En tan solo un pesta?eo
Alrededor de 150 personas compiten en la cuarta edici¨®n del festival de cine express de Portugalete. Realizan un corto en diez horas
El arte es cuesti¨®n de tiempo, de esfuerzo y de reflexi¨®n, pero a veces solo necesita una peque?a dosis de prisa para avivar la creatividad. Es lo que pone a prueba el festival de cine express de Portugalete, que ayer celebr¨® su cuarta edici¨®n con 28 equipos y un reto: el de realizar un corto de cuatro minutos en solo diez horas.
Alrededor de 150 personas se implicaron en sus proyectos ayer, a las que se sumaron otros tantos portugalujos, improvisados actores por un d¨ªa en el que la localidad se vio salpicada de situaciones curiosas. Desde un joven con cara somnolienta que sal¨ªa de casa semidesnudo, hasta una chica vestida de sevillana, pasando por un alocado artista que opt¨® por ponerse a remojo en la r¨ªa.
En los equipos hab¨ªa desde cuadrillas de amigos que reconoc¨ªan haber dormido poco la noche anterior por obligaciones sociales, hasta estudiantes de Comunicaci¨®n Audiovisual y profesionales. De Euskadi, Madrid, Barcelona, Castell¨®n o Valencia, pero tambi¨¦n del lejano Nueva York. Y es que el de Portugalete es el ¨²nico festival de rodaje de cortometrajes estatal que se limita a un d¨ªa y en el panorama internacional hay escasos ejemplos, como el de Londres.
Participan creadores de Nueva York, Madrid y Barcelona
"Lo que m¨¢s vale es la idea", explica Iv¨¢n Mi?ambres, uno de los cuatro j¨®venes que componen la organizaci¨®n del festival. "Hay quien se viene con la c¨¢mara de las vacaciones, su corto no tiene una t¨¦cnica bien resuelta, pero tiene una idea graciosa y obras realmente creativas que superan cualquier otro pero".
Con gafas de sol de monturas blancas, atuendo oscuro y rostro serio, el director de uno de los cortos gritaba, en la cercan¨ªa del Puente Colgante: "?otra vez!". Es el tema en torno al que ten¨ªan que girar los proyectos de los equipos y que estos conocieron a las nueve y media de la ma?ana. A las siete, finalizaba el plazo para entregarlo. Entre medias, improvisaci¨®n a partir de lo puesto o de las maletas en las que algunos llevaban un universo de objetos y ropajes. Por si acaso.
A las nueve de la ma?ana se conoci¨® el tema de este a?o: ¡°otra vez¡±
Pese a las prisas, algunos paseaban con calma y entre risas junto al puente colgante ayer a mediod¨ªa. El equipo formado por Imanol, Markel y Asier, que grababa un falso reportaje sobre un artista al que todo lo que le rodeaba le parec¨ªa arte ¡ªuna ¡°cr¨ªtica al arte moderno, a que parezca que cualquiera puede hacer arte¡±¡ª, tuvo tiempo hasta de pegarse un chapuz¨®n en la r¨ªa.
Pero el reloj avanzaba y, en ocasiones, la realidad superaba la ficci¨®n. Es el caso de otro de los equipos, que grababa un corto basado en el desastre de la grabaci¨®n de una pel¨ªcula, tal y como explicaba su t¨¦cnico de sonido, Erlantz. ¡°Hemos tenido alg¨²n contratiempo con un cable que no funcionaba... Hemos tenido que ir hasta Ortuella al local¡¡±, a?ad¨ªa Ane, se?alando a un cable pegado con cinta aislante. ¡°Muchos nervios¡±, conclu¨ªa Hayd¨¦.
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