El Banco de Valencia acusa a Parra de hacerle perder 137 millones
Fomento Urbano de Castell¨®n se hizo con la mayor¨ªa de Agval sin ning¨²n desembolso El exconsejero delegado ocult¨® la situaci¨®n de la sociedad mayoritaria en Aguas de Valencia
El Banco de Valencia (BV) acusa a su exconsejero delegado, Domingo Parra, al presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig, y a cinco familiares de ambos, de causar a la entidad un perjuicio econ¨®mico de 137 millones de euros con operaciones financieras e inmobiliarias irregulares. La entidad ha pedido al juzgado el embargo cautelar de los bienes y las cuentas bancarias de los denunciados.
El banco, intervenido en 2011 por el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancario (FROB) y rescatado con 4.500 millones de euros de dinero p¨²blico, considera que los denunciados cometieron un delito de estafa, administraci¨®n desleal y apropiaci¨®n indebida. El Banco de Valencia sostiene que los Calabuig sobornaron con cuatro millones de euros a Parra por facilitar una operaci¨®n en perjuicio del banco. Un informe pericial elaborado por la auditora KPMG es la base principal de la denuncia del FROB.
El modus operandi de los denunciados es parecido. Domingo Parra aprovech¨® su cargo de consejero delegado del Banco de Valencia para facilitar cr¨¦ditos a Agval, una sociedad instrumental participada por el banco y los Calabuig, para la gesti¨®n de las acciones de Aguas de Valencia. Los millones se transfer¨ªan de la entidad financiera a Agval con un prop¨®sito pero luego se derivaban a otro tipo de operaciones de las que supuestamente se beneficiaron el exconsejero delegado del Banco de Valencia y los Calabuig.
El primero en salir malparado de estas operaciones cruzadas ha sido el propio banco, seg¨²n recoge la denuncia que investiga el Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de la Audiencia Nacional. Y para muestra un bot¨®n. En 2008, Fucsa, sociedad vinculada a los Calabuig, se hizo con la mayor¨ªa de Agval, accionista mayoritaria de Aguas de Valencia, gracias a dos pr¨¦stamos de 48 millones, concedidos por el BV, y a que Parra renunci¨® en nombre del banco a su derecho de suscripci¨®n preferente de las participaciones. Con ello, el exconsejero cedi¨® a los Calabuig, sin desembolso alguno, el control de Aguas de Valencia.
El exdirectivo de la entidad cedi¨® gratis el control de Agval a los Calabuig
La denuncia del FROB, gestor provisional del Banco de Valencia, se dirige contra Domingo Parra, su esposa Mar¨ªa Jos¨¦ Aznar, el presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig y cuatro familiares suyos. El denunciante incluye a Aurelio Izquierdo, director financiero de Bancaja y ejecutivo del BV, como part¨ªcipe a t¨ªtulo lucrativo por su participaci¨®n en una sociedad que comparte con Domingo Parra y familiares, denominada IZPA. El gestor del banco pidi¨® que la denuncia se trasladase a la Fiscal¨ªa Especial contra la Corrupci¨®n.
El FROB explica que tras sustituir en noviembre pasado al consejo de administraci¨®n del banco se identifican una serie de operaciones de dudosa racionalidad econ¨®mica en las que ha intervenido el exconsejero delegado. ¡°En ellas, Parra ha obtenido, por v¨ªa directa o indirecta, ping¨¹es beneficios, en perjuicio del patrimonio del banco¡±, subraya la denuncia.
Estas son las operaciones que el FROB enumera en la denuncia de acuerdo con el informe pericial elaborado por la firma KPMG:
? De c¨®mo Parra cedi¨® gratis el control de Agval a Calabuig. Inversiones Financieras Agval se constituy¨® en 2007 para reunir las acciones que pose¨ªa cada uno de los socios locales de la compa?¨ªa Aguas de Valencia. El Banco de Valencia, con 375.000 acciones, ten¨ªa el 33,43% de las acciones de Agval, Fucsa, sociedad vinculada a la familia de Eugenio Calabuig, pose¨ªa un 26,25%, y los Boluda, el resto de participaciones. En 2008 se produce una operaci¨®n de intercambio de acciones que convierten a Fucsa en mayoritaria, seguida del BV y de los Boluda, con un 20%. Con el cambio, la entidad bancaria pierde el control sobre Aguas de Valencia en beneficio de los Calabuig, que consiguen esta posici¨®n dominante sin desembolso econ¨®mico alguno. BV y Fucsa compran m¨¢s tarde a partes iguales el paquete de los Boluda y, de nuevo, las sociedades de los Calabuig suman m¨¢s que las del BV. Los Calabuig financian las dos operaciones con sendos pr¨¦stamos de 48 millones de euros de la entidad de la que Parra era consejero delegado. Por si fuera poco, Parra hab¨ªa renunciado antes al derecho de suscripci¨®n preferente que ten¨ªa el banco en el intercambio de participaciones, facilitando la hegemon¨ªa de Fucsa. La denuncia estima que los Calabuig deb¨ªan haber pagado al banco una prima por la p¨¦rdida de control de entre 15 y 21, 3 millones. El pr¨¦stamo de 48 millones creci¨® hasta los 53, tras una reestructuraci¨®n. La devoluci¨®n se prev¨¦ en un solo pago en 2016. El FROB exige en la denuncia la devoluci¨®n de este cr¨¦dito.
