¡®Mito y sentido¡¯, de Joseph Campbell: la alargada sombra de Plat¨®n

Aceptar la existencia de un inconsciente colectivo donde moran los arquetipos eternos no es interpretar a Plat¨®n, es Plat¨®n sin m¨¢s, pues tambi¨¦n el fil¨®sofo ateniense cre¨ªa en la existencia de un universo de arquetipos eternos que brillaba bajo las tinieblas de la psique y que hab¨ªa que desenterrar, es decir: recordar. Si uno est¨¢ dispuesto a ser tan absolutamente plat¨®nico como lo era Jung, puede acercarse a este libro de Campbell que trata de los mitos y la eternidad.

No ser¨ªa honesto olvidar que existen en ingl¨¦s dos libros con el mismo t¨ªtulo y la misma tem¨¢tica: Myth and Meaning de L¨¦vi-Strauss (Mito y significado en la edici¨®n espa?ola), publicado en Toronto en 1978, y Myth and Meaning de Joseph Campbell, que aqu¨ª comentamos. Los dos adoptan la forma de di¨¢logo y los dos tienen algo de espurio, pues el primero parte de una conversaci¨®n universitaria mantenida por el antrop¨®logo franc¨¦s con Carole Orr Jerome y que no ten¨ªa por destino convertirse en libro, y el texto de Campbell, perge?ado a partir de las respuestas grabadas a preguntas que le hicieron a Campbell a lo largo de su vida, tampoco ten¨ªa por destino convertirse en materia impresa.

Probablemente, el libro de Campbell fue concebido por la fundaci¨®n que lleva su nombre para rebatir y a la vez sepultar el texto de L¨¦vi-Strauss. No en vano, en la contraportada del libro de Campbell figura una cita de James Hillman, que fue sumo pont¨ªfice de la escuela arquetipal junguiana, y en la que dice que ni Freud, ni Mann, ni L¨¦vi-Strauss han actualizado como Campbell el sentido m¨ªtico del mundo y sus eternas figuras. Hay que advertir que Hillman era un plat¨®nico que proclamaba la doctrina de los arquetipos, en la que hay que creer para abordar con placer a Campbell. L¨¦vi-Strauss fue un racionalista y Campbell no, pues cre¨ªa que ¡°los mitos vienen de donde vienen las energ¨ªas¡± y tuvo ¡°la fortuna de encontrar el dorado mundo de los mitos¡±, vinculado, seg¨²n Jung y ¨¦l, al universo de los arquetipos eternos.

Obviamente, los verdaderos maestros de Campbell son Plat¨®n, al que nunca cita, y Jung y Spengler, ambos plat¨®nicos y, desgraciadamente, ambos vinculados al nazismo. Campbell dice que ¡°el Dios de Occidente no es dios¡± y que los orientales est¨¢n m¨¢s cerca de la divinidad porque la absorben desde el misterio y la inefabilidad. Tambi¨¦n dice que ¡°el mito es un lenguaje universal que adopta sus propias formas locales¡±. Toda una contradicci¨®n que tambi¨¦n atorment¨® a L¨¦vi-Strauss, si bien el franc¨¦s atribu¨ªa la universalidad, m¨¢s que a los mitos, a los ¡°mitemas¡±, unidades narrativas b¨¢sicas de las que estar¨ªan compuestos todos los mitos.

Pensaba Baltasar Graci¨¢n que hay en la vida un tiempo para hablar con los dem¨¢s, y otro para hablar con nosotros mismos. A parecida conclusi¨®n llega Campbell al final del texto, cuando menta el camino interior y sugiere que la muerte no ata?e a la consciencia y que solo destruye el cuerpo. Tambi¨¦n Plat¨®n cre¨ªa que tras la muerte el alma piensa y existe, como toda la Tradici¨®n, tanto la oculta como la manifiesta, en la que gravita el humanismo m¨¢gico de todas las obras de Campbell y de esta en particular.

Mito y sentido

Joseph Campbell
Traducci¨®n de Sebasti¨¢n Burch
Ediciones Atalanta, 2024
376 p¨¢ginas. 29 euros