¡®Percusi¨®n¡¯: una novela del pasado para recordar el futuro
El libro del venezolano Jos¨¦ Balza anticip¨® hace 40 a?os un tiempo actual marcado por las guerras, la libertad sexual y la colisi¨®n entre la individualidad y lo ut¨®pico
El mundo narrativo de Jos¨¦ Balza puede condensarse en la conexi¨®n m¨ªtica que irrumpe en una de sus novelas: all¨ª, un ni?o se desplaza por la tierra selv¨¢tica del Orinoco y, sin aviso previo, contempla c¨®mo el pueblo de su familia se incendia. El ni?o huye aterrado: tiene 11 a?os; acaba de vislumbrar por primera vez la llegada de la luz el¨¦ctrica.
Todav¨ªa hoy, las tierras deltanas son de dif¨ªcil acceso por tierra y aire. Pese a eso, Balza (nacido en 1939) desarroll¨® una curiosidad por ese mundo externo en el que la imaginaci¨®n complementaba la plenitud que le deparaba su vinculaci¨®n con la selva y el gran r¨ªo. Radionovelas, revistas infantiles, la biblioteca de un vecino que amaba los novelones franceses; rendijas por las que asomaba otro mundo marcado por lo tecnol¨®gico y que impulsaron al futuro escritor a huir hacia Caracas con 17 a?os. All¨ª la ciudad lo recibi¨® con posibilidades que ¨¦l devor¨® con avidez: museos, conciertos, librer¨ªas, y all¨ª se acerc¨® a la escritura hasta desarrollar m¨¦todos experimentales sobre el espacio narrativo que alteraban el tiempo secuencial, a la vez que abol¨ªan la constituci¨®n del personaje rea?lista y la sustitu¨ªan por m¨²ltiples capas emotivas e intelectuales.
Desde ese momento, su obra comenz¨® a expandirse y en el a?o 1982 public¨® en Espa?a Percusi¨®n, una de las narraciones m¨¢s brillantes de la narrativa contempor¨¢nea en nuestro idioma.
Hablamos de una novela que vive a partir de ese momento una curiosa dicotom¨ªa: se convierte en texto de culto para los lectores de Am¨¦rica (llueven elogios desde Colombia, M¨¦xico, Estados Unidos, Martinica, Venezuela) y pasa inadvertida para esos lectores europeos que tal vez asociaban la narrativa del otro lado del mar con realidades exuberantes y tel¨²ricas. Percusi¨®n no cumpl¨ªa con los preceptos que gente como Larbaud enumeraba para esta parte del mundo literario: ¡°Exigimos de ellos las visiones de villas tropicales, blancas y voluptuosas ciudades de las Antillas, villas de conventos en el coraz¨®n de los Andes negros¡¡±.
Tampoco hubo buena fortuna los a?os siguientes. Una nueva edici¨®n sevillana en 2010 y otro proyecto de traducci¨®n en Francia quedaron atrapados por la desaparici¨®n de las editoriales que pretend¨ªan divulgar sus p¨¢ginas.
Situaci¨®n que ahora cambia radicalmente cuando circula de manera masiva en Espa?a una edici¨®n cr¨ªtica a cargo de Juan Carlos Chirinos: justo lugar para una novela que estremece por el poder de su inteligencia, su imaginaci¨®n y su prosa hechizante.
Percusi¨®n refiere el desplazamiento de un personaje que busca comprender la condici¨®n humana y la presencia de la belleza. Una exploraci¨®n hacia los poderes de la racionalidad que se completa en el momento en que el protagonista se encuentra con una figura inolvidable: Dorotea, mujer que encarna la hondura del mito y el misterio.
En esta pieza narrativa, las ciudades se suceden, los encuentros con los volcanes, con los abismos de la historia, aparecen como encarnaciones anecd¨®ticas de una lucha por la comprensi¨®n del amor, la traici¨®n, el poder.
Escrita a partir de la Navidad de 1978, la novela se ubica en el futuro de un a?o 2019 cuando el mundo sufre demoledoras guerras, ampliaciones de la libertad sexual, enfrentamientos entre la individualidad y los proyectos ut¨®picos. Sus palabras significan una anticipaci¨®n a muchos de los tonos de la actual literatura latinoamericana. Pero no es ese el ¨²nico estremecimiento que producen sus p¨¢ginas: Percusi¨®n habl¨® del sida antes de que este se conociese en el mundo (lo que la emparenta con otra estupenda novela reciente: Mugre rosa, de Fernanda Tr¨ªas, que predijo la covid); de all¨ª su demoledora vigencia. No solo se trata de un texto que reinterpreta los poderes cervantinos de la ficci¨®n, que realiza brillantes manipulaciones temporales puesto que sus 300 p¨¢ginas transcurren en apenas un minuto durante los cuales el personaje recuerda 40 a?os de vida, sino que su mezcla de ficci¨®n cient¨ªfica con tono fant¨¢stico reedita nociones m¨ªticas como la del tiempo circular en medio de un mundo en el que los coches vuelan por las ciudades. Por eso la perturbaci¨®n que produce sentir c¨®mo esas p¨¢ginas escritas en remotos a?os tambi¨¦n hablan de algunas noticias que leemos cada ma?ana en las redes sociales y los peri¨®dicos.
Imposible obviar que en esta novela de Balza se refiere la posibilidad de recordar el futuro. Pensemos entonces que esta obra irrumpi¨® como el recuerdo de ese ma?ana en el que parcialmente vivimos. Cuarenta a?os tard¨® el personaje protagonista de esta narraci¨®n en regresar a su ciudad; 40 a?os ha tardado Percusi¨®n en regresar con brillo al pa¨ªs en el que se editaron por primera vez sus p¨¢ginas. Parafraseando su precioso inicio: ¡°El hombre m¨¢s bello es quien llega desde el lugar m¨¢s lejano¡±, podemos decir que la novela m¨¢s bella es la que llega desde el pasado. Un pasado que es hoy, ahora, cuando muchos lectores descubrir¨¢n lo pr¨®xima que ha estado siempre esta ficci¨®n inolvidable que so?¨® desde la memoria la cotidianeidad de nuestro presente.
Percusi¨®n?
C¨¢tedra, 2022
344 p¨¢ginas. 17,50 euros
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