Los pr¨¦stamos bancarios se utilizaron para pagar dividendos
? Un cr¨¦dito de 55 millones para Agval que acab¨® en el Valencia CF. En diciembre de 2008, el Comit¨¦ de Riesgos de la Direcci¨®n General del BV, del que formaba parte Parra, concede un pr¨¦stamo de 55 millones de euro a Agval, poniendo como garant¨ªa 500.000 acciones de Aguas de Valencia. El objetivo era financiar y garantizar una OPA de exclusi¨®n de la compa?¨ªa de aguas. Se ingres¨® el dinero en la cuenta corriente de Agval el 24 de diciembre de 2008. En marzo de 2009 Agval, representada por Parra, firma con Fucsa, con Eugenio Calabuig de consejero, una cuenta corriente com¨²n para ¡°facilitar las relaciones entre ambas empresas¡±.
Agval transfiere los 55 millones de pr¨¦stamo del BV a sociedades del entorno de los Calabuig y esta, a su vez, traspasa 49,5 millones al Valencia CF. Lo que se public¨® entonces es que Eugenio Calabuig prest¨® 50 millones de euros a la sociedad deportiva para que este pagase parte de la ficha de los jugadores y los trabajos a la uni¨®n temporal de empresas que edificaba el nuevo estadio de f¨²tbol. ¡°Esta cuenta fue en realidad el desag¨¹e por el que se fue el cr¨¦dito dado por el BV¡±, dice la denuncia. El dinero se traspasa ante de que se ejecutase la OPA, una operaci¨®n que, en opini¨®n de los peritos, es ¡°una maquinaci¨®n para suspender la cotizaci¨®n burs¨¢til de Agval y eludir as¨ª el deber de transparencia e informaci¨®n de las cotizadas¡±.
Conforme entraba efectivo del BV en Agval sal¨ªa en cantidades similares a sociedades vinculadas con los Calabuig, en unos casos como traspasos por la cuenta corriente com¨²n, en otros por la compra de acciones de Costa Bellver, tambi¨¦n de los Calabuig.
?El pelotazo de Costa Bellver. A pesar de que en 2009 el mercado inmobiliario ya hab¨ªa entrado en crisis, Agval pag¨® casi 50 millones de euros por 594 acciones de la Inmobiliaria Costa Bellver, vinculada a la familia Calabuig. Los t¨ªtulos los vendi¨® Agval a Bancaja H¨¢bitat dos meses despu¨¦s y volvi¨® a comprar otro paquete de acciones de Costa Bellver por otros 46 millones de euros. El banco denuncia que las acciones de Costa Bellver se vendieron entre 2007 y 2009, a?os en los que ya se hab¨ªa iniciado la crisis inmobiliaria, a un precio medio inferior a los 30.000 euros. La familia Calabuig traspas¨® las acciones a Agval, y esta sociedad parte de las mismas a Bancaja H¨¢bitat, a un precio casi tres veces superior. Con la operaci¨®n de compra venta de las acciones de Inmobiliaria Costa Bellver la familia Calabuig obtuvo unas plusval¨ªas de m¨¢s de 66 millones de euros.
IZPA recibi¨® un pago de cuatro millones de la venta de Costa Bellver
?Pagos a Parra e Izquierdo. El FROB denuncia tambi¨¦n una transferencia en febrero de 2010 de cuatro millones de euros desde dos empresas vinculadas a los Calabuig (Fucsa y Galbis) a Gestor de Inversiones IZPA, cuyo capital est¨¢ vinculado al menos en un 50% a Domingo Parra y su familia.
