La alianza con Batasuna dinamita a Aralar en Gipuzkoa
Afiliados y cargos p¨²blicos se plantean crear un sector cr¨ªtico o dejar el partido
¡°El ¨²ltimo giro pol¨ªtico y estrat¨¦gico, adoptado por razones meramente electoralistas, significa el fin del proyecto pol¨ªtico de izquierda abertzale zibil eta zabal [civil y amplia] defendido durante los ¨²ltimos 10 a?os por Aralar¡±. Esta reflexi¨®n proviene de una parte de la militancia y cargos p¨²blicos de Aralar, agrupados como Aizkorri Taldea, que alertan de una divisi¨®n total en el seno del partido en Gipuzkoa, uno de los territorios donde es m¨¢s fuerte.
Sus integrantes aseguran que la formaci¨®n se encuentra rota en dos facciones enfrentadas desde que la direcci¨®n decidi¨® renunciar a su identidad pol¨ªtica y apost¨® por la unidad de acci¨®n con la antigua Batasuna hasta concurrir como Amaiur en las pasadas elecciones generales. Este grupo culpa a la actual direcci¨®n territorial de emprender una labor de ¡°depuraci¨®n¡± interna para apartar a los militantes cr¨ªticos, lo que ha generado un ¡°fuerte malestar¡± interno y la baja de algunos afiliados.
Aralar se ha fracturado en Gipuzkoa. Por un lado, est¨¢n los actuales responsables de la ejecutiva provincial, encabezados por su nuevo coordinador, Ernesto Merino, y la juntera Rebeka Ubera, secretaria de Organizaci¨®n del partido. Enfrente se sit¨²a el sector cr¨ªtico, que en la ¨²ltima asamblea provincial, celebrada en octubre pasado, obtuvo un respaldo del 49% de la militancia y sali¨® derrotado por apenas dos votos.
¡°El goteo de bajas no ha parado y es constante¡±, aseguran los cr¨ªticos
En un documento titulado Situaci¨®n interna de Aralar Gipuzkoa, suscrito por Aizkorri Taldea, este grupo sit¨²a el inicio de los enfrentamientos en el congreso de Pamplona en 2009, cuando Patxi Zabaleta fue reelegido coordinador general con el menor respaldo de la historia de la formaci¨®n (un 64%) y Ubera accedi¨® a la Secretar¨ªa de Organizaci¨®n. Desde ese momento, consideran que Ubera ejerci¨® ¡°un verdadero contrapoder que coart¨®, ningune¨® e ignor¨®¡± a la ejecutiva provincial, dirigida de 2009 a 2011 por Oxel Erostarbe, alcalde de Elgeta y parlamentario vasco.
El documento incide en las dificultades que encontr¨® Erostarbe para ejercer su mando frente a la oposici¨®n del sector apoyado por la direcci¨®n nacional. ¡°Entre 2009 y 2011, la ejecutiva nacional ha echado atr¨¢s la mayor¨ªa de las decisiones de Gipuzkoa¡±, reza el texto. En el documento acusan al sector oficialista de ¡°debilitar¡± la estructura organizativa en esta provincia y despedir a varios trabajadores. Entre otras maniobras, citan el nombramiento de cinco liberados en las Juntas Generales o el ofrecimiento a la exedil donostiarra Ainhoa Beola para asumir la direcci¨®n foral de Igualdad en las fracasadas negociaciones poselectorales con Bildu para entrar en la Diputaci¨®n.
El poder de Aralar
- En las elecciones municipales de 2011, Aralar logr¨® el 4,05% de los votos en el conjunto del Pa¨ªs Vasco y un total de 34 concejales, de ellos 24 en Gipuzkoa y el resto, en Bizkaia. La formaci¨®n solo cuenta con un alcalde en toda la comunidad aut¨®noma: Oxel Erostarbe, en Elgeta.
- Aralar consigui¨® un ¨²nico representante en las Juntas Generales de Gipuzkoa en mayo pasado: Rebeka Ubera. En los Parlamentos provinciales de Bizkaia y ?lava no cuenta con ninguna representaci¨®n.
- En las elecciones auton¨®micas de 2008, Aralar obtuvo cuatro esca?os en el Parlamento vasco: dos por Gipuzkoa y uno por cada uno de los otros dos territorios.
- En el Parlamento navarro, Nafarroa Bai se hizo en en las ¨²ltimas auton¨®micas con ocho esca?os.
