Una mujer ¡®explosiva¡¯

A Reyes Mart¨ª Mir¨®, una de las pocas mujeres pirot¨¦cnicas que hay en Espa?a, no le importaban ayer ni las protestas ni los saludos oficiales. Lo que m¨¢s la aturd¨ªa eran los nervios. Una sensaci¨®n que no se quitaba de encima ni siquiera despu¨¦s de las siete horas de preparaci¨®n para montar una masclet¨¤,la octava de las Fallas, que promet¨ªa ser ¡°cl¨¢sica, pero con una sorpresa final¡±. Una explosi¨®n que coincid¨ªa con el D¨ªa de la Mujer, todo un ¡°honor¡± que recib¨ªa con ¡°orgullo¡± momentos antes de prender la llama que har¨ªa vibrar toda la plaza del Ayuntamiento de Valencia.

A esta artificiera de la localidad de Burriana, en Castell¨®n, no le importa desvelar su edad: 47 a?os. Es m¨¢s, la suelta con salero e insiste en que ¡°a otras no les gusta decirla¡±. Su discurso, no obstante, sonaba con una mezcla de alegr¨ªa e intranquilidad que era incapaz de ocultar: ¡°Estoy muy nerviosa¡±, repet¨ªa.

Reyes Mart¨ª opt¨® por este oficio, copado por hombres, despu¨¦s de que hasta cinco generaciones de su familia se dedicaran a ¨¦l. Y lo ha hecho no solo su forma de vida, sino la pasi¨®n que comparte con su hijo Carlos y su marido Bernardo. ¡°Reconozco que es una profesi¨®n muy dura y muy sacrificada, y te tiene que gustar¡±, explicaba. ¡°Adem¨¢s, cada fin de semana te toca ir a cualquier sitio¡±, apuntaba la artificiera. La pr¨®xima cita, sin ir m¨¢s lejos, la tiene en Alicante. Pero no siempre le pilla tan cerca de casa: ¡°Vamos por toda Espa?a¡±, concretaba apresurada.

Dedica la 'masclet¨¤' de hoy a su padre, Pascual Mart¨ª, de 86 a?os

Esta mujer ¡ªa cargo de la pirotecnia Mart¨ª, una empresa que naci¨® en torno a 1868¡ª se curti¨® gracias a la transmisi¨®n de conocimientos de su padre y su abuelo, pero asegura que ¡°tambi¨¦n aprende uno mismo¡±. Su hijo, por ejemplo, utiliza las nuevas tecnolog¨ªas ¡°que ya ni te enteras¡±.

El pudor previo a la ocasi¨®n se canalizaba a mediod¨ªa gracias a la fecha especial del 8 de marzo, D¨ªa de la Mujer: ¡°Quiero que sea un homenaje a todas las mujeres, desde las que nacen hasta las que yacen¡±, expresaba animada, ¡°y me gustar¨ªa traspasar mucha voluntad y mucha decisi¨®n¡±. Las mismas que hab¨ªa invertido en una masclet¨¤ que quer¨ªa dedicar a su padre, Pascual Mart¨ª: ¡°Tiene 86 a?os y lo va a ver en su silla¡±, expresaba emocionada, ¡°pero est¨¢ muy bien¡±, aclaraba.

Despu¨¦s de unos minutos atronadores en los que la prometida sorpresa final ¡ª¡°una traca m¨¢s larga que de costumbre¡±¡ª hac¨ªa preguntarse a la gente cu¨¢ndo iba a terminar, Reyes Mart¨ª brincaba y repart¨ªa besos desde el balc¨®n municipal. A su lado, las falleras mayores y la alcaldesa Rita Barber¨¢ acompa?aban su ilusi¨®n. Un sentimiento que, posiblemente, lograra acallar por momentos lo que hab¨ªa asegurado un rato antes: ¡°Lo ¨²nico que no cambia son los nervios, eso no se va nunca¡±.