Milei y el Congreso argentino libran la batalla por el veto a la ley de financiamiento universitario
La oposici¨®n necesita dos tercios de los votos en Diputados para insistir con la norma anulada por el presidente ultraderechista
El Congreso argentino ser¨¢ escenario de una dura batalla pol¨ªtica. La oposici¨®n aspira a anular este mi¨¦rcoles el veto del presidente, Javier Milei, a una ley que garantizaba el financiamiento de las universidades p¨²blicas. El Gobierno negociaba anoche con una decena de indecisos para alcanzar el n¨²mero m¨¢gico de 87 votos, suficientes para bloquear los dos tercios que necesitan los diputados para insistir con la norma aprobada en septiembre por las dos c¨¢maras del Parlamento. La Casa Rosada cuenta con 39 diputados propios y el apoyo del Pro, el partido del expresidente Mauricio Macri, quien el martes anticip¨® que votar¨¢ a favor de Milei con sus 34 representantes. A¨²n as¨ª, el presidente necesita sumar a otras fuerzas. Apuesta a robar legisladores a la Uni¨®n C¨ªvica Radical (UCR), un partido centenario que tiene como una de sus banderas la defensa de la universidad p¨²blica, y a otras fuerzas provinciales necesitadas del dinero del Ejecutivo.
Si el veto cae en Diputados, la discusi¨®n pasar¨¢ al Senado, donde la oposici¨®n, representada en su mayor parte por el peronismo kirchnerista, es a¨²n m¨¢s fuerte. Si Milei logra, en cambio, un triunfo este mi¨¦rcoles, la oposici¨®n ya no podr¨¢ insistir con la ley de financiamiento y el Ejecutivo se habr¨¢ salido con la suya. Ser¨¢, de todas formas, una jornada de repercusiones pol¨ªtica de largo plazo en Argentina. El presidente est¨¢ pagando un algo costo por su intransigencia en su lucha contra el d¨¦ficit. Con el argumento de que la ley amenaza su pol¨ªtica de recorte del gasto p¨²blico, se ha enfrentado a toda la comunidad universitaria. Se trata de un sector que cala en la clase media argentina y es orgullo de una sociedad que considera a la gratuidad de la educaci¨®n superior la clave de la promoci¨®n social.
La pelea pone en evidencia la debilidad parlamentaria de Milei. Hace un mes, no pudo evitar la aprobaci¨®n de la ley de financiamiento universitario y ahora pelea voto a voto con sus aliados para defender el veto. Con cada disputa, deja jirones de poder. Cada vez depende m¨¢s del apoyo del Pro, el partido de Macri, para avanzar en las reformas que impulsa. El expresidente anunci¨® el martes que dar¨ªa su voto a Milei por ¡°la necesidad de sostener el equilibrio fiscal como prioridad para que nuestro pa¨ªs salga adelante¡±. ¡°Somos coherentes con nuestro respeto a la ley de Administraci¨®n Financiera que impide que una ley defina un gasto sin explicar c¨®mo se financia¡±, afirm¨® en un comunicado el Pro. Pero enseguida acus¨® a Milei de haber agravado el conflicto con las universidades ¡°por cuestiones internas del propio Gobierno, conflicto que con una gesti¨®n profesional y eficiente se podr¨ªa haber evitado¡±. ¡°Como siempre hemos se?alado, para el Pro la gesti¨®n importa¡±, advirti¨® el macrismo.
Una decena de facultades de la Universidad de Buenos Aires (UBA), la m¨¢s grande del pa¨ªs, amanecieron el mi¨¦rcoles ocupadas por los estudiantes, que amenzaron con mantener las tomas hasta que caiga el veto presidencial. Medidas de fuerza similiares se replicaron en otras universidades nacionales del pa¨ªs. El mi¨¦rcoles 2 de octubre pasado, unas 300.000 personas marcharon solo en Buenos Aires exigiendo m¨¢s recursos del Estado para las universidades. Este mi¨¦rcoles, habr¨¢ manifestaciones frente el Congreso para presionar a los diputados, sobre todo a la docena de indecisos que tienen en sus manos el resultado de la votaci¨®n.
Desde que Milei lleg¨® al Gobierno, los aportes estatales a las universidades cayeron un 30%. Los salarios de los profesores perdieron adem¨¢s frente a la inflaci¨®n un 23,7% de su poder de compra entre noviembre de 2023 y agosto de 2024, seg¨²n la Conadu, una federaci¨®n de gremios universitarios. En un intento por reducir la resistencia de los docentes, el Gobierno decret¨® en la v¨ªspera de la votaci¨®n una subida salarial del 6,8%, a pesar de que no acord¨® con los sindicatos. ¡°Pese al rechazo gremial, se otorgar¨¢ el mayor aumento acumulado a este mes dentro del Estado Nacional en consonancia con el compromiso asumido de priorizar el salario y no las disputas pol¨ªticas¡±, indic¨® en un comunicado el Ministerio de Capital Humano, que con Milei absorvi¨® en diciembre pasado el de Educaci¨®n.
La postura del Gobierno es que no aceptar¨¢ ninguna ley que suponga un gasto extra sin especificar de d¨®nde salen los fondos. El ministro de Econom¨ªa, Santiago Caputo, advirti¨® incluso que llevar¨¢n la ley de financiamiento universitario ante la justicia si la oposici¨®n logra los votos necesarios para mantenerla con vida. Se trata, en cualquier caso, de una cuesti¨®n de principios. El costo fiscal de la norma es de solo 0,14 puntos del PIB, seg¨²n c¨¢lculos de la Oficina de Presupuesto del Congreso, pero Milei pretende dejar en claro que no ceder¨¢ en su cruzada contra el d¨¦ficit.
Esta es la segunda vez desde que asumi¨® en diciembre que Milei se juega a todo o nada en el Congreso. A finales de agosto, la oposici¨®n aprob¨® un aumento del 8% para los jubilados, atentos a que se han llevado la peor parte del ajuste fiscal emprendido por el Gobierno ultraderechista. El presidente vet¨® la ley el 2 de septiembre y dos semanas despu¨¦s consigui¨® los 87 votos necesarios para defenderlo del intento opositor por anularlo. Luego invit¨® a los ¡°87 h¨¦roes¡±, como los llam¨®, a celebrar el bloqueo a la subida de las jubuilaciones con un asado en la residencia presidencial.
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