Sexo, web y cintas de v¨ªdeo
La lucha entre dos sectores de IU de Madrid se reaviva con la imputaci¨®n de Miguel Reneses por presunto acoso a una compa?era y por una denuncia contra la diputada Libertad Mart¨ªnez por suplantar a Cayo Lara
La soterrada lucha por el poder en Izquierda Unida (IU) de la Comunidad de Madrid se ha reavivado a tenor de dos recientes resoluciones judiciales. La primera, la imputaci¨®n por acoso sexual del n¨²mero tres federal y diputado madrile?o, Miguel Reneses. La segunda, la investigaci¨®n judicial sobre el supuesto pirateo inform¨¢tico de la p¨¢gina web de IU antes de las elecciones auton¨®micas de mayo, un delito en el que presuntamente habr¨ªa participado la diputada madrile?a de la formaci¨®n Libertad Mart¨ªnez, que niega tener relaci¨®n con el caso.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) decidi¨® la semana pasada imputar un presunto delito de acoso sexual a Reneses. Su v¨ªctima habr¨ªa sido una excompa?era de partido en Fuenlabrada (Madrid), que lo denunci¨® en 2009. Tras su imputaci¨®n, Reneses renunci¨® a la Secretar¨ªa de Organizaci¨®n federal, pero mantiene su acta de diputado, pese a que el coordinador regional, Gregorio Gordo, insinu¨® la conveniencia de su abandono. Los detractores de Reneses en IU sostienen que el coordinador federal, Cayo Lara, realmente no le ha desplazado de su puesto, pues sigue acudiendo a su despacho "todos los d¨ªas, como si no pasara nada".
La imputaci¨®n de Reneses, seg¨²n el magistrado instructor del tribunal madrile?o, se fundamenta en evidencias de peso, que seg¨²n sus oponentes podr¨ªan proceder de un v¨ªdeo en el que se observa un presunto acoso a la denunciante. Otros sectores de IU alegan que este caso "es algo viejo", y aseguran que la acusaci¨®n se enmarca dentro de una lucha por el poder interno en la formaci¨®n.
La reacci¨®n de la facci¨®n af¨ªn a Reneses al auto del juez ha sido, seg¨²n sectores independientes, encender el ventilador para poner en mal lugar a sus oponentes. Es as¨ª como ha trascendido que el mismo tribunal ha iniciado los tr¨¢mites para llamar a declarar como imputada a Libertad Mart¨ªnez. Esta diputada regional ha sido se?alada como la principal rival interna de Reneses e identificada con la corriente encabezada por el portavoz municipal en Madrid, ?ngel P¨¦rez. ?El motivo por el que est¨¢ siendo investigada? Por piratear la p¨¢gina web de IU y escribir en la misma que Reneses hab¨ªa sido denunciado por acoso sexual. Pero tambi¨¦n por suplantar la identidad del coordinador federal, Cayo Lara.
Seg¨²n la denuncia de IU, que se basa en una informaci¨®n policial, Libertad Mart¨ªnez, haci¨¦ndose pasar por Lara, lleg¨® a anunciar la expulsi¨®n de Reneses. Su citaci¨®n podr¨ªa ser inminente porque la Mesa de la Asamblea ya ha certificado al TSJM que es parlamentaria, un formalismo necesario para iniciar la instrucci¨®n del caso.
Un cargo p¨²blico de IU que solicita el anonimato explica que la guerra entre Reneses y ?ngel P¨¦rez, "aut¨¦ntico factotum de IU en Madrid", se inici¨® poco despu¨¦s de que el segundo diera un paso atr¨¢s y eligiera en 2000 a Reneses para sustituirle como coordinador regional. "Se crey¨® que mandaba en IU y se enfrent¨® a P¨¦rez". Fue entonces, seg¨²n esta opini¨®n, cuando P¨¦rez acu?¨® el dicho: "Reneses tres meses". Este era el periodo de tiempo que iba a aguantar como coordinador general. Al final permaneci¨® dos a?os. Y despu¨¦s se situ¨® en la corriente contraria a ?ngel P¨¦rez.
La llegada de Cayo Lara a la direcci¨®n federal coincidi¨® con un nuevo ascenso de Reneses, que provoc¨® la indignaci¨®n de sus detractores. Pas¨® a ser el n¨²mero tres del partido a nivel federal. "Nos lo vendieron como que le daban una patada para arriba. No nos gust¨®, pero de esta forma nos libr¨¢bamos de ¨¦l", explica uno de sus oponentes.
Pero que el sector enfrentado a Reneses haya podido utilizar el acoso sexual para intentar acabar pol¨ªticamente con ¨¦l no significa, apuntan fuentes independientes, que no se haya ganado "a pulso" su mala fama. De hecho, sus detractores sostienen que Reneses no lleva una vida precisamente ejemplar. Y recuerdan su p¨¦sima actuaci¨®n durante sus comparecencias como portavoz de IU en la Asamblea durante el tamayazo (que dio la presidencia regional a Esperanza Aguirre en 2003). Y, sobre todo, relatan el esc¨¢ndalo en el que se vio envuelto en 2004 al pagar con dinero p¨²blico un viaje privado con una mujer a Par¨ªs.
En los ¨²ltimos d¨ªas, nuevas filtraciones en el seno de IU han puesto de manifiesto que el partido en Madrid mantiene una deuda de m¨¢s de dos millones de euros con Hacienda y la Seguridad Social. Pero, sobre todo, que 212.000 de los 500.000 euros del presupuesto electoral de la pasada campa?a auton¨®mica no han podido ser justificados ante la C¨¢mara de Cuentas.
Adem¨¢s, las sospechas de nepotismo se ciernen sobre la diputada Libertad Mart¨ªnez, a quien se le acusa de adjudicar a su marido por 500.000 euros la organizaci¨®n de la campa?a electoral en Madrid. En el entorno de esta parlamentaria la defienden, indican que carec¨ªa de capacidad de decidir qui¨¦n deb¨ªa organizar la campa?a, y a?aden que Juan Berga, su esposo, siempre ha ayudado a la formaci¨®n, "unas veces cobrando y otras, no".
El supuesto agujero econ¨®mico se hace p¨²blico as¨ª en un contexto pol¨ªtico de fricci¨®n entre IU federal, con Reneses de n¨²mero tres, y el partido en Madrid. De hecho, fuentes de IU federal aseguran que la federaci¨®n madrile?a no ha puesto en com¨²n su presupuesto electoral. Y que, de hecho, IU de Madrid fue la ¨²nica federaci¨®n que en los pasados comicios no present¨® las cuentas a Cayo Lara, algo que seg¨²n un antiguo miembro del federal equivale a actuar como un partido diferente.
Ma?ana la batalla en IU se agudizar¨¢ previsiblemente todav¨ªa m¨¢s. La Ejecutiva madrile?a abordar¨¢ la dimisi¨®n de Reneses como diputado, tal y como adelant¨® Gregorio Gordo. Pero el entorno de Reneses ha dejado claro cu¨¢l ser¨¢ su decisi¨®n. Y para explicarla parafrasean una opini¨®n de la mujer del propio Reneses, Teresa Fern¨¢ndez, vicealcaldesa de Fuenlabrada: "Si mi marido dimite, lo har¨¢ por encima de mi cad¨¢ver".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.