'Monarqu¨ªa o rep¨²blica': mucho ruido y pocas nueces
La emisi¨®n del documental sobre el modelo de Estado en TV-3 no cumple las expectativas El programa apenas rasca el 10% de audiencia
Por fin. El mi¨¦rcoles por la noche se pudo ver Monarqu¨ªa o rep¨²blica, un reportaje sobre el modelo de Estado que hac¨ªa m¨¢s de dos a?os que estaba en un caj¨®n de TV-3. En una reciente comisi¨®n parlamentaria de control a la Corporaci¨®n Catalana de Medios de Comunicaci¨®n (CCMA), el diputado del PP Santi Rodr¨ªguez rog¨® que no se emitiera tal documental. ?Por qu¨¦ ese recordatorio dos a?os despu¨¦s? Pues porque sab¨ªa que se iba a programar pronto, seg¨²n fuentes parlamentarias. Y as¨ª fue. Pero TV-3 parece no sentirse orgullosa del producto. De hecho, la directora de TV-3, M¨°nica Terribas, impidi¨® su emisi¨®n al menos en dos ocasiones porque entend¨ªa que deb¨ªa tener un enfoque distinto. Hasta el comit¨¦ profesional de la emisora p¨²blica sugiri¨® hacer modificaciones. Incluso Enric Mar¨ªn, presidente de la CCMA, tuvo que defender la ¡°calidad¡± de Monarqu¨ªa o rep¨²blica.
Este reportaje ha sufrido diversas vicisitudes, sobre todo de tipo interno. Da la sensaci¨®n de que el dichoso documental se emiti¨® porque molestaba. Para empezar, la televisi¨®n catalana lo program¨® tras la retransmisi¨®n de un partido de f¨²tbol de cuestionable inter¨¦s general (AC Milan-Arsenal) y a una hora m¨¢s propia del?late night que del prime time: las 23.15 horas.
El reportaje, dirigido por la reconocida periodista Montserrat Armengou junto con Ricard Belis, se basa en una retah¨ªla de testimonios que defienden la Monarqu¨ªa espa?ola o bien la conveniencia de la instauraci¨®n de una rep¨²blica. El resultado es un montaje tradicional, salpicado de algunas animaciones, en el que participan Sabino Fern¨¢ndez Campo, que fue secretario y jefe de la Casa Real; Gregorio Peces Barba, uno de los padres de la Constituci¨®n, y el periodista Luis Mar¨ªa Anson, a favor de la corona, y los pol¨ªticos Joan Tard¨¤ e I?aki Anasagasti en la fracci¨®n contraria, as¨ª como el fil¨®sofo Josep Maria Terricabras y el actor Toni Alb¨¤. Nada que no se supiera. Los argumentos de unos y otros se solapaban. No existi¨® una dial¨¦ctica.
El documental no trata del futuro de la instituci¨®n ni del presente: no se hace menci¨®n de los supuestos fraudes cometidos por el duque de Palma, I?aki Urdangarin. En ciertos momentos parece un debate sabatino sobre la figura del Rey, una vuelta de tuerca sobre la bondad del juancarlismo. Es un documental sin mordiente, teniendo en cuenta la reciente aproximaci¨®n a la monarqu¨ªa que ha hecho Jordi ?vole en Salvados (La Sexta).
Sobre el supuesto inter¨¦s o la supuesta pol¨¦mica de este Monarqu¨ªa o rep¨²blica hay que decir que ha habido mucho ruido, pero pocas nueces. Interes¨® m¨¢s a los medios de comunicaci¨®n que a la audiencia. Los n¨²meros cantan: Monarqu¨ªa o rep¨²blica fue seguido por 209.000 espectadores, lo que supuso una cuota de pantalla del 9,9%. Es decir, qued¨® lejos de las mejores marcas de esta misma temporada del programa Sense ficci¨®, paraguas bajo el que se emiti¨® el documental. Adem¨¢s la comparaci¨®n es casi dolorosa: qued¨® detr¨¢s de la serie de Antena3 Con el culo al aire ¨Cl¨ªder con 335.000 espectadores¨C y el concurso de Telecinco T¨² s¨ª que vales? ¨Cque fue seguido por 297.000 catalanes¨C. En las redes sociales hubo un murmullo general, pero en ning¨²n caso levant¨® pasiones. De hecho, en Twitter el trending topic fue Pilar de Borb¨®n con su defensa de Urdangarin: ¡°Nadie es culpable hasta que los jueces lo digan; mientras, a callar". La hermana de don Juan Carlos, por lo menos, s¨ª habl¨® del duque de Palma. Y es que la actualidad tiene inter¨¦s.
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