Valencia aprobar¨¢ este mes multar a los clientes de la prostituci¨®n
El concejal de Interior asegura que la ordenaza saldr¨¢ adelante con o sin el consenso socialista
Valencia lleva a?os intentando regular la prostituci¨®n callejera. Hace nueve a?os se estuvo a punto pero no sali¨® y ahora lleva meses en discusi¨®n sin que haya un acuerdo. El concejal de Interior del Ayuntamiento de Valencia, Miquel Dom¨ªnguez, ha confirmado este jueves que antes de que acabe septiembre habr¨¢ una ordenanza municipal. "Con acuerdo de la oposici¨®n o sin ¨¦l", ha remachado el edil de gobierno.
La declaraci¨®n ha creado sorpresa dado que hasta la fecha Dom¨ªnguez se ha negado a sacar adelante una norma si no contaba al menos con el consenso de los socialistas, principal grupo de la oposici¨®n. Las conversaciones, iniciadas a principios de a?o, se han atascado en torno a si hay que multar o no a las prostitutas. La oposici¨®n se niega en redondo y exige medidas de acompa?amiento que las ayude a reinsertarse socialmente. El equipo de gobierno, del PP, ha precisado que lo que ser¨¢ seguro son las multas a los clientes.
Dom¨ªnguez ha explicado que enviar¨¢ una ¨²ltima propuesta del equipo de gobierno a los grupos de la oposici¨®n y que si hay acuerdo, estupendo y si no la aprobar¨¢ el PP con sus ¨²nicos votos.
La contundencia con que se ha pronunciado Dom¨ªnguez coincide con el reciente endurecimiento de las multas a la prostituci¨®n en las calles de Barcelona. Desde el pasado lunes, la Guardia Urbana de la ciudad condal aplica la modificaci¨®n a la ordenanza de civismo que proh¨ªbe la prostituci¨®n callejera y que, adem¨¢s de endurecer las multas, quita el preaviso tanto a trabajadoras sexuales como a clientes. "Hasta el 26 se avisaba y se eligi¨® el 27 como fecha para empezar a multar", se?alan fuentes policiales.
La prostituci¨®n callejera ha provocado en los ¨²ltimos meses sonadas protestas de los vecinos del casco antiguo. Concretamente en el barrio de Velluters, donde hace d¨¦cadas se asent¨® el conocido como barrio chino. La asociaci¨®n de vecinos ha denunciado que esta pr¨¢ctica degrada el barrio y exige al Consistorio un control de la prostituci¨®n.
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