Arte a ciegas gracias al tacto

Muy pronto, las personas invidentes podr¨¢n acercarse a los museos para disfrutar de las grandes obras de la pintura. La aparente contradicci¨®n es posible gracias al potencial del tacto para entender el arte. Y a una t¨¦cnica, ¨²nica en su g¨¦nero, que ha investigado ese potencial para conferir relieve a las im¨¢genes y que podr¨¢ palparse en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, a partir de septiembre. Detr¨¢s de la innovaci¨®n est¨¢ Ander Soriano, director de Estudios Durero, y Juan Torre, veterano fot¨®grafo cuya visi¨®n se redujo al 8% por culpa de un extra?o s¨ªndrome. Juntos pusieron en marcha una tecnolog¨ªa que, a¨²n en su fase incipiente, supone un gran salto social para las personas con discapacidad visual.

Las ideas m¨¢s innovadoras pueden surgir en un paseo por el monte. As¨ª le ocurri¨® a Ander Soriano (Bilbao, 1968) hace tres a?os. ¡°Juan Torre nos hab¨ªa encargado unas reproducciones de fotograf¨ªas suyas¡±, relata. ¡°Me llam¨® la atenci¨®n que, m¨¢s que a verlas, iba a tocarlas¡±. D¨ªas despu¨¦s, en el monte, pens¨® en superponer capas de tinta. Y junto a un reducido equipo se lanz¨® a experimentar: ¡°Desarrollamos un proceso qu¨ªmico y levantamos la tinta un mil¨ªmetro. Ese efecto levadura lo perfeccionamos hasta llegar a tres mil¨ªmetros, un margen que nos permit¨ªa realzar las partes prominentes de una fotograf¨ªa para darle textura y volumen¡±, cuenta desde las modernas instalaciones que la empresa tiene en el Parque Tecnol¨®gico de Bizkaia. As¨ª naci¨® la exposici¨®n Im¨¢genes para tocar, con 40 ¡°fotoesculturas¡± que retrataban a otros tantos m¨²sicos. Poco despu¨¦s, la misma t¨¦cnica se aplic¨® en una muestra a¨²n itinerante de 20 billetes antiguos.

La persona que toca el cuadro percibe la perspectiva, los planos y la historia

Hoy, el sistema permite imprimir capas de hasta cinco mil¨ªmetros de grosor y tiene una marca registrada y en proceso de ser patentada, Did¨². Con Juan Torre como colaborador y asesor, Estudios Durero se ha lanzado a la aventura de los museos. La primera parada, gracias al patrocinio de Iberdrola, ser¨¢ el Bellas Artes de Bilbao. A mediados de septiembre y coincidiendo con la exposici¨®n de Botero, la pinacoteca ser¨¢ el primer museo del mundo que acoge obras adaptadas a invidentes. ¡°Y de ah¨ª al Prado, al MoMA o al Pompidou¡±, enumera Soriano con convicci¨®n y seguridad. Por ahora, su tarjeta de visita son las seis reproducciones de El rapto de Europa, La anunciaci¨®n, San Sebasti¨¢n curado por las santas mujeres, Lot y sus hijas, Mujer sentada con un ni?o en brazos y Lying figure in mirror.

?C¨®mo dotar de relieve a una obra de El Greco? Lo primero es fotografiarla con el m¨¢ximo detalle posible; unos 300 megas de arte digitalizado, que deben interpretarse para ver las texturas y vol¨²menes a destacar. El objetivo es que la persona que lo toca pueda hacerse una idea precisa de la historia que refleja el cuadro manteniendo al mismo tiempo la perspectiva y los planos. El singular talento de Nancy Martin con el Photoshop ejecuta la interpretaci¨®n. En el cuadro de Lot y sus hijas, explica, ¡°la clave del lienzo es la figura diminuta que camina por una playa, esa es la mujer de Lot, imprescindible para entender la historia del cuadro¡±, y puntualiza, ¡°mucho m¨¢s que algunos detalles en primer plano¡±. Interpretar las capas de una pintura le lleva 40 horas de trabajo.

Una vez definidas las vetas, se imprimen una sobre otra con una tinta especial que, secada con una l¨¢mpara ultravioleta, se endurece, se adhiere y forma ese ¡°efecto levadura¡±. Conseguidos todos los vol¨²menes, se imprime sobre ellos la imagen con los colores originales. Tras 12 horas de impresi¨®n, el resultado reproduce fielmente el cuadro con un relieve minucioso y contundente. Solo queda cortar el material, que no se desgasta y aguanta a la intemperie, en un formato delimitado a 80 x 120 cent¨ªmetros. ¡°Es el ideal para que los invidentes lo puedan abarcar con las manos¡±, explica Soriano.

Cualquier obra de arte es susceptible de ser reproducida con esta t¨¦cnica y la proyecci¨®n es innegable. Juan Torre, por su parte, es la autoridad que dictamina c¨®mo de satisfactoria es la interpretaci¨®n t¨¢ctil del cuadro. Adem¨¢s, colabora con las audiogu¨ªas que complementar¨¢n la experiencia en el Bellas Artes. Los cuadros se colocar¨¢n en unos soportes fabricados en Pegasus, otra de las creaciones de Durero. El invidente se pondr¨¢ los cascos y en tres minutos sus manos palpar¨¢n la pintura mientras que sus o¨ªdos escuchar¨¢n la historia recogida en el lienzo. Tambi¨¦n habr¨¢ antifaces, para que cualquier persona experimente ese juego de sentidos que supone empaparse de arte a ciegas con las manos por delante.