¡°Pido p¨²blicamente perd¨®n de todo coraz¨®n¡±
Un catedr¨¢tico de la UPV lee en un seminario una carta del ex dirigente etarra Txelis Afirma que pedir perd¨®n es un acto de humildad que implica "no echar balones fuera" "Dios es testigo de que estoy profunda y sinceramente arrepentido", afirma
El catedr¨¢tico em¨¦rito de la UPV Sabino Ayestar¨¢n ha le¨ªdo esta ma?ana en el seminario Perdonar para vivir una extensa carta del exdirigente de ETA Jos¨¦ Luis ?varez Santacristina, Txelis, en la que pide p¨²blicamente perd¨®n a la sociedad por el da?o causado por la banda terrorista, en general, y "en particular, durante los a?os en que fui militante". El que fuera jefe del aparato pol¨ªtico de ETA asegura que "Dios es testigo" de que est¨¢ "profunda y sinceramente arrepentido" y hace numerosas reflexiones sobre el perd¨®n, p¨²blico y privado, y el sentido que tiene en estos momentos en Euskadi, en una sociedad que trata de gestionar como puede el final del terrorismo.
Asegura que pedir perd¨®n es "un acto de humildad" en el que "uno se reconoce radicalmente falible y responsable del mal causado"; "no echa balones fuera; no busca excusas", afirma. Asegura tambi¨¦n que "pedir perd¨®n es asimismo un ejercicio de libertad" que "podr¨ªa quedar desnaturalizada y perder su potente fuerza reparadora y regeneradora si se planteara solo como un requisito de cumplimiento formal". "La petici¨®n de perd¨®n no es en modo alguno un acto de exigencia para con la v¨ªctima o sus familiares", afirma. Tambi¨¦n se?ala que "quien expresa la petici¨®n de perd¨®n no espera necesariamente, y menos a¨²n en primer t¨¦rmino, que se le otorgue el perd¨®n por parte de la v¨ªctima o sus familiares".
Tras su ingreso en prisi¨®n en 1992, Txelis experiment¨® un proceso de recuperaci¨®n de la fe religiosa que hizo que, a finales de ese mismo a?o, pidiera a la direcci¨®n de ETA de la ¨¦poca la renuncia a las armas. Fue expulsado de la banda en 1998 despu¨¦s de arrepentirse y en los ¨²ltimos a?os se acogi¨® a la v¨ªa Nanclares, impulsada por el Gobierno socialista, que permit¨ªa acogerse a beneficios penitenciarios a reclusos que cumpl¨ªan con lo dispuesto en la ley: rechazo de la violencia y perd¨®n a las v¨ªctimas, entre otros requisitos.
La pol¨¦mica desatada entre las asociaciones de v¨ªctimas tras conocerse el pasado mes de mayo la decisi¨®n del exdirigente etarra de acudir a los Cursos de Verano hizo que Txelis declinara para no herir la sensibilidad de las v¨ªctimas a pesar de haber manifestado que estaba ¡°encantado¡± con la idea. Desde la AVT se entendi¨® su participaci¨®n como el reflejo de ¡°un mundo al rev¨¦s¡±.
Horas despu¨¦s de que se conociese la programaci¨®n de los cursos acad¨¦micos, el delegado del Gobierno en el Pa¨ªs Vasco, Carlos Urquijo, expres¨® su oposici¨®n a que el exdirigente de ETA participara en la ponencia ¡°por muy arrepentido que est¨¦¡±. Seg¨²n Ayestar¨¢n, el perd¨®n es un proceso de relaci¨®n privado entre personas, largo y complejo. ¡°El proceso empieza con una petici¨®n de perd¨®n, pero para poder llevarse a cabo es necesario que el que lo recibe, acepte la disculpa. Sin la intervenci¨®n de las dos partes, no es posible que el proceso salga adelante¡±, opina. La participaci¨®n en actos p¨²blicos de presos terroristas que han rechazado la violencia ha generado una gran pol¨¦mica en los ¨²ltimos meses. Algunos creen que es fundamental su testimonio para avanzar, y para que otros reclusos debatan y avancen en ese camino. Otros creen que darles voz es humillante para las v¨ªctimas.
En el seminario que organiz¨® el Gobierno vasco en mayo sobre convivencia y victimas estaba prevista la participaci¨®n de Carmen Gisasola, una de las reclusas de la v¨ªa Nanclares. El Ministerio del Interior vet¨® su presencia para no ofender a las v¨ªctimas, lo que provoc¨® una disputa publica entre el PP y el PSE. Se baraj¨® en ese momento la posibilidad de leer una carta suya en el acto, pero finalmente, y tras la monumental pol¨¦mica generada, se desech¨® la idea.
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