En este contexto, Erostarbe decidi¨® renunciar a la reelecci¨®n. Desde la asamblea de octubre pasado, su cargo lo ocupa Merino, quien se impuso por 45 votos frente a los 43 del concejal de Zarautz Andoni Ibarguren, pese a que este hab¨ªa presentado m¨¢s avales de afiliados. Los cr¨ªticos aseguran que Ibarguren contaba con el respaldo de Erostarbe y de la portavoz parlamentaria, Aintzane Ezenarro, adem¨¢s de la mayor¨ªa de los cargos p¨²blicos.
Despose¨ªdos del control en Gipuzkoa, censuran que una de las primeras decisiones de Merino consisti¨® en ¡°despedir¡± a quien era secretario de Organizaci¨®n, I?igo Imaz, para sustituirle por Beola. Aizkorri Taldea considera que desde la elecci¨®n de Merino se han producido bajas que habr¨ªan dejado a la formaci¨®n con menos de 200 afiliados en Gipuzkoa: ¡°El goteo de bajas no ha parado y es constante¡±.
El sector oficial replica que no existe tal fractura, aunque admite la existencia de opiniones contrarias a la estrategia adoptada por el partido.
Esta situaci¨®n en Gipuzkoa refleja el ¡°mal ambiente¡±, en palabras de los cr¨ªticos, que se respira en el conjunto del partido. Ello motiv¨® que el n¨²mero dos hasta el ¨²ltimo congreso, Jon Abril, rechazara cualquier cargo org¨¢nico en el c¨®nclave nacional celebrado en septiembre de 2011 en Derio.
Aizkorri Taldea recalca que es ¡°p¨²blico y notorio¡± que Erostarbe y Ezenarro discrepan de la decisi¨®n de incorporarse a Amaiur. Ambos fueron ¡°ausencias llamativas¡± en la campa?a del 20-N, lo que motiv¨® que algunas voces pidieran ¡°abrirles expedientes disciplinarios¡±. Un ejemplo de la mala convivencia, a?aden los cr¨ªticos, es que la portavoz parlamentaria no ha acudido a ninguna reuni¨®n de la ejecutiva nacional, de la que es miembro nato, en estos cinco meses.
Concluyen que Aralar ha renunciado a su cultura pol¨ªtica al aliarse con Batasuna, lo que se ha traducido en una rebaja de sus ¡°exigencias ¨¦ticas y pol¨ªticas¡±.
¡°Vinimos solos. Nos iremos juntos¡±
En su d¨¦cada de existencia, Aralar ya ha sufrido una escisi¨®n cuando en noviembre de 2010 un grupo de militantes de ?lava que controlaban los principales cargos en esa provincia abandonaron el partido. Se constituyeron como Araba Bai tras escindirse de Aralar por desavenencias ¨¦ticas y pol¨ªticas con la direcci¨®n nacional y desacuerdos con la l¨ªnea ideol¨®gica del partido. Dec¨ªan representar al 40% de la militancia alavesa de Aralar y contar con concejal¨ªas en Asparrena y Artziniega, las ¨²nicas que logr¨® en 2007 la formaci¨®n en ese territorio. Los integrantes de Araba Bai rechazaron concurrir con Aralar a las elecciones municipales de mayo de 2011 y pasaron a reforzar las listas de Bildu en diferentes localidades.
En el caso de Gipuzkoa, los militantes y cargos p¨²blicos cr¨ªticos no ven probable constituirse en partido como Araba Bai, ni integrarse en plataformas del estilo de Geroa Bai en Navarra. Este sector entiende que "socialmente no ser¨ªa bien recibido" agrandar la fragmentaci¨®n en el ¨¢mbito nacionalista, porque la ciudadan¨ªa "apuesta ahora por la unidad de acci¨®n de los abertzales", sobre todo desde que "Batasuna da pasos hacia la no violencia".
Tras las reuniones mantenidas, los cr¨ªticos no han determinado a¨²n cu¨¢l ser¨¢ su futuro, si estar¨¢n dentro o fuera de Aralar. ¡°Sin haber decidido ser corriente [interna] o abandonar Aralar, lo que s¨ª tenemos es vocaci¨®n de grupo¡±, aseguran. En todo caso, aclaran: ¡°Nos afiliamos solos en su momento, pero nos iremos juntos¡±, puesto que su voluntad es no dejar en la estacada a los concejales de Aralar en Gipuzkoa.
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