Kempes se inspiraba en Fallas

Fundado el 18 de marzo de 1919 ¡ªayer cumpl¨ªa 93 a?os¡ª, el Valencia es un club ¡°volc¨¢nico, optimista, fanfarr¨®n y pirot¨¦cnico¡±, acorde a la fecha de su nacimiento, seg¨²n lo define el aficionado Rafa Lahuerta, citado por el soci¨®logo V¨ªctor Agull¨® en su ensayo sobre el deporte en la fiesta de las Fallas. Agull¨®, en su trabajo La pr¨¢ctica deportiva y las Fallas: pelota, f¨²tbol y pedestrismo, se pertrecha de una amplia bibliograf¨ªa para bucear en los or¨ªgenes y en la evoluci¨®n del deporte en el cap i casal durante las fiestas falleras.

El f¨²tbol, por ejemplo, lleg¨® a la ciudad de Valencia a finales del siglo XIX por distintas v¨ªas, siguiendo las pesquisas del historiador Miquel Nadal: los marineros ingleses que descargaban el carb¨®n en el puerto, los estudiantes de la aristocracia valenciana residentes en Londres, los ingenieros ingleses en la construcci¨®n de la l¨ªnea de ferrocarril entre Valencia y Madrid, y, por ¨²ltimo, a trav¨¦s de la colonia inglesa en Valencia dedicada a la exportaci¨®n de naranja. La revista Pensat i Fet habla, en 1923, de un gran partido de ¡°football¡± en el programa fallero.

Ese a?o, de 41 monumentos falleros plantados en Valencia, 12 son dedicados al balompi¨¦. Es el triunfo progresivo del f¨²tbol, representante de la modernidad y la cultura urbana, frente a los toros, s¨ªmbolo de la tradici¨®n y el mundo rural. El Valencia CF inaugur¨® la iluminaci¨®n de su estadio el 16 de marzo de 1959 en un duelo contra el Stade de Reims franc¨¦s del delantero Just Fontaine, m¨¢ximo goleador en un solo Mundial con 13 tantos en el de Suecia 58.

Hay partidos legendarios en Mestalla, recuerda Lahuerta, como el 2-0 al Madrid de Liga el 19 de marzo de 1978, en una actuaci¨®n estelar de dos zurdos argentinos muy queridos por el valencianismo, un ?scar Rub¨¦n Valdez ya en la fase final de su carrera y, sobre todo, un Mario Kempes en plenitud. O, dos a?os despu¨¦s, un m¨ªtico 4-3 al Bar?a en los cuartos de final de la Recopa que acabar¨ªa ganando el conjunto valencianista en otra exhibici¨®n memorable del Matador.

En 1941, el 25% de los monumentos falleros se dedicaron al f¨²tbol

Las fallas de los barrios marineros siempre se aliaron con el Levante UD, cuya actividad fallera se ha incrementado notablemente desde 2009, organizando concursos para premiar a los mejores ninots, monumentos y libros dedicados al club. Ayer, por ejemplo, el Ciutat de Val¨¨ncia estaba llena de referencias falleras festejadas por la traca de Rub¨¦n con el gol del triunfo en el tiempo de descuento.

En el ¨¢mbito de los deportes aut¨®ctonos, Agull¨® evoca los finales del siglo XIX, cuando Valencia disfrutaba de cuatro trinquets: Juan de Mena, el Grau, Serrallo y Marxalenes. Siempre se disputaban partidas el d¨ªa 19. Antes de la Guerra Civil, las calles de L¡¯Alegret y la Rambla, en el barrio de Benimaclet, organizaban partidas. Desde 1942 hasta 1979, la falla doctor Ol¨®riz-Fabi¨¢n y Fuero celebr¨® un campeonato de llargues en el que participaron pilotaris como Garrut, Llauraoret y Pardal¨ª.

Desde hace 16 a?os, 600 jugadores participan en el campeonato organizado por la Federaci¨®n y la Junta Central Fallera con un reglamento espec¨ªfico denominado ¡°joc al carrer¡± siguiendo una antigua modalidad de L¡¯Horta recogida por el investigador Frederic Llopis. Las calles fueron el escenario hasta 2006 cuando las presiones vecinales y de los coches trasladaron las partidas a los trinquetes de fuera de la capital. Esa es una de las actuales reivindicaciones de los pelotaris: disponer de espacios donde jugar en el cap i casal. Solo queda un trinquet, Pelayo, y solo dos fallas siguen jugando en la calle: Garc¨ªa Lorca-Olt¨¤, en Malilla, y Blocs Mar¨ªtims, en los Poblados Mar¨ªtimos.

Al calor de la fiesta se organizaron carreras de caballos y partidas de pelota

Un deporte mucho m¨¢s desconocido es la perxa, el palo en forma de Y para propulsar los albuferencs (embarcaci¨®n tradicional de L¡¯Albufera), inmortalizada por Vicente Blasco Ib¨¢?ez en Ca?as y barro, y convertida en pr¨¢ctica deportiva por miembros de la falla Port de Silla, que organiza desde hace seis a?os el desaf¨ªo de Perxadors: una carrera de 250 metros en modalidad contrarreloj. Una pr¨¢ctica muy viva en las localidades de Silla, Catarroja y El Palmar.

Las carreras de caballos (corregudes de joies) fueron muy populares a finales del siglo XIX, presentes en todas las grandes fiestas. En 1810, el Ayuntamiento de Valencia celebr¨® una carrera en el cauce del r¨ªo Turia. En los a?os cuarenta y cincuenta estuvieron muy presentes en las Fallas, en un intento franquista por contrarrestar los deportes considerados extranjeros. La joia era un pa?uelo de seda que el ganador regalaba a su prometida.

La competici¨®n se disputaba en el camino de Montolivet, con una tribuna para las autoridades y las falleras mayores. En los a?os sesenta pr¨¢cticamente desaparecieron debido al asfaltado de las calles y los nuevos modos de vida. Pervive, sin embargo, desde hace 80 a?os el tiro y arrastre: la Agrupaci¨®n de fallas de la Seu-La-Xerea el Mercat organiza la competici¨®n en el antiguo cauce del Turia.

Ning¨²n deporte es tan popular como el atletismo. El 16 de marzo de 1934 se celebr¨® la Carrera de les Torxes: los atletas deb¨ªan llevar una antorcha hasta la plaza de Emilio Castelar la noche de la plant¨¤, y all¨ª una enorme pira estaba preparada para quemar los trastos viejos. Despu¨¦s de la Guerra Civil, estas carreras formaban parte del programa fallero. En 1990, un tal Jos¨¦ Antonio Redolat gan¨® la competici¨®n en categor¨ªa cadete. 10 a?os m¨¢s tarde ser¨ªa campe¨®n de Europa de 1.500 metros. Redolat pertenece a la falla Josep Pignatelli. La saltadora de longitud de L¡¯Eliana Concha Montaner, subcampeona de Europa, fue fallera mayor de la Mare de D¨¦u del Carme.