La novela de Steinbeck 'De ratones y hombres' cobra vida en Bilbao
El Teatro Arriaga estrena una adaptaci¨®n teatral de la novela de 1937 Los actores Fernando Cayo y Roberto ?lamo encarnan a los protagonistas, George y Lennie Dirigida por Miguel Del Arco, la obra ofrece cuatro funciones en Bilbao
Cuando John Steinbeck public¨® la novela De Ratones y hombres en 1937 no pod¨ªa imaginar que, casi un siglo despu¨¦s, la tem¨¢tica seguir¨ªa tan vigente. En la tragedia moderna que escribi¨®, protagonizada por George y Lennie y con la Gran Depresi¨®n como tel¨®n de fondo, los destinos de dos seres marginados y errantes se topan con la inestabilidad de los mercados, las elevad¨ªsimas tasas de paro, los despidos, los desahucios, la precariedad¡ En definitiva, la misma desesperanza que hoy en d¨ªa parece presidir la actualidad.
En la presentaci¨®n de la obra, que ha tenido lugar esta ma?ana en el Teatro Arriaga de Bilbao con todo el equipo art¨ªstico presente, su director Miguel del Arco ha querido destacar ese paralelismo: ¡°Am¨¦rica a¨²n sufr¨ªa los estragos del Crack del 29, y pese a que en el momento en que se public¨® la novela se empezaba a hablar de brotes verdes, ninguna de las pol¨ªticas de recortar a destajo funcion¨® y solo les salv¨® la Gran Guerra. Esperemos que ahora no sea as¨ª, porque a¨²n no nos hemos librado de muchas de las lacras en las que se mueven los personajes de De ratones y hombres¡±.
M¨¢s all¨¢ de los mensajes apocal¨ªpticos, tan presentes hoy en los medios de comunicaci¨®n, Del Arco se queda con el coraje y la dignidad que desprende la novela de Steinbeck, y sobre todo con el amor y la compasi¨®n que se teje en torno a la relaci¨®n entre los dos protagonistas: George, un p¨ªcaro errante interpretado por Fernando Cayo, y Lennie, un deficiente mental tan bruto como tierno que encarna Roberto ?lamo. Dos seres marginados que se enfrentan al mundo de los poderosos en un ambiente hostil en el que permanentemente deben disimular la amistad que les une.
Ma?ana es el estreno absoluto de la obra en el Teatro Arriaga de Bilbao, que acoger¨¢ cuatro funciones hasta el domingo 11 de marzo. Emilio Sage, director art¨ªstico del teatro, quiso destacar que son los primeros en acoger esta obra y adem¨¢s, han participado en su coproducci¨®n junto a Concha Busto Producci¨®n y Distribuci¨®n, el Teatro Calder¨®n de Valladolid, Clece S.A. y Kamikaze Producciones S.L.
Steinbeck: "Yo escribo para que los hombres se entiendan unos a otros"
Entre el plantel de actores que participan en la obra destacan los dos protagonistas, Fernando Cayo y Roberto ?lamo, ambos con un extenso curr¨ªculum en el teatro, la televisi¨®n y el cine a sus espaldas. Para el primero, esta es su tercera coproducci¨®n con el Teatro Arriaga y en la presentaci¨®n se ha deshecho en elogios para el resto del equipo, al que se ha referido como ¡°un dreamteam que representa una tipolog¨ªa ampl¨ªsima de la humanidad, precisamente lo que exige esta obra¡±. Cayo considera que De ratones y de hombres supone ¡°un grito de libertad y humanidad en un mundo lleno de codicia. El desgarro, la crueldad y la tristeza est¨¢n presentes, pero contrastan con una inmensa vitalidad y sentido del humor¡±.
Para la joven Irene Escolar, que interpreta a la esposa de Curley que ni siquiera merece un nombre, el papel es una oportunidad ¨²nica. "Al no nombrar a este personaje", explica Escolar, "Steinbeck quer¨ªa universalizar el hecho de que las mujeres somos las esclavas del esclavo, como en la canci¨®n de John Lennon. Mi personaje es un mero objeto sexual ignorado, est¨¢ desgarrado por la soledad y la depresi¨®n, como todos los de la novela pero m¨¢s a¨²n por el hecho de ser mujer".
Miguel del Arco: "A¨²n no nos hemos librado de muchas de las lacras en las que se mueven los personajes"
Al contrario que en la novela Las uvas de la ira, aqu¨ª la trama se acota mucho a la relaci¨®n entre los dos personajes protagonistas. El hilo argumental transcurre en gran parte en las enormes granjas de producci¨®n agr¨ªcola de los a?os treinta y para mostrar ese ambiente la escenograf¨ªa ha sido complicada. Miguel del Arco ha explicado que en la puesta en escena hay pocos elementos pero muy pesados, dado que se quer¨ªa reflejar la realidad de las jornadas tit¨¢nicas de trabajo en que el ser humano se alienaba hasta la categor¨ªa de bestia de carga.
John Steinbeck dijo una vez: "Yo escribo para que los hombres se entiendan unos a otros, porque conocer mejor a un hombre casi siempre lleva al amor y no al odio". Para Miguel del Arco, esa es la esencia de la obra: "Parece apostar por la desesperaci¨®n y el final es atroz, pero al mismo tiempo hay algo fabulosamente iluminado dentro de la humanidad de los personajes y las emociones que transmite la puesta en escena parten de lo negativo pero acaban siendo esperanzadoras".
Jonh Steinbeck o la voz de los desheredados
Este a?o se cumple el 110? aniversario del nacimiento de John Steinbeck (1902-1968), prol¨ªfico escritor californiano que destac¨® por su cr¨ªtica al capitalismo, lo que le granje¨® no pocos enemigos entre los sectores m¨¢s conservadores de la sociedad. En muchas de sus novelas plasm¨® el mundo de los seres marginales que vagabundeaban por la Am¨¦rica rural desolada en los a?os de la Gran Depresi¨®n.
Steinbeck fue cronista para The San Francisco News y sus reportajes fueron el tel¨®n de fondo de gran parte de su obra. Entre sus novelas destacan Las uvas de la ira y Al Este del Ed¨¦n, que le valieron el Premio Pulitzer en 1940 y el Nobel de Literatura en 1962. Ambas obras fueron adaptadas al cine bajo la direcci¨®n de nombres de prestigio como John Ford (Las uvas de la ira) o Elia Kazan (Al Este del Ed¨¦n).
De ratones y de hombres, publicada en 1937, fue adaptada al teatro por el autor estren¨¢ndose en el Music Box Theatre de Nueva York en 1939. Basada en sus propias experiencias como vagabundo en los a?os veinte, fue llevada al cine en 1939 por Lewis Milestone bajo el nombre La Fuerza Bruta y posteriormente por Gary Sinise en 1992. Esta ¨²ltima adaptaci¨®n, protagonizada por John Malkovich en el papel de Lennie, fue la m¨¢s exitosa y aclamada por la cr¨ªtica.
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