Encuentro generacional como motor creativo en el jazz
Tres discos muestran las ventajas de un di¨¢logo equilibrado entre los m¨²sicos veteranos que quieren mantenerse innovadores y las j¨®venes promesas
La distancia generacional siempre alberga una serie de cargas y tensiones en el ¨¢mbito art¨ªstico. La evoluci¨®n tiende a conllevar el romper con lo consolidado o, en todo caso, buscar cosas que quienes sentaron las bases no quisieron o no supieron encontrar. Al mismo tiempo, siempre se parte de algo que ya existe, y las influencias y los referentes son algo de lo que, normalmente, el joven creador no puede zafarse. En la m¨²sica popular, la evoluci¨®n ha pasado cada cierto tiempo por romper con tendencias anteriores, incluyendo cierto grado de desprecio por las m¨²sicas imperantes cuando quienes buscaban dar otra vuelta de tuerca estaban form¨¢ndose. El ¡°matar al padre¡± de toda la vida, vaya.
En el jazz y la m¨²sica creativa, en cambio, hay tradicionalmente una relaci¨®n bidireccional y enriquecedora entre los m¨²sicos veteranos y los j¨®venes, propiciada, entre otras cosas, por el ¨¢nimo de mantenerse creativos y en busca de nuevos horizontes de los primeros, y por la sed de acceso a la experiencia y a un aprendizaje directo de manos de los maestros vivos de los segundos.
Algunos ¨¢lbumes reci¨¦n publicados muestran esa sana confluencia de j¨®venes y veteranos en la improvisaci¨®n y el jazz, que suele producir m¨²sica emocionante cuando ambas fuerzas construyen un di¨¢logo equilibrado entre quienes llevan d¨¦cadas buscando nuevas v¨ªas de expresi¨®n musical y quienes afrontan esa b¨²squeda con menos experiencia, pero tambi¨¦n con una curiosidad efervescente y a¨²n por malear.
Esa relaci¨®n de dos fuerzas creativas enmarcadas en generaciones diferentes se refleja muy bien en el nuevo ¨¢lbum del d¨²o del contrabajista brit¨¢nico Barry Guy, de 77 a?os, con la pianista catalana Jordina Mill¨¤, de 40. Guy, una de las m¨¢s importantes figuras del free jazz y la libre improvisaci¨®n de la historia, ha encontrado en Mill¨¤ una compa?era perfecta para cultivar m¨²sica abstracta, misteriosa y desafiante, trabajando sobre la exploraci¨®n del sonido y cualquier posibilidad que brinde la relaci¨®n del int¨¦rprete con su instrumento, por subversiva que esta sea.
Mill¨¤ debut¨® en 2018 apadrinada por otro veterano ilustre, el colosal pianista Agust¨ª Fern¨¢ndez, que public¨® el sobresaliente debut de la catalana, Males herbes, en su sello Sirulita Records. Seis a?os despu¨¦s, y haciendo m¨²sica realmente minoritaria, la pianista ha logrado todo un hito discogr¨¢fico con este nuevo registro de su d¨²o con Guy: ser la segunda artista espa?ola en publicar con el legendario sello alem¨¢n ECM (el primero fue Jorge Rossy, en 2021). Live in Munich contiene un concierto grabado en 2022 en el que todo es improvisaci¨®n y exploraci¨®n ac¨²stica. La compenetraci¨®n de ambos creadores se basa en una intuici¨®n compartida, en la escucha y reacci¨®n constante entre uno y otro y en el inquebrantable anhelo, tambi¨¦n compartido, de ir m¨¢s all¨¢ en todo momento. La escucha es exigente, pero refleja de forma inspiradora la b¨²squeda de dos artistas queriendo exprimir al m¨¢ximo cada oportunidad que les cede ese salto sin red que es la improvisaci¨®n libre.
