisis econ¨®mica intensa con una inflaci¨®n interanual que en abril se ubic¨® en el 108,8% (una cifra de tres d¨ªgitos que no se ve¨ªa desde octubre de 1991) y un d¨®lar ¡°blue¡± ¡ªel que se tranza de manera informal¡ª cuyo valor ha subido m¨¢s del 80% frente al d¨®lar oficial, profundizando la incertidumbre.
Lo anterior se traduce, inevitablemente, en vulnerabilidades sociales. Por ejemplo, en el ¨²ltimo a?o Argentina tuvo la segunda inflaci¨®n m¨¢s alta de alimentos en el mundo con 115%. Esto resulta particularmente grave en un pa¨ªs en el que el 61,6% de los ni?os y ni?as, alrededor de 8,2 millones de personas, sufren de pobreza monetaria y otros 4,2 millones sufren de inseguridad alimentaria.
Este preocupante panorama, con raz¨®n, ocupa las discusiones alrededor de la campa?a presidencial. Sin embargo, hay un tema ausente que puede representar una oportunidad para la econom¨ªa y la sociedad argentina: el cambio clim¨¢tico. En un momento en el que la gran mayor¨ªa de las familias argentinas se preocupan por sobrevivir, este parece un tema irrelevante, pero en realidad es todo lo contrario.
Como lo se?alan los ¨²ltimos reportes de organismos internacionales y numerosos estudios cient¨ªficos, el mundo est¨¢ en una d¨¦cada cr¨ªtica para la acci¨®n clim¨¢tica. De acuerdo con el Panel Intergubernamental de Expertos para el Cambio Clim¨¢tico (IPCC por sus siglas en ingl¨¦s), s¨®lo con la infraestructura actual y planeada de combustibles f¨®siles, el mundo se calentar¨¢ aproximadamente 2 grados cent¨ªgrados, lo que traer¨¢ graves consecuencias.
Argentina es uno de los pa¨ªses m¨¢s vulnerables a los efectos del cambio clim¨¢tico de la regi¨®n. De acuerdo con el Global Climate Risk Index de 2021, de 180 pa¨ªses analizados, Argentina ocupa el puesto n¨²mero 55 en exposici¨®n y vulnerabilidad a eventos clim¨¢ticos. De hecho, el cambio clim¨¢tico ya le est¨¢ jugando una mala pasada al pa¨ªs respecto al aumento de las temperaturas y la baja disponibilidad de agua que profundizan los impactos de la sequ¨ªa y por ende las desigualdades sociales.
La crisis clim¨¢tica debe ser tratada como un elemento central para alcanzar los niveles de desarrollo econ¨®mico, pol¨ªtico, social y ambiental que Argentina espera y necesita para los siguientes a?os. Y para esto, es necesario contrarrestar la narrativa equivocada de que la lucha contra el cambio clim¨¢tico va en detrimento del desarrollo.
Lejos de ser una traba para el desarrollo, la acci¨®n clim¨¢tica es una oportunidad para Argentina. El pa¨ªs ya ha avanzado en institucionalizar el cambio clim¨¢tico en la gobernanza nacional a trav¨¦s del Gabinete Nacional de Cambio Clim¨¢tico y el Consejo Asesor, y ha sostenido su ritmo de reporte y comunicaci¨®n promoviendo la transparencia en el marco del Acuerdo de Par¨ªs, lo cual debe ser mantenido y respaldado por la acci¨®n en los territorios.
Sobre esta base, por ejemplo, Argentina puede jugar un rol clave en la transici¨®n energ¨¦tica dado su potencial solar y e¨®lico, reduciendo su dependencia a los combustibles f¨®siles, aumentando el acceso a energ¨ªas renovables para la poblaci¨®n y mejorando su competitividad en el mercado. Adicionalmente, la movilidad el¨¦ctrica podr¨ªa generar 120,000 nuevos empleos y el pa¨ªs puede ser competitivo en diferentes productos como la producci¨®n de alimentos agroecol¨®gicos, manufacturas, y energ¨ªa, entre otros.
La oportunidad no solo es a nivel nacional sino tambi¨¦n a nivel internacional. Argentina es el tercer pa¨ªs que m¨¢s emisiones genera en Am¨¦rica Latina, despu¨¦s de Brasil y M¨¦xico, y la mitad de ellas provienen del sector energ¨ªa. Los tres pa¨ªses son los ¨²nicos de la regi¨®n que pertenecen al G20, y en este contexto, un nuevo Gobierno argentino puede trabajar en conjunto para liderar el cambio con miras a, entre otras, aumentar la visibilizaci¨®n de la regi¨®n en la pol¨ªtica clim¨¢tica global, apoy¨¢ndose en momentos pol¨ªticos clave, que de por s¨ª pondr¨¢n los ojos en Am¨¦rica Latina, incluyendo el G20 en Brasil en 2024 y la COP30 de cambio clim¨¢tico en ese mismo pa¨ªs en 2025.
Esta alineaci¨®n geopol¨ªtica es adem¨¢s una oportunidad para trabajar con otros gobiernos como los de Chile y Colombia, y generar alianzas que redunden en mayor unidad regional con el objetivo de atraer importantes beneficios como el acceso a recursos financieros, inversiones y capacidad t¨¦cnica para apoyar la transici¨®n energ¨¦tica justa y el fortalecimiento de la capacidad de adaptaci¨®n y resiliencia de nuestros pa¨ªses, ciudades y comunidades.
Es hora de que todos los partidos pol¨ªticos y sus candidatos y candidatas aborden el tema del cambio clim¨¢tico desde una mirada integral, entendiendo que la crisis clim¨¢tica est¨¢ intr¨ªnsecamente ligada a los principales sectores productivos argentinos que se encuentran amenazados por los impactos clim¨¢ticos en el corto y mediano plazo. Por ejemplo, si las tendencias globales se normalizan, el petr¨®leo y el gas argentino al que los gobiernos le siguen apostando para estabilizar la econom¨ªa (solamente en 2023 se esperan inversiones de casi US$8,000 millones en Vaca Muerta), se convertir¨¢n en inversiones desperdiciadas que no generar¨¢n las ganancias prometidas por los cambios ya previsibles del mercado.
Las y los argentinos deber¨¢n elegir en tiempos de crisis. La pr¨®xima elecci¨®n que suceder¨¢ en octubre puede ser el pre¨¢mbulo del cambio necesario o bien, retrasar la transici¨®n y seguir apostando por las viejas recetas conocidas que han llevado al pa¨ªs a una profundizaci¨®n de sus crisis, desperdiciando la oportunidad fundamental de descarbonizar la econom¨ªa al tiempo que se crea un pa¨ªs m¨¢s justo y resiliente.