Medio mill¨®n de vascos sin convenio
Uno de cada dos ocupados lo tiene bloqueado, y la otra mitad ha rebajado su salario Empieza la cuenta atr¨¢s para perder la ultraactividad de las condiciones
No son buenos tiempos para los trabajadores. No lo son para casi nadie, pero los trabajadores por cuenta ajena, todos los que dependen de ellos y muchos de los empleados por cuenta propia, est¨¢n pagando muy cara la actual situaci¨®n econ¨®mica. La crisis y las sucesivas reformas laborales, pero especialmente la ultima ha generado un escenario in¨¦dito en Euskadi. De las m¨¢s de 900.000 personas ocupadas, unas 600.000 est¨¢n afectadas por convenios sectoriales o de empresa, mientras que el resto son trabajadores del sector p¨²blico y empleados de hogar.
Tres de cada cuatro de los que dependen de convenios sectoriales y de empresa tienen sus convenios bloqueados y el resto se quedan sin su paraguas a finales de este a?o, si no se reactiva la negociaci¨®n. Es decir, casi medio mill¨®n de trabajadores llevan de media dos a?os sin actualizar sus salarios, y el resto se van a quedar sin convenio vigente el 31 de diciembre de este a?o.
¡°Es dif¨ªcil estimar la p¨¦rdida media de poder adquisitivo de los trabajadores en estos ¨²ltimos cuatro a?os, pero est¨¢ claro que supera el 30% entre las reducciones voluntarias y las obligadas, la subida continuada del IPC y a partir de ahora la del IVA¡±, asegura Javier L¨®pez Irisarri, secretario de Negociaci¨®n Colectiva de CC OO.
El ¨ªndice de precios al consumo (IPC) sigue escalando posiciones. Desde que empez¨® la crisis, en 2008 hasta julio pasado, ha crecido un 9,1% seg¨²n el Eustat, de los que 1,9 puntos han crecido en el ¨²ltimo a?o. En parte debido a la subida de la electricidad y de la gasolina.
¡°La perdida de poder adquisitivo puede superar el 30%¡±, dice CC OO
Pero la subida del IVA va a ser otro hachazo a los bolsillos de muchos ciudadanos que tienen que echar mano de los bienes de consumo afectados por la subida y que podr¨ªa a?adir otros dos puntos al IPC. Una circunstancia a la que hay que sumar que pr¨¢cticamente la otra mitad de los ocupados ya ha aceptado rebajas salariales, o bien para mantener el empleo, o para garantizar la continuidad de su empresa debido al hundimiento del mercado espa?ol y la ralentizaci¨®n del europeo.
Pese a la gravedad de la situaci¨®n, los sindicatos creen que lo peor est¨¢ todav¨ªa por venir en un oto?o caliente desde el punto de vista de las movilizaciones, pero inquietante en tanto en cuanto en 2012 se pone fin al actual modelo de relaciones laborales y negociaci¨®n colectiva, al acabarse la ultraactividad de los convenios.
¡°El 8 de julio de 2012 ha empezado la cuenta atr¨¢s para todos los trabajadores y trabajadoras de Euskadi que no tienen renovado su convenio colectivo y esta cