¡®Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans¡¯, broma hist¨®rica y verdad literaria

Lleg¨® un momento que no sab¨ªa qu¨¦ pensar. Trabajaba en la edici¨®n de la correspondencia de Camilo Jos¨¦ Cela con los escritores exiliados, y la co?a de Cela con Max Aub me liaba. De acuerdo que el pintor Jusep Torres Campalans era un personaje inventado por Aub, de acuerdo que la novela publicada en 1958 inventaba la biograf¨ªa de un artista inexistente, pero tambi¨¦n era cierto que el juego hab¨ªa traspasado la ficci¨®n cuando ...

Lleg¨® un momento que no sab¨ªa qu¨¦ pensar. Trabajaba en la edici¨®n de la correspondencia de Camilo Jos¨¦ Cela con los escritores exiliados, y la co?a de Cela con Max Aub me liaba. De acuerdo que el pintor Jusep Torres Campalans era un personaje inventado por Aub, de acuerdo que la novela publicada en 1958 inventaba la biograf¨ªa de un artista inexistente, pero tambi¨¦n era cierto que el juego hab¨ªa traspasado la ficci¨®n cuando la obra de ese tal Torres Campalans se expuso en la sala Excelsior de M¨¦xico. Pasaban los a?os, el libro ten¨ªa incluso edici¨®n francesa por recomendaci¨®n de Malraux, y Aub y Cela segu¨ªan jugando. ¡°El cuadro es una lata mandarlo¡±, escribe Aub por carta. ¡°Voy a ver si consigo traerme el cuadro de Josep Torres Campalans (q. D. h.) por v¨ªa diplom¨¢tica, como corresponde a su misterioso paso por este valle de l¨¢grimas¡±, responde Cela. Y al fin, en 1964, el collage lleg¨® a las manos del escritor gallego. Ese asalto de la ficci¨®n a la realidad, gracias al ingenio, tiene la virtud de instalar al lector en una juguetona tierra de nadie en la que la f¨¢bula ocupa el espacio de lo real para mostrar lo que la realidad parece ocultar.

El libro es una par¨¢bola que arranca con la Sevilla del ¡®underground¡¯ para desembocar en una explicaci¨®n de c¨®mo se construy¨® la hegemon¨ªa regionalista del PSOE en Andaluc¨ªa

A esa tierra media regresamos con la novela que ha escrito Javier Padilla: unas falsas memorias de un personaje del que solo se sab¨ªa por su aparici¨®n en un libro desaparecido, Los inexistentes, escrito por un amigo del protagonista que se llama exactamente igual que el personaje principal de otra novela de Aub. Para acabar de rizar el rizo, Vida y obra de Gabriel Maceli Campalans se publica en una colecci¨®n de episodios nacionales cuyo prop¨®sito es comprender la evoluci¨®n de la Espa?a democr¨¢tica desde ¨¢ngulos poco habituales. Tal vez haya un exceso de manierismo en tantos solapamientos y en muchos momentos uno no sabe si lo que se cuenta pas¨® o no pas¨®, y el riguroso aparato de notas, que incluye obras inventadas, incluso complica m¨¢s establecer cu¨¢l es el g¨¦nero del texto. Pero ?importa? Claro que no. El libro funciona porque el artificio consigue lo que pretende: este juego de espejos crea una distancia ir¨®nica que nos permite comprender mejor una par¨¢bola hist¨®rica que arranca con la Sevilla de la m¨²sica fusi¨®n y el underground ¡ªla ciudad de la cr¨®nica Esta vez venimos a golpear¡ª para desembocar en una explicaci¨®n de c¨®mo se construy¨® la hegemon¨ªa regionalista del PSOE en Andaluc¨ªa ¡ªuna evoluci¨®n paralela a la historiada por Javier Aristu en El oficio de resistir¡ª.

En el libro desaparecido, Los inexistentes, su falso autor, Luis ?lvarez Petre?a, se refiri¨® a la tragedia de Dolores Gonz¨¢lez Ruiz, la novia de Enrique Ruano y la pareja de uno de los abogados de Atocha asesinados. ¡°Un libro sobre Dolores podr¨ªa mostrar que un relato colectivo puede fundarse a partir de un suceso real. Es una pena que en Espa?a nadie vaya a escribir nunca algo parecido¡±. Lo hizo Padilla en el conmovedor A finales de enero. Aquel relato real sobre la historia m¨¢s triste de la Transici¨®n dialoga con este relato de ficci¨®n que pivota sobre uno de los vectores culturales que desaparecieron o transmutaron en aquel cambio hist¨®rico. El protagonista es testimonio de c¨®mo eclosionaron Smash o Triana y la mezcla del rock con la m¨²sica enraizada en el flamenco es el g¨¦nero h¨ªbrido que resuena a lo largo de un libro que huele a marihuana. La g¨¦nesis y disoluci¨®n de esa utop¨ªa sesentayochista, concretada en la gira para apoyar el refer¨¦ndum de 1980, es el tema del libro y evidencia c¨®mo la normalizaci¨®n pol¨ªtica fue un factor que posibilit¨® el reciclaje de esa generaci¨®n rupturista.

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