Los retos de IU en el Gobierno de Andaluc¨ªa

La negociaci¨®n de IU y PSOE ha permitido cerrar un acuerdo program¨¢tico que compromete la acci¨®n de Gobierno 2012-2016 con la participaci¨®n de IU por primera vez en la historia de la democracia.

No fue sencillo alcanzar el acuerdo dadas las diferencias sustanciales entre las dos organizaciones en relaci¨®n a las causas de la crisis, el papel de la pol¨ªtica europea en la misma y la responsabilidad de los distintos Gobiernos de Espa?a en la aplicaci¨®n dogm¨¢tica de la desregulaci¨®n del mercado, el pacto de estabilidad presupuestaria, las privatizaciones, y la ausencia de pol¨ªticas fiscales progresivas para desarrollar el bienestar de las personas, pol¨ªticas responsables de la actual recesi¨®n y de la lacra del paro.

Los resultados electorales de las presidenciales francesas y legislativas griegas significan una impugnaci¨®n en toda regla a esa orientaci¨®n econ¨®mica pactada desde los a?os noventa por la socialdemocracia y la derecha europea.

Sin duda alguna, la agresi¨®n del Gobierno del PP a las conquistas sociales, a las competencias de Andaluc¨ªa y su autogobierno, la mayor agresi¨®n conocida desde 1978, ayud¨® a explorar la posibilidad de alcanzar un acuerdo que garantizase una acci¨®n de progreso desde el Gobierno andaluz para los pr¨®ximos cuatro a?os.

Izquierda Unida puso todo su empe?o en conseguir un acuerdo que superase desde Andaluc¨ªa la imposici¨®n neoliberal de la Comisi¨®n y Consejo Europeo para condicionar el proyecto europeo y el bienestar de las personas sobre la base de impedir la intervenci¨®n democr¨¢tica de la econom¨ªa, del Banco Central Europeo, y dejar en manos de los mercados el futuro de la Uni¨®n Europea.

Son momentos de enormes incertidumbres para las personas trabajadoras o en paro, para la econom¨ªa social, para la actividad econ¨®mica de Andaluc¨ªa. No es exagerado decir que la desesperaci¨®n ha llegado a miles y miles de familias que ven c¨®mo no reciben ya ninguna ayuda, al haber agotado todos sus miembros las prestaciones por desempleo.

En ese contexto, Izquierda Unida puso su acento en la necesidad de contribuir a un cambio en la perspectiva de superar el actual modelo productivo insostenible para dar pasos en la defensa de la producci¨®n andaluza, en la planificaci¨®n e intervenci¨®n democr¨¢tica de la econom¨ªa con instrumentos financieros p¨²blicos, atendiendo y protegiendo los servicios de educaci¨®n y salud frente a la corriente privatizadora que pretende desarrollarse en Andaluc¨ªa, y la protecci¨®n social a las personas sin empleo.

Un nuevo modelo que sea incompatible con actuaciones administrativas como las que permitieron construir la aberraci¨®n del hotel El Algarrobico en contra de la ley de costas que pretende garantizar entre otras cosas el uso p¨²blico de nuestro litoral.

Frente a la contenci¨®n del gasto p¨²blico, la reducci¨®n salarial, la precarizaci¨®n de empleo, el aumento de la edad de jubilaci¨®n, que contrae la demanda, Izquierda Unida sostiene que es el momento de activar la econom¨ªa con un plan de empleo sin olvidar la atenci¨®n a las personas m¨¢s desprotegidas.

La dictadura de los mercados necesita democracias d¨¦biles y convive e impulsa la corrupci¨®n, y Andaluc¨ªa no ha sido ajena a esa presi¨®n. Nuestra modesta contribuci¨®n ha sido poner el acento en activar la participaci¨®n ciudadana para hacer a la democracia m¨¢s fuerte, en defender la ¨¦tica civil en el ejercicio de los cargos electos y de gobierno desde la austeridad y la m¨¢xima dedicaci¨®n.

Desde la vicepresidencia de la Junta de Andaluc¨ªa y las otras dos consejer¨ªas que ser¨¢n dirigidas por personas de IU, se tratar¨¢ de poner en pr¨¢ctica lo acordado acompa?ados por la m¨¢xima participaci¨®n ciudadana, desde la movilizaci¨®n si fuese preciso frente a cualquier ataque a la soberan¨ªa del autogobierno de Andaluc¨ªa.

Fuimos muy conscientes que el pueblo andaluz no nos dio fuerza suficiente para desarrollar todo nuestro programa electoral, nos dio la suficiente para influir en la perspectiva de nuestro programa, y desde esa realidad comenzamos este momento hist¨®rico para los hombres y mujeres de IU de garantizar un programa de gobierno acordado.

Nuestro norte en la negociaci¨®n fue alcanzar un acuerdo program¨¢tico no de un simple reparto de sillones, ahora se trata de gobernar pero muy pegados a la realidad social, a la participaci¨®n ciudadana y a las movilizaciones populares, desde la seguridad de que nuestra presencia en el Gobierno no debe ser contradictoria con los principios y valores de IU.

Ese es el reto y esperamos no defraudar.

Jos¨¦ Luis Centella es diputado y portavoz de IU Congreso Diputados, Willy Meyer, diputado Parlamento Europeo.