En ¡®Beyond this Place¡¯, el pianista de 81 a?os Kenny Barron ficha a uno de los m¨¢s abrumadores talentos j¨®venes del jazz norteamericano, Immanuel Wilkins
Volviendo a la ortodoxia jazz¨ªstica, y m¨¢s concretamente a uno de sus m¨¢s importantes maestros vivos, el nuevo disco de Kenny Barron es la ¨²ltima muestra de hasta qu¨¦ punto un jazzista veterano puede mantenerse no solo vigente, sino absolutamente brillante despu¨¦s de seis d¨¦cadas de carrera. As¨ª lo demuestra Beyond this Place, en el que el pianista de 81 a?os ficha a uno de los m¨¢s abrumadores talentos j¨®venes del jazz norteamericano, Immanuel Wilkins. A sus 26 a?os, el saxofonista ya tiene una carrera s¨®lida y mete¨®rica, con dos ¨¢lbumes como l¨ªder publicados por Blue Note y numerosas colaboraciones, particularmente con su compa?ero de generaci¨®n Joel Ross.
Wilkins lo tiene todo: sonido, un discurso fresco y una excelencia interpretativa que llama la atenci¨®n en el preciso instante en que empieza a tocar. Aparte del saxofonista, Barron se acompa?a tambi¨¦n por su tr¨ªo regular junto al contrabajista Kiyoshi Kitagawa y el baterista Johnathan Blake, adem¨¢s del excelente vibrafonista Steve Nelson, conformando un quinteto redondo que brilla especialmente con el encuentro entre el octogenario y el veintea?ero. Juntos producen m¨²sica enraizada en la tradici¨®n, pero absolutamente vibrante, en la que la elocuencia pian¨ªstica del l¨ªder encaja a la perfecci¨®n con las f¨¦rtiles y a¨¦reas improvisaciones del saxofonista.
En Espa?a acaba de publicarse tambi¨¦n otro magn¨ªfico ¨¢lbum que alinea varias generaciones de nuestra escena, liderado por el veterano contrabajista y compositor Baldo Mart¨ªnez. M¨²sica imaginaria surgi¨® a partir de una colaboraci¨®n de Mart¨ªnez con el Festival de Jazz de Vitoria el pasado a?o, y ahora ve la luz de mano del sello Karonte como un disco que, adem¨¢s de contener m¨²sica superlativa, es tambi¨¦n un compendio de algunos de los m¨¢s rotundos talentos de nuestro jazz. Por un lado, colaboradores habituales del l¨ªder, como la percusionista Luc¨ªa Mart¨ªnez y el saxofonista y flautista Juan Saiz. Ambos son dos de los nombres m¨¢s relevantes de la escena actual: la primera es ya due?a de una carrera intachable, y el segundo, que a¨²n no ha cumplido los 40, ya se est¨¢ perfilando como uno de los saxofonistas m¨¢s interesantes del momento en Europa.
Tanto por la clarividencia del grupo como por la apertura y belleza de su m¨²sica, podemos considerar ¡®M¨²sica Imaginaria¡¯ como uno de los grandes t¨ªtulos que ha dado el jazz ¨ªbero en los ¨²ltimos tiempos
Junto a ellos, el extraordinario trompetista Juli¨¢n S¨¢nchez y los m¨¢s j¨®venes de la formaci¨®n: el acordeonista portugu¨¦s Jo?o Barradas, de 32 a?os, y el portentoso vibrafonista y marimbista Andr¨¦s Coll, de solo 24 a?os (41 menos que el l¨ªder). Coll es originario de Ibiza, isla en la que reside el maestro alem¨¢n Joachim K¨¹hn, que en cuanto lo descubri¨® hizo correr la voz sobre su desbordante talento entre amigos y conocidos. Mart¨ªnez, viejo compadre de K¨¹hn, no dud¨® en llamar inmediatamente al joven Coll para que formase parte de un sexteto que no pod¨ªa sino producir algo realmente destacable. Con un sonido marcadamente atl¨¢ntico que va de lo nost¨¢lgico a lo fogoso, el ¨¢lbum es una renovaci¨®n del universo musical que Mart¨ªnez ha creado a lo largo de los a?os, y, tanto por la clarividencia del grupo como por la apertura y belleza de su m¨²sica, podemos considerarlo uno de los grandes t¨ªtulos que ha dado el jazz ¨ªbero en los ¨²ltimos tiempos.
Jordina Mill¨¤ y Barry Guy
ECM
Kenny Barron
Kiyoshi Kitagawa, Johnathan Blake, Steve Nelson e Immanuel Wilkins
Artwork Records
Baldo Mart¨ªnez Sexteto
Juli¨¢n S¨¢nchez, Juan Saiz, Jo?o Barradas, Andr¨¦s Coll y Luc¨ªa Mart¨ªnez
Karonte
Puedes seguir a Babelia en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.