Ese dinero, que los denunciantes llegan a calificar de soborno, proceder¨ªa de la venta del segundo paquete de acciones de Costa Bellver a Agval. El dinero habr¨ªa realizado toda una serie de movimientos desde el Banco de Valencia hasta una cuenta en la que figurar¨ªa Celia Calabuig como titular desde donde habr¨ªan recorrido el tramo final hasta IZPA. ¡°Desde IZPA se han realizado ingresos bancarios no solo en beneficio de Domingo Parra, sino tambi¨¦n a Aurelio Izquierdo, que fue consejero delegado y presidente del Banco de Valencia entre octubre y noviembre de 2011, adem¨¢s de otros cargos ostentados en Bankia y Bancaja¡±, se?ala la denuncia.
Esquerra Unida difundi¨® ayer una respuesta del consejero de Econom¨ªa, M¨¢ximo Buch, en la que se?ala que en el Instituto Valenciano de Finanzas Aurelio Izquierdo ¡°no ha figurado nunca como administrado de Gestor de Inversiones IZPA, ni de ninguna de las sociedades relacionadas con ella¡±. ¡°Durante el tiempo que dur¨® su mandato como director general de Bancaja, el Instituto Valenciano de Finanzas no recibi¨® ninguna solicitud de cr¨¦dito o aval vinculada a Aurelio Izquierdo concertadas por Bancaja con IZPA o sociedades relacionadas¡±.
? Gastar 4.352 euros y ganar 13,9 millones. El 7 de julio de 2005 la familia Calabuig constituy¨® la sociedad Capital Costa y a?o y medio despu¨¦s, en diciembre de 2006, la vendi¨® a IZPA, empresa vinculada a Domingo Parra por un importe de 4.352 euros.
Las operaciones siguieron con el sector inmobiliario ya desplomado
Capital Costa, que no hab¨ªa registrado casi actividad, hab¨ªa aprobado, justo antes de la venta a IZPA, un reparto de dividendos por importe de 1,5 millones de euros que, supuestamente, recibieron los nuevos propietarios. En 2008, Parra decide revender Capital Costa a las firmas Galbis y Fucsa, vinculadas a la familia Calabuig, por un importe de 12,4 millones de euros. La denuncia del Banco de Valencia incluye un informe pericial en el que se asegura que ¡°en menos de dos a?os¡± Parra obtuvo una plusval¨ªa de 13,9 millones de euros derivada de su inversi¨®n inicial de 4.352 euros en Capital Costa, ¡°sin que ello tenga racionalidad econ¨®mica alguna, especialmente en unos tiempos en los que ya hab¨ªa comenzado la crisis econ¨®mica en el sector inmobiliario al que se dedicaba esta sociedad. No existe ning¨²n hecho econ¨®mico o financiero que permita explicar tama?a diferencia de precio¡±.
? Un colch¨®n para dividendos. Para los actuales gestores del Banco de Valencia la operaci¨®n de compra venta de la sociedad Capital Costa form¨® parte de ¡°un mismo plan criminal¡± dividido en dos fases. La segunda parte se materializ¨® a trav¨¦s del reparto de dividendos en 2006 y 2007 de una sociedad subsidiaria denominada Capital Residencial.
La sociedad que supuestamente controlaban Izquierdo y Parra, IZPA, era propietaria al 100% de Capital Costa que, a su vez, controlaba el 30% de la firma Capital Residencial. En junio de 2006 el comit¨¦ de riesgos del Banco de Valencia, del que formaba parte Domingo Parra, concedi¨® un cr¨¦dito de tres millones de euros, sin garant¨ªas, a Capital Residencial como "colch¨®n de tesorer¨ªa para posibles inversiones futuras". Y solo seis meses despu¨¦s, Capital Residencial aprueba una distribuci¨®n de dividendos por importe de 5,1 millones de euros.
Los dividendos se pagaron, seg¨²n la denuncia, con el cr¨¦dito otorgado por el Banco de Valencia. Desde Capital Residencial se transfirieron a Costa Capital 1,5 millones de euros, empresa controlada por IZPA. Al menos la mitad de esta cantidad, seg¨²n la denuncia, fue a parar a manos de Parra y su familia.
En 2007, Capital Residencial decidi¨® volver a repartir dividendos. Esta vez el circuito para sacar el dinero del Banco de Valencia se complic¨® un poco m¨¢s, seg¨²n la denuncia. El Banco de Valencia concedi¨® un cr¨¦dito de 12 millones a la sociedad Casa Amiga, una empresa cuya propiedad el FROB atribuye err¨®neamente a la familia Calabuig. Desde esta sociedad se traspasaron, a trav¨¦s de otra empresa puente ¡ªDesarrollos Urban¨ªsticos Globales¡ª, m¨¢s de 8,6 millones de euros a Capital Residencial, que reparti¨® 4,7 millones en concepto de dividendos en cinco partes. Una de ellas por importe de 1,4 millones de euros se transfiri¨® a Capital Costa, controlada por Parra.
