Donna Ferrato, un asalto al coraz¨®n de la mujer
¡®Holy¡¯, el ¨²ltimo libro de la fot¨®grafa y activista estadounidense, resume una trayectoria de cinco d¨¦cadas durante la cual ha utilizado la c¨¢mara como un arma en defensa de la igualdad de g¨¦nero
¡°Soy una mujer con una c¨¢mara. Elijo por d¨®nde camino. Escojo con qui¨¦n. Soy la creadora de mis fotograf¨ªas. Ese es mi credo¡±. As¨ª se presenta Donna Ferrato (Waltham, Massachusetts, Estados Unidos, 1949), que a lo largo de cinco d¨¦cadas ha utilizado su c¨¢mara como un arma en defensa de la igualdad de g¨¦nero. Su trayectoria queda resumida en Holy, una cruzada de 176 p¨¢ginas salpicadas de rojo que no deja indiferente al espectador. Poderosas im¨¢genes en blanco y negro donde resuena la rabia y el dolor pero tambi¨¦n la empat¨ªa y el placer, acompa?adas por notas escritas a mano. Un asalto al coraz¨®n de la mujer.
El monogr¨¢fico, publicado por powerHouse Books, surgi¨® como una reacci¨®n al mandato de Donald Trump. ¡°Me he sentido muy consternada por su actitud tan denigrante hacia las mujeres¡±, explica la autora a trav¨¦s de una conversaci¨®n telef¨®nica. ¡°Necesitaba publicar el libro como una declaraci¨®n en su contra, ganase o no las elecciones. Dejar claro que est¨¢bamos retrocediendo, adentr¨¢ndonos en la oscuridad. Con Trump la mayor¨ªa de las valientes mujeres que aparecen en el monogr¨¢fico no tendr¨ªan cabida¡±.
¡°Las mujeres son sagradas¡±, asegura Ferrato. ¡°Sin embargo, la mentalidad patriarcal queda ya manifiesta en el dogma cristiano de la Sagrada Trinidad. ?C¨®mo pudieron excluir a la madre de Dios?¡±. De ah¨ª que el libro haya quedado estructurado en tres cap¨ªtulos; Madre, Hija y El otro. ¡°Este ¨²ltimo representa a la enorme contribuci¨®n de aquellos hombres que no da?an a las mujeres¡±, apunta la autora. Un autorretrato abre la secuencia de im¨¢genes. La autora aparece desnuda, su rostro cubierto por un c¨ªrculo de luz. ¡°Estaba embarazada de mi hija. Llevaba dentro de m¨ª una nueva vida y me sent¨ªa m¨¢s poderosa que nunca¡±, recuerda. ¡°El libro trata de m¨ª misma, de c¨®mo me siento siendo mujer. Tambi¨¦n trata de mujeres cercanas a m¨ª, por diversos motivos, a lo largo de mi trayectoria art¨ªstica. Mujeres que me han desvelado su vida, su amor y su lucha. En 1982 retrat¨¦ a una mujer justo en el momento en que su marido la propinaba una bofetada en la cara [Elisabeth and Beng Holmgren destacada por la revista Time en 2016 como una de las 100 im¨¢genes m¨¢s influyentes de la historia]. Fue un momento terrible, pero creo que fue tambi¨¦n un momento de reconocimiento para ella; ¨¦l nunca iba a cambiar. Este libro debe funcionar como un silbato que haga despertar a las mujeres de distintas maneras¡±.
Su trayectoria comenz¨® en 1979, el d¨ªa en que no dudo en insistir al director de la revista People que la contratase. ¡°Hay cosas que yo puedo mostrar, circunstancias que nunca hasta ahora un hombre ha sido capaz de ense?ar¡±, le dijo. ¡°Entonces ya era un esp¨ªritu libre, algo que nunca he dejado de ser¡±, apostilla. M¨¢s tarde llegar¨ªa un momento crucial en su vida, en el que fue consciente de la necesidad de utilizar su c¨¢mara para dar voz a las mujeres. Ocurri¨® a mediados de los ochenta, cuando por un encargo tuvo que ir a fotografiar a Margaret Atwood, la autora de El cuento de la criada, una distop¨ªa feminista sobre una sociedad represiva y puritana donde la mujer queda despojada de todo derecho. ¡°Am¨¦rica atravesaba tiempos muy convulsos, y me di cuenta de que deb¨ªa convertirme en un soldado del ej¨¦rcito de la escritora canadiense¡±.
