Suzanne Lacy, la primera red social
La artista estadounidense, que exhibe 50 a?os de activismo en el CAAC de Sevilla, impuls¨® Ariadne, el primer ¡°museo flotante¡± con obras de artistas que combaten la invisibilidad y la violencia de g¨¦nero
Entre el feminismo y el arte existe un espacio de acci¨®n intermedio tan inabarcable como la vida. Cualquier actitud, cualquier representaci¨®n, revela tensiones entre ¨¦tica y est¨¦tica, forma y contenido, feminismo y feminidad. Uno de los premios m¨¢s interesantes del mundo del arte ¡ªcon m¨¢s h¨¦roes que hero¨ªnas¡ª se refiere a ese ¡°qui¨¦n¡± colectivo: Anonymous Was a Woman (el nombre proviene de una frase del libro de Virginia Woolf Una habitaci¨®n propia) y se otorga anualmente a mujeres de entre 45 y 81 a?os. Entre las galardonadas de 2020, precisamente cuando se celebra el centenario de la consecuci¨®n del derecho a voto de las estadounidenses, figura la espa?ola Elena del Rivero (Valencia, 1949), junto a otras nueve artistas, todas americanas.
Pocos saben que la conquista del sufragio femenino en 1920 (las mujeres negras tuvieron que esperar hasta 1965) est¨¢ ligada a una pandemia, la mal denominada gripe espa?ola de 1918. Tras un arduo proceso reivindicativo que deb¨ªa impulsar una enmienda constitucional para conceder el voto a las mujeres, el presidente Woodrow Wilson reconoci¨® finalmente ¡°su esfuerzo y patriotismo durante la guerra¡±, tanto en el ¨¢rea de salud como en los puestos que los hombres hab¨ªan dejado para ir al frente de batalla. La gripe hab¨ªa dejado los hospitales sin camas ni recursos y las enfermeras y auxiliares tuvieron un papel decisivo en la salvaci¨®n de muchas vidas. El trabajo comunitario de muchas madres y abuelas teji¨® el gran cambio. La pandemia hab¨ªa puesto el foco sobre las injusticias hacia los desfavorecidos y a¨²n hoy, cien a?os despu¨¦s, lo sigue haciendo, con la consiguiente cuesti¨®n, m¨¢s ret¨®rica que inquisitiva, de si el feminismo seguir¨¢ siendo capaz de transformar los escler¨®ticos paradigmas sociales.
Desde finales de los a?os sesenta, la obra de la norteamericana Suzanne Lacy (Wasco, 1945) ha ido marcado momentos relevantes de protesta contra la agresi¨®n y la marginaci¨®n de las mujeres. Sus performances colectivas que denuncian las violaciones sistem¨¢ticas y otras formas consentidas de terrorismo sexual constituyeron un nuevo centro de inter¨¦s para la historia del arte, en particular en materia de sufrimiento y humillaciones. La pieza In Mourning and in Rage (1977) que organiz¨® con Leslie Lebowitz, llev¨® a reanudar las marchas ¡°para recuperar la noche¡± y son el origen de otras muchas manifestaciones pol¨ªticas (el actual Me Too) contra los abusos y las violaciones. En una nueva retrospectiva comisariada por Roxana Gazdzinski, el Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo (CAAC) revisa muy oportunamente su trayectoria, medio siglo de ¡°arte de las malas experiencias¡± (ordeal art) llevado a cabo con una red social de mujeres ¡ªcuidadosamente organizada y coreografiada¡ª a trav¨¦s de fotograf¨ªas, instalaciones, objetos y acciones dise?adas para entornos concretos. Estas son algunas:
¡ª Net Construction. Santa B¨¢rbara (California), 1973. La instalaci¨®n explora lo que nos vincula como criaturas biol¨®gicas y c¨®mo, en cierto sentido, estamos atrapados en nuestra propia carne. En una red de cuerdas hechas a mano, la artista amarra ri?ones de ternera y ata a algunos miembros del p¨²blico. Se quita la ropa, sujeta los extremos de las cuerdas a varias partes de su cuerpo e inicia una serie lenta de movimientos, influyendo en los de las personas que hay en la sala y a la vez siendo manipulada por ellos.
¡ª In Mourning and in Rage. Ayuntamiento de Los ?ngeles, 1977. Lacy y Lebowitz organizaron una protesta contra la cobertura sensacionalista en la prensa local de una serie de asesinatos con violaci¨®n a mujeres en Los ?ngeles. Las participantes, vestidas de negro, simbolizaban el pesar y el luto. Sus t¨²nicas transmit¨ªan una sensaci¨®n artificial de peso, eran presencias imponentes que flotaban dentro de unas capas rojas que evocaban el dolor y la rabia. La acci¨®n fue el punto de partida de la organizaci¨®n de mujeres de ¨¢mbito nacional Ariadne. A Social Network. Restricted Access (Santa M¨®nica, California, 1978-1980). Esta instalaci¨®n re¨²ne toda la documentaci¨®n en papel del trabajo de Ariadne, una red de arte social que opera desde 1977 para impulsar la colaboraci¨®n entre los/las artistas que protestan contra la violencia de g¨¦nero.
¡ª International Dinner Party. 1979. Realizado en colaboraci¨®n con Linda Pruess, es un happening que consiste en una cena celebrada simult¨¢neamente en distintos lugares del mundo para dar a conocer diversas redes de organizaciones de desarrollo personal y de mujeres de todo el planeta, en la v¨ªspera de la inauguraci¨®n de la primera exposici¨®n de The Dinner Party de Judy Chicago, que hab¨ªa sido profesora de Lacy. A causa de las diferencias horarias, la obra se convirti¨® en una performance de 24 horas que qued¨® documentada en los telegramas enviados al SFMoMA por m¨¢s de 200 grupos. Lacy se?al¨® la ubicaci¨®n de cada cena con un tri¨¢ngulo rojo invertido en un mapamundi en blanco y negro de m¨¢s de 6 metros de amplitud.
¡ª Whisper, The Waves, The Wind. La Jolla (California), 1983-84. Junto a la artista Sharon Allen, Lacy y grupos de mujeres mayores del sur de California crearon una serie de acciones pol¨ªticas y medi¨¢ticas que culminaron en un tableau vivant realizado frente al mar ante mil espectadores. En la playa de La Jolla (California), 154 mujeres vestidas de blanco bajaron en procesi¨®n por unas escaleras empinadas hasta sus asientos situados en dos playas contiguas, se sentaron en torno a varias mesas cubiertas con manteles blancos mientras hablaban de sus vidas, sus relaciones, sus esperanzas y la vejez. Posteriormente, se invit¨® al p¨²blico a acceder a la arena para relacionarse y escuchar m¨¢s de cerca el movimiento c¨ªclico de las olas.
Asociaciones inevitables. Suzanne Lacy. CAAC. Sevilla. Hasta el 14 de marzo.
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