Accionistas inquietos, respuestas falaces
La participaci¨®n del Banco de Valencia en Agval y las inversiones en el seno de la compa?¨ªa de que controlaba la mayor¨ªa de Aguas de Valencia despertaron la inquietud de los accionistas en las juntas de 2010 y 2011,
En la junta de accionistas del Banco de Valencia del 6 de marzo de 2010, el presidente Jos¨¦ Luis Olivas explic¨®: ¡°Al se?or Calabuig no le hemos dado ning¨²n pr¨¦stamo ¨²ltimamente. Quien le haya dicho esa afirmaci¨®n est¨¢ equivocado, no se corresponde con la realidad¡±.
La realidad es que el Banco de Valencia hab¨ªa financiado en abril y mayo de 2008 con m¨¢s de 53 millones de euros la compra de acciones de Agval ¡ªtenedora del 60% de las acciones de Aguas de Valencia¡ª a la familia Calabuig, a trav¨¦s de Fomento Urbano de Castell¨®n (Fucsa).
Un a?o m¨¢s tarde, el 26 de marzo de 2011, Olivas volvi¨® a ser interrogado por los accionistas por el valor de los activos en Agval. Y el entonces presidente del banco respondi¨®: ¡°Me dice el consejero delegado [Domingo Parra] que est¨¢n valorados los activos por una tasadora oficial en 150 millones de euros¡±. La tasaci¨®n nunca existi¨®. Es m¨¢s, en la misma junta se afirm¨® que ¡°Agval es una magn¨ªfica empresa sin ning¨²n tipo de endeudamiento¡±. La empresa adeudaba desde diciembre de 2008 un cr¨¦dito de 55 millones de euros concedido por el Banco de Valencia.
Para el FROB, el Banco de Valencia se vio inducido al error al financiar Aguas de Valencia. Errores que no se hubiesen producido, explica el banco en el texto de la denuncia, ¡°sin la colaboraci¨®n y omisi¨®n e inveracidad de la informaci¨®n que Domingo Parra transmit¨ªa como consejero delegado y representante del Banco de Valencia en Agval¡±.
La denuncia presentada por la Asociaci¨®n de Peque?os Accionistas del Banco de Valencia contra los antiguos gestores destituidos tambi¨¦n recoge la inquietud que presidi¨® la ¨²ltima junta unos pocos meses antes de la intervenci¨®n del Banco de Espa?a.
Los accionistas se quejaron de que las cuentas de Agval ¡ªdonde el Banco de Valencia ten¨ªa casi el 50% de las acciones¡ª correspondientes a 2009 se hab¨ªan depositado semanas antes de la junta del Banco de Valencia de 2011. ¡°Ese retraso tiene todos los visos de ser intencionado para ocultarnos las operaciones de Costa Bellver. Creo que hay una dejaci¨®n de las funciones in vigilandum por las que el consejo [de administraci¨®n] cobra¡±, indic¨® un accionista.
Olivas replic¨®: ¡°Agval consider¨® que era una buena operaci¨®n comprar un suelo que est¨¢ en Benic¨¤ssim, que est¨¢ urbanizado y en primera l¨ªnea de mar y es una inversi¨®n que tampoco preocupa excesivamente¡±. El mercado inmobiliario ya se hab¨ªa desplomado y el Banco de Valencia estaba a punto de ser intervenido.
La denuncia del FROB insiste en la situaci¨®n de dificultades econ¨®micas. ¡°La refinanciaci¨®n [de la operaci¨®n de compra de acciones de Agval] se llev¨® a cabo cuando ya se hab¨ªa disparado con toda claridad la crisis econ¨®mica a finales de 2008 y el Banco de Valencia ten¨ªa en esas fechas serios problemas de liquidez¡±, argumenta el denunciante.
Otra de las acusaciones relevantes que recoge la denuncia del FROB recae casi en exclusiva sobre el exconsejero delegado Domingo porque, pese a estar al tanto de las operaciones con los Calabuig, no inform¨® al Banco de Valencia de las mismas.
¡°El se?or Parra ten¨ªa el deber de informar al banco de lo que suced¨ªa en Agval y de eliminar el error sobre el que se basaba la financiaci¨®n [de algunas de estas operacioneas] por parte de la entidad bancaria¡±, prosigue el texto presentado a la Audiencia Nacional.
Esta cadena de hechos impidi¨® al Banco de Valencia valorar de forma adecuada el riesgo de algunas de esas operaciones, pr¨¢cticamente lo mismo que los peque?os accionistas denunciaron en su querella. El juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de Valencia se ha inhibido de proceso que abri¨® la asociaci¨®n en favor del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de la Audiencia Nacional.
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