Espa?a, al albur de Valle-Incl¨¢n
El escritor introdujo lo esperp¨¦ntico en nuestro idioma para definir lo grotesco que causaba hilaridad y sonrojo. Hoy se echa en falta una voz de esa envergadura que pinte lo que est¨¢ pasando, pero el recurso al pasado nunca es la soluci¨®n