Jueces y penalistas defienden adaptar la Justicia a un escenario sin ETA

¡°El terrorismo de ETA ha provocado dos da?os muy grandes: ha supuesto una escuela de odio que se ha traducido en un sinf¨ªn de v¨ªctimas y ha llevado, por otro lado, a una aut¨¦ntica devastaci¨®n jur¨ªdica¡±. La frase la pronunci¨® ayer el magistrado del Tribunal Supremo Joaqu¨ªn Gim¨¦nez. Desde este prisma, tanto ¨¦l como otros destacados jueces y abogados penalistas coincidieron en la necesidad de adaptar la Justicia al nuevo escenario abierto desde el cese de la banda armada para favorecer desde los tribunales la reconciliaci¨®n social y una paz definitiva.

Gim¨¦nez fue solo uno de los invitados a la jornada de reflexi¨®n sobre el papel del derecho penal ante el fin de ETA que organiz¨® en Bilbao la Fundaci¨®n Sabino Arana, vinculada al PNV. El actual magistrado del Supremo, formado como juez en Euskadi, reconoci¨® que el escenario actual es ¡°muy esperanzador¡±, si bien contrapuso que hay todav¨ªa ¡°asignaturas pendientes¡±. En este sentido, consider¨® que el Estado de Derecho debe actuar frente al terrorismo y sus consecuencias con ¡°respuestas leg¨ªtimas¡±, pero ¡°sobre una cierta sinton¨ªa con la realidad social¡±.

El magistrado de la Audiencia Nacional cree posible revocar el 'caso Bateragune'

En plena pol¨¦mica a¨²n por la legalizaci¨®n de Sortu, Gim¨¦nez no tuvo reparos en reconocer que la decisi¨®n del Tribunal Constitucional supone un paso importante para la garant¨ªa del pluralismo pol¨ªtico. No obstante, matiz¨® que ¡°uno no se convierte en dem¨®crata de un d¨ªa para otro¡±, por lo que recalc¨® que la nueva marca abertzale necesitar¨¢ tiempo para ¡°acreditar con sus actos¡± el rechazo de la violencia. Adem¨¢s, aunque justific¨® el protagonismo de las v¨ªctimas en el final del terrorismo, matiz¨® que estas no deben introducirse en el derecho penal ni guiar la pol¨ªtica penitenciaria del Estado¡±.

Las contundentes afirmaciones de Gim¨¦nez encontraron respaldo en las del magistrado de la Audiencia Nacional Jos¨¦ Ricardo de Prada, quien valor¨® tambi¨¦n la legalizaci¨®n de Sortu, as¨ª como los encuentros entre v¨ªctimas de ETA y los presos que han rechazado el terrorismo. En su opini¨®n, iniciativas as¨ª ¡°van por el buen camino¡± y deben constituir ¡°el inicio de un proceso¡± hacia la reconciliaci¨®n, entendida como una situaci¨®n en la que todas las partes del conflicto ¡°se respeten¡±.

De Prada coincidi¨® con Gim¨¦nez en que el terrorismo ha producido ¡°mucho dolor y muchas v¨ªctimas¡±, as¨ª como ¡°deterioros en el Estado de Derecho¡±. En este sentido, inst¨® a ¡°desandar lo mal andado¡±, a ¡°poner el cuentakil¨®metros a cero¡±, para que la Justicia recupere ¡°toda su configuraci¨®n general e inicial¡±. ¡°Esa es la exigencia b¨¢sica. Luego, a partir de ah¨ª, probablemente se intentar¨¢ llegar m¨¢s all¨¢ para buscar formas de justicia no s¨®lo retributiva, sino tambi¨¦n restaurativa¡±, consider¨®.

El magistrado de la Audiencia Nacional fue incluso m¨¢s all¨¢ al advertir sobre la posibilidad de que el Constitucional, al igual que ha hecho con Sortu, corrija al Supremo en lo que se refiere a la condena por el caso Bateragune. Una revocaci¨®n, solicitada incluso desde la mayor¨ªa de partidos pol¨ªticos vascos, que conllevar¨ªa la liberaci¨®n de Arnaldo Otegi y los otros cuatro encarcelados, entre los que figura tambi¨¦n el sindicalista de LAB Rafa D¨ªez Usabiaga. ¡°Parece que determinadas situaciones que se consideraban que pod¨ªan ser, no s¨®lo pol¨ªticamente inaceptables, sino incluso criminales, no son eso en realidad y merecen, por lo menos, ser discriminalizadas¡±, enjuici¨®.

Calparsoro asegura que el r¨¦gimen de penas tendr¨¢ en cuenta el "contexto"

Gim¨¦nez y De Prada fueron solo dos de los asistentes a la jornada que, durante una pausa a media ma?ana, atendieron a los medios de comunicaci¨®n. Tambi¨¦n lo hizo el fiscal superior del Pa¨ªs Vasco, Juan Calparsoro, quien recalc¨® que la Justicia ¡°debe actuar y juzgar los delitos¡±, aunque estos hayan sido cometidos por personas que han abandonado la actividad terrorista. No obstante, coincidi¨® en la necesidad de adaptaci¨®n al nuevo escenario al se?alar que el r¨¦gimen de cumplimiento se aplicar¨¢ en funci¨®n de ¡°la situaci¨®n individual de cada penado, la situaci¨®n social y el contexto¡±. ¡°Nuestra labor ser¨¢ el cumplimiento de la legalidad, pero interpretando esta sobre la realidad actual¡±, manifest¨®.

Durante el encuentro, los m¨¢s de 20 asistentes reflexionaron tambi¨¦n sobre cuestiones como la doctrina Parot, la denominada V¨ªa Nanclares de reinserci¨®n de presos etarras e incluso la propia definici¨®n de lo que es un hecho terrorista.