Rebeli¨®n en Gipuzkoa contra la recogida de la basura ¡®puerta a puerta¡¯

En Gipuzkoa se ha montado una tremenda a cuenta de las basuras. Vecinos de Zarautz (22.000 habitantes) se van a presentar ante el alcalde, Juan Luis Illarramendi, de Bildu, con 8.404 firmas que han reunido en esta localidad tur¨ªstica en contra del sistema de recogida de la basura ¡°puerta a puerta¡± ¡ªobliga a separar los residuos en cinco recipientes¡ª, que la coalici¨®n abertzale pretende implantar sin convocar antes una consulta popular. En Villabona (5.863 habitantes) no han sido tan civilizados. Unos desconocidos fueron a casa del alcalde, tambi¨¦n de Bildu, y, a modo de protesta, le plantaron las bolsas de la basura en el felpudo.

La soluci¨®n al tratamiento de los desechos en esta provincia ha dividido en dos a la sociedad y a la clase pol¨ªtica hasta desquiciar un debate que no termina nunca. Con los tres vertederos al borde del colapso, hasta hace un a?o el problema parec¨ªa resuelto. Se decidi¨® construir una incineradora, proyectada a unos 20 minutos en coche desde el centro de San Sebasti¨¢n. Pero la llegada de Bildu al poder en 2011 ha vuelto a poner todo patas arriba.

Los soberanistas mantienen suspendidas las obras de la pol¨¦mica planta de incineraci¨®n y quieren extender a la mayor¨ªa de las localidades el controvertido sistema de recogida de la basura puerta a puerta, siguiendo la pr¨¢ctica de localidades como Usurbil, Hernani, Oiartzun y Antzuola (suman 37.500 habitantes, el 5% de Gipuzkoa). Pero Bildu se ha encontrado con un adversario inesperado: la ciudadan¨ªa. El modelo que pretenden implantar los soberanistas, que ya funciona desde hace a?os en un centenar de municipios catalanes y en ciudades europeas como Bruselas o Mil¨¢n, ha acabado por exasperar al resto de los partidos. Entra?a una f¨¦rrea disciplina en la separaci¨®n de la basura, es m¨¢s caro, produce un efecto antiest¨¦tico en las calles y es dudoso que evite la incineraci¨®n, aseguran el PNV, PSE y PP. La situaci¨®n se complica en Gipuzkoa desde que Bizkaia, donde gobierna el PNV, ha rechazado continuar recibiendo m¨¢s basura (25.000 toneladas anuales) de la provincia vecina. Otros destinos, como Burgos, Soria y Segovia, a los que hab¨ªa tanteado Bildu para enviar sus residuos, han dado un ¡°no¡± como respuesta. As¨ª que los guipuzcoanos deben quedarse con sus residuos.

Algunos vecinos llevan sus desechos a otro municipio para no reciclar

¡°Al principio, yo so?aba con la basura. Fue tan dr¨¢stico el cambio de h¨¢bitos y la exigencia de hacerlo bien, que todo giraba alrededor de la basura¡±, afirma Luis, un vecino de Hernani. El manual del puerta a puerta establece que los desperdicios del hogar hay que clasificarlos en recipientes separados seg¨²n sean papel-cart¨®n, pl¨¢stico, vidrio, materia org¨¢nica y, finalmente, la fracci¨®n de rechazo, que no se puede reciclar. Cinco tipos de basura. Todo sin excepci¨®n es susceptible de ordenarse de esta guisa. Pero surgen las dudas. ?D¨®nde se deposita un caramelo, una c¨¢psula de caf¨¦ o la mayonesa? ?Y las u?as o el pelo?

El manual del puerta a puerta, distribuido en hogares y explicado sucintamente en charlas de ¡°concienciaci¨®n¡±, lo deja muy claro. Estipula que el caramelo es org¨¢nico, pero si va con el envoltorio es rechazo; la c¨¢psula de caf¨¦ se mezcla con los envases de pl¨¢stico, pero si est¨¢ llena va a la fracci¨®n resto, y la mayonesa se retira junto con la materia org¨¢nica, aunque en grandes cantidades hay que tratarla con ¡°un gestor autorizado¡±. Si alguien se corta las u?as, debe saber que es materia org¨¢nica, pero ojo, si est¨¢n pintadas, se depositan en la fracci¨®n rechazo. Y sucede lo mismo con el pelo, que tambi¨¦n es biodegradable salvo que esos restos de cabello lleven productos qu¨ªmicos como lacas o tintes.

