Desalojadas seis familias que ocupaban un antiguo cuartel de Fuencarral
Una treintena de afectados, todos familiares, no han podido frenar la orden desahucio La operaci¨®n se desarrolla sin incidentes en una hora y media
Unas 30 personas pertenecientes a seis familias de etnia gitana que ocupaban un cuartel de la Guardia Civil en el distrito madrile?o de Fuencarral han sido desalojadas esta ma?ana. La autoridad judicial ha llegado pasadas las nueve y media de la ma?ana para cumplir una orden de desahucio del Juzgado n¨²mero 60 de Madrid. Las familias hab¨ªan pedido que se les dejara permanecer en el lugar hasta que sus hijos terminaran el curso escolar pero su solicitud no ha sido atendida y en torno a las once de la ma?ana se hab¨ªa forzado su salida.
¡°Queremos una vivienda, queremos un alquiler y pagar como los dem¨¢s, pero que no nos echen de aqu¨ª como si fu¨¦ramos perros¡±, ha explicado Manuel Fern¨¢ndez, representante de las familias que ocupaban este cuartel. Ellos han colocado pancartas en las fachadas del edificio en las que ped¨ªan que se paralizara el desalojo. Alrededor de las nueve de la ma?ana han comenzado a llegar agentes antidisturbios de la Guardia Civil, que se han mantenido en la lejan¨ªa, y efectivos del SAMUR Social.
Un cuarto de hora m¨¢s tarde, se han personado en el n¨²mero 1 de la calle Isla de Mindanao efectivos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y de la Polic¨ªa Municipal, instantes antes de que llegaran los secretarios judiciales encargados del desahucio.
El representante del Colectivo de Asociaciones Gitanas de Madrid, Mariano Gonz¨¢lez, ha intentado negociar con los secretarios judiciales el retraso, pero el resultado ha sido negativo. Al final se ha ejecutado el lanzamiento. Los residentes en la vivienda han sacado sus enseres dom¨¦sticos e incluso las ventanas y sus marcos. De momento han dejado todo en la calle hasta ver qu¨¦ hacen con ellos. El Samur Social les ha ofrecido realojarles durante una semana hasta que encuentren alguna vivienda.
¡°?Qu¨¦ hacemos con nuestros ni?os? Cuando vuelvan del colegio estar¨¢n en la calle y sin sitio donde meterse y encima como el fr¨ªo que hacen hoy. Ya podr¨ªan haber aguantado unos meses, porque nosotros queremos una vivienda y pagar como todo el mundo¡±, protestaba una de las madres entre lloros al ver c¨®mo abandonaba su casa en la que resid¨ªa desde hace 12 a?os. El desalojo se ha llevado a cabo sin incidentes.
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