Malasa?a retoma la plaza
M¨¢s de 20 colectivos del barrio celebran sus fiestas autogestionadas del Dos de Mayo
Los vecinos de Malasa?a vuelven a tomar la plaza del Dos de Mayo para celebrar sus fiestas. Porque es su barrio. Porque no quieren perder sus tradiciones. Y porque est¨¢n cansados de estigmas. ¡°Es hora de borrar la imagen que se ha creado por los macrobotellones que se celebraban por estas fechas¡±, sentencia Isabel Rodr¨ªguez, presidenta de ACIBU, la asociaci¨®n de vecinos del barrio de Universidad, uno de los 20 colectivos que integra la plataforma, creada hace cuatro a?os para la autogesti¨®n de las fiestas. Desde ayer y hasta el pr¨®ximo domingo, grandes y peque?os disfrutar¨¢n de un programa que incluye desde una sesi¨®n de yoga hasta un concurso de tortillas pasando por una verbena matinal con chocolatada incluida.
"Decidimos devolver la fiesta a los vecinos¡±, explica una integrante del Patio Maravillas
Maruja, una vecina de 81 a?os, est¨¢ encantada con la vuelta de las fiestas. A¨²n recuerda c¨®mo herv¨ªa el barrio en los a?os cuarenta, cuando los j¨®venes, vestidos de chisteros y majas, preparaban la paella para los ancianos del centro social de la Calle Divino Pastor. ¡°En esa ¨¦poca el Ayuntamiento s¨ª apoquinaba unas pesetas para los gastos de las fiestas, no como ahora¡±, lamenta. Esta anciana a¨²n se emociona al recordar los pregones que se le¨ªan en el teatro de Fuencarral. Unos 70 a?os despu¨¦s, el manifiesto vecinal est¨¢ prohibido. ¡°El Ayuntamiento no nos da permiso para hacer un preg¨®n porque consideran que ese acto dar¨ªa oficialidad a la fiesta¡±, explica Antonio P¨¦rez, periodista del diario digital Somos Malasa?a, uno de los organizadores de la plataforma.
La Junta Municipal del distrito Centro tampoco les ha permitido celebrar la carrera popular que organizaba el pastelero de la panader¨ªa Diadema, en la calle Esp¨ªritu Santo. ¡°Nos dijeron que ten¨ªan que cortar tres calles muy c¨¦ntricas y que era imposible¡±, comenta P¨¦rez. Desde que comenz¨® la plataforma, en 2008, las negociaciones con el Consistorio no han sido f¨¢ciles, seg¨²n los vecinos. El Ayuntamiento, por su parte, alaba la buena relaci¨®n que tiene con el entramado social del barrio.¡°El primer a?o estaban muy reticentes y, en parte, es comprensible. Despu¨¦s de los disturbios del a?o anterior ten¨ªan dudas de c¨®mo iban a desarrollarse estas fiestas¡±, explica Inma, de la Asociaci¨®n de Padres y Madres de Alumnos del colegio Isabel La Cat¨®lica. La ma?ana del dos de mayo de 1808, los madrile?os se rebelaron contra el Gobierno franc¨¦s.El cuartel de Montele¨®n, situado donde actualmente se encuentra la emblem¨¢tica plaza, se convirti¨® en uno de los puntos estrat¨¦gicos de la lucha contra los invasores.
Comidas populares y juegos
- Creaci¨®n de instrumentos con material reciclado. La sede de la Cruz Roja en el barrio (calle de Pozas, 14) acoge esta tarde, de 17.00 a 18.00, este taller infantil.
- Concurso de tortillas. El bar La Luna de Madrid, en la calle de Montele¨®n, 17, prepara esta tarde de 19.30 a 20.30 una degustaci¨®n de este plato.
- Torneo de baloncesto. Ma?ana, de 11.00 a 13.00, la plataforma anima a todos los vecinos a hacer un poco de deporte en la plaza del Dos de Mayo.
- Comida popular y juegos en el huerto. El domingo, de 15.00 a 17.00, los vecinos preparan una paella en un solar de la calle de Antonio Grilo.
- 'Jam session' po¨¦tica. Ma?ana, de 16.00 a 17.30, en la emblem¨¢tica plaza.
Unos 200 a?os despu¨¦s, la violencia volvi¨® a la plaza. La polic¨ªa reprimi¨® duramente el botell¨®n que congregaba a cientos de j¨®venes en Malasa?a en 2007. ¡°La Comunidad incentiv¨® los macroconciertos unos a?os antes al altercado policial y esto foment¨® la presencia de j¨®venes que se acercaban al barrio a emborracharse¡±, critica M. L., vecino del barrio desde hace 35 a?os. La Consejer¨ªa de Cultura, por su parte, reconoce que el Gobierno Regional organiz¨® durante varios a?os conciertos en la plaza pero deja claro que en 2007 no hubo ninguno por ¡°ajustes de programaci¨®n¡±. ¡°Ese mismo a?o llegamos nosotros al barrio y decidimos devolver la fiesta a los vecinos¡± relata S. L., integrante del CSO Patio Maravillas, uno de los art¨ªfices de esta genial locura vecinal.
Los ancianos de las residencias de Malasa?a han recibido estas ¨²ltimas semanas la visita de los okupas del Centro Social 16.0 para invitarlos a la verbena matinal. El CSO se estrena en la plataforma junto a los indignados de la asamblea del barrio. Otros colectivos que la conforman son la Cruz Roja del barrio, asociaciones infantiles y juveniles o Ecologistas en Acci¨®n. ¡°Los ni?os disfrutan mucho con la charanga o el torneo de ping-pong¡±, explican los padres. El lema de las fiestas autogestionadas es que cada cual aporte sus recursos y su saber hacer. Sin ir m¨¢s lejos, ayer por la tarde la plaza de San Ildefonso acog¨ªa los primeros conciertos mientras en una casa particular una treintena de amantes de la m¨²sica organizaba una velada musical entre sillas de ikea, cajas de cart¨®n y guitarras el¨¦ctricas. Lo llamaron el Sof¨¢ Underground.
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