Esto, que puede parecer el colmo de la precisi¨®n en la separaci¨®n de la basura, forma parte del d¨ªa a d¨ªa de muchos ciudadanos donde se aplica el puerta a puerta. Isabel, de Usurbil, asegura que ¡°al principio cuesta mucho¡±, pero, ¡°como todo en la vida, al final se convierte en algo natural conforme vas cambiando las costumbres. No supone ning¨²n sacrificio¡±. ¡°Empiezas con muchas ganas, pero acabas cans¨¢ndote porque te haces un esclavo de la basura¡±, dice otra vecina, Mari Carmen.

Los responsables del Ayuntamiento de Usurbil reconocen que el ¨¦xito del sistema depende del grado de implicaci¨®n de los vecinos, pero aseguran haber logrado separar el 82% de la basura que se puede reciclar, cuando antes era el 28%. ¡°La recogida puerta a puerta es un sistema eficaz y sostenible, y demuestra que no son necesarios los vertederos contaminantes ni las incineradoras t¨®xicas¡±, sostienen.

All¨ª donde est¨¢ implantado este modelo se han colocado unos postes junto a cada portal con unos colgadores personalizados donde cada familia engancha sus bolsas de basura. En el caso de Usurbil, la materia org¨¢nica se cuelga los lunes, jueves y s¨¢bados; el rechazo, los domingos; los envases solo pueden sacarse los martes y viernes, y el papel, los mi¨¦rcoles. Ya no hay contenedores en la calle (salvo el de vidrio). Las bolsas de basura est¨¢n en plena calle, a la vista de todos. Su contenido lo revisa un ¡°gestor autorizado¡± para comprobar si la clasificaci¨®n est¨¢ bien hecha. Y si la separaci¨®n no se cumple a rajatabla, hay riesgo de recibir una multa que va de 60 a 30.000 euros en Usurbil.

Pero el modelo tiene puntos d¨¦biles. ?Se atrever¨¢ Bildu a instalar este sistema en el centro de San Sebasti¨¢n? Sus detractores han constatado que en Gipuzkoa ¡ªen 2011 se generaron 360.000 toneladas¡ª se da ¡°el turismo de la basura¡±, de tal suerte que algunos vecinos de estos municipios han tirado la toalla y optado por llevar su basura a localidades del entorno donde rige el sistema tradicional de contenedores.

Bildu pretende ahora extender esta f¨®rmula a otros 34 pueblos de Gipuzkoa donde gobierna hasta alcanzar una poblaci¨®n de 225.000 habitantes (el 31,8% del total). Ha anunciado que la aplicar¨¢ a partir de 2013. Solo lo har¨¢ en esta provincia, no as¨ª en los Ayuntamientos que controla en Bizkaia, donde existe una incineradora. El resto de partidos critica que Bildu haya tomado esta decisi¨®n sin someterla a las consultas ciudadanas que tanto defiende.

Mientras los soberanistas sacan pecho porque el Ministerio de Medio Ambiente ha incluido recientemente a Usurbil como ejemplo de ¡°buenas pr¨¢cticas¡± por llevar adelante el puerta a puerta, PNV, PSE y PP lamentan el ¡°escaso respeto democr¨¢tico¡± de Bildu por ¡°saltarse a la torera¡± los acuerdos adoptados ¡°de forma mayoritaria y democr¨¢tica¡± en el Parlamento vasco o en las Juntas de Gipuzkoa, que aprobaron un plan de gesti¨®n de residuos con rango de ley que apuesta por reducir la generaci¨®n de basura, aumentar los niveles de reutilizaci¨®n y reciclaje e incinerar lo restante. En medio de la rebeli¨®n, las obras de la incineradora ¡ªen el t¨¦rmino municipal de San Sebasti¨¢n, pero muy pr¨®xima al casco urbano de Usurbil¡ª, con una inversi¨®n superior a los 220 millones de euros y capacidad para tratar 260.000 toneladas anuales, permanecen paradas.