La primera portada dedicada a una mujer v¨ªctima de violencia de g¨¦nero y publicada en Estados Unidos la firm¨® Ferrato. Lo hizo en 1986 para The Philadelphia Inquirer. Su compromiso con la causa ha sido tan inquebrantable como expresa su apellido. Tras documentar durante diez a?os un espectro que cubre de las fases por las que atraviesan las mujeres v¨ªctimas de abuso ¡ªde su paso por la oscuridad a la luz¡ª, se involucr¨® de forma activa, recaudando dinero para las asociaciones y los refugios de mujeres. ¡°Me di cuenta del poder que ten¨ªa la fotograf¨ªa y de su utilidad para los activistas¡±, destaca la fot¨®grafa. Su libro Living with the Enemy servir¨ªa para ejercer presi¨®n en el Congreso y aprobar la Ley de Violencia contra la Mujer, cuyo autor fue el entonces senador Joe Biden.
Nunca se ha sentido limitada como mujer fot¨®grafa. ¡°Al contrario, las mujeres tenemos un don que solo tienen unos pocos hombres: somos muy buenas a la hora de penetrar muros, de entrar por la puerta principal sin que nadie nos pare y adentrarnos en la intimidad¡±, destaca. ¡°Mi fotograf¨ªa es muy compasiva, pero tambi¨¦n est¨¢ llena de rabia. Representa lo que siento. Cosas que la mayor¨ªa de las mujeres sentimos de forma continuada. A veces miedo, otras alegr¨ªa. Es una fotograf¨ªa muy femenina, fortalecida por la presencia de las mujeres en ella. Es muy directa. En cierto sentido mis im¨¢genes son un pu?etazo en la cara. Est¨¢n diciendo: ¡®no me menosprecies¡±.
El dolor y el placer se dan cita en el libro de forma muy explicita. Re¨²ne las im¨¢genes dedicadas a la denuncia de la violencia de g¨¦nero con aquellas que documentan el erotismo femenino. ¡°Mediante esta combinaci¨®n alcanzamos a ver el espectro de lo que significa ser una mujer en su totalidad¡±, escribe Kathleen Holden. ¡°Mi mayor reto como fot¨®grafa ha sido plantearme mostrar lo sagrado. Se manifiesta, de distintas formas, en estos dos temas. A la gente le gusta ver fotos de mujeres, pero cuando muestras a una mujer llegando al orgasmo esto les pone nerviosos. Quiz¨¢s se deba a que el sexo es algo que en realidad nos produce miedo a todos¡±.
¡°La documentaci¨®n es sagrada¡±, dice esta artista distinguida con el premio Robert F. Kennedy de Fotograf¨ªa Human¨ªstica as¨ª como el Premio PhotoEspa?a 2019, entre otros muchos galardones. ¡°La fotograf¨ªa es evidencia, es capaz de retener todo aquello que va a desaparecer en un instante¡±, se?ala. Como lo hace una de sus im¨¢genes m¨¢s conocidas, en la que Diamond, un ni?o de Minneapolis, chilla a su padre delante de los polic¨ªas: ¡°Te odio por pegar a mi madre. No vuelvas a esta casa¡±.
El feminismo es ¡°dinamismo¡±, para Ferrato. ¡°Un estruendo en el est¨®mago que te dice basta ya.¡± Para expresarlo se remonta a la cita de la abolicionista Sujourner Truth, quien en 1851 dijo: ¡°He o¨ªdo la Biblia y he aprendido que Eva hizo pecar al hombre. Bueno, si una mujer trastorna al mundo, dadle la oportunidad de volver a ponerlo en su sitio¡±. ¡°El feminismo siempre ha estado fracturado en distintos grupos, pero creo que ahora m¨¢s que nunca¡±, destaca. ¡°No todas las mujeres son feministas. No lo son aquellas en contra del derecho de la mujer a decidir si est¨¢ preparada para tener un hijo. Las mujeres tenemos sue?os, resoluci¨®n, voz, somos poderosas y queremos organizarnos porque merecemos respeto. No entiendo por qu¨¦ alguien se puede oponer a ello. Creo que es una cuesti¨®n de inseguridad, al fin y al cabo de perdida de control y poder¡±.
Pero la fotograf¨ªa no es suficiente por s¨ª sola para la artista. ¡°Debe ir acompa?ada de la acci¨®n. Podr¨ªa correr el riego de convertirse en algo cool, debido a sus cualidades est¨¦ticas. Creo que la escena de la fotograf¨ªa ha estado atravesando un periodo mediocre, romo, del que est¨¢ resurgiendo con ¨ªmpetu. Son muchas las im¨¢genes en las que no logr¨® averiguar cu¨¢les son los sentimientos del fot¨®grafo, qui¨¦n es ¨¦l. Im¨¢genes que realmente no me dicen nada ni del pensamiento ni del coraz¨®n del autor. Lo que cuenta es el sentimiento que est¨¢ detr¨¢s de la fotograf¨ªa¡±.
Holy. Donna Ferrato. powerHouse Books. 176 p¨¢ginas. 41,20 euros.
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