El movimiento ¡®slow¡¯ de la literatura
Susana Alfonso lanza El b¨²ho de Minerva, tras a?os de cavilaciones
Susana Alfonso conf¨ªa en el esfuerzo y la constancia como ¨²nica clave para que las cosas funcionen. Y alude al tiempo como un viejo amigo que aporta igual en la distancia y en la cercan¨ªa. Alfonso cree tanto en lo reposado, en lo trabajado, que su proyecto, su rendici¨®n de cuentas, ha tardado cuatro a?os en hacerse realidad. Se llama El b¨²ho de Minerva y es una editorial de corta tirada que mira m¨¢s por los autores y los lectores que por la finalidad comercial del libro.
¡°Me fascina todo lo que rodea al mundo del libro¡±, se?ala esta valenciana de 43 a?os que comparte el proyecto con su hermana Mar¨ªa Jes¨²s, de 56. Alfonso estudi¨® filolog¨ªa y empez¨® a participar en revistas culturales. En 2008 ya ten¨ªa decidido publicar a esos autores que otros rechazaban y que para ella ¡°no se pod¨ªan quedar en el caj¨®n¡±. Pero la situaci¨®n no era la m¨¢s propicia.
Ahora tampoco, pero ha llegado a la conclusi¨®n de que ¡°si las cosas se hacen con cabeza, cualquier momento es bueno¡±. Por eso se esper¨® y, a mediados de mayo, mont¨® El b¨²ho de Minerva. ¡°El nombre viene de la diosa de la guerra, protectora de la paz, la filosof¨ªa y las artes¡±, explica, ¡°y yo quiero verme como ese custodio de la sabidur¨ªa¡±. ¡°Sin prepotencia, claro¡±, se defiende amable.
La singladura personal de Susana Alfonso durante los cuatro a?os que ha tardado en hacerse realidad este sue?o ha pasado por el lanzamiento anual de una revista, aportaciones de cr¨ªtica de cine y labores de representante literaria. Esta agente literaria que busca erigirse en Carmen Balcells ¡ª¡°era una mujer que defend¨ªa los derechos de los escritores, los cuidaba¡ Y veo esto algo que necesita tiempo, dedicaci¨®n. Me gusta que el autor se sienta arropado y poder trabajar el texto con ¨¦l¡±¡ª ya tiene dos publicaciones de 250 ejemplares.
El objetivo es publicar
Alfonso recuerda a esa estirpe de editores que protagonizan la novela Dublinesca, de Enrique Vila-Matas. Ella tambi¨¦n asiste todos los d¨ªas ¡°conmovida al espect¨¢culo de ver c¨®mo la rama noble de su oficio se va extinguiendo sigilosamente¡±. Agentes, editores, ¡°que todav¨ªa leen¡± interesados m¨¢s por el contenido que por la cantidad.
Hasta ahora ha sacado El misterio de Bola?os, de Manel Gimeno, y El collage de Orsson Beans, de Vicente Marco. Dos libros muy diferentes entre s¨ª que se compaginan a la perfecci¨®n: ¡°El primero es ¨¢gil, entretenido, corto. Es sencillo y en eso reside su arte¡±, argumenta severa. ¡°El otro es una mezcla sublime de g¨¦neros que engancha pero necesita algo de esfuerzo¡±.
Alfonso defiende el inter¨¦s o la dedicaci¨®n lejos de modas vac¨ªas. ¡°No entiendo eso de que las cosas solo sirvan para desconectar¡± comenta, ¡°algo un poco m¨¢s dif¨ªcil tambi¨¦n puede ser divertido. Todo depende de la calidad¡±.
¡°Tanto productores, editores, empresarios en general, somos responsables, en gran parte, de lo que el p¨²blico consume. A veces me planteo que nos prefieren algo tontos y sin voluntad de pensamiento¡±, a?ade.
Los dos autores de la colecci¨®n comparten su idea: ¡°Su papel ha sido esencial. Un libro es una idea que no se puede vender hasta que se publique¡±, alega Vicente Marco. ¡°Yo tuve una escritura totalmente libre¡±, explica, por su parte, Manel Gimeno, ¡°pero luego se puso mucho cuidado en la publicaci¨®n¡±.
Lejos de teorizar sobre su trabajo, Alfonso recuerda su trayectoria y acepta que no todo ha salido rodado: ¡°Al principio fue espantoso. El primer a?o me llegaban pocos manuscritos y bastante malos. Sin embargo, ahora se ha corrido la voz y estamos atiborradas de trabajos y con proyectos potencialmente muy buenos¡±, indica.
Cree que la subida del IVA en la cultura es ¡°una barbaridad¡± que "va a provocar que la gente se descargue m¨¢s libros todav¨ªa¡±. Pero asume el reto: ¡°La idea de publicar autores tan v¨¢lidos que han sido rechazados y cuyos manuscritos son tan buenos ha supuesto un gran reto¡±, insiste. ¡°Y s¨¦ que vendr¨¢n m¨¢s¡±. ¡°Me gustar¨ªa descubrir talentos¡±, concluye aludiendo, de nuevo, a Carmen Balcells. ¡°No s¨¦, editar a los nuevos boom de la literatura¡±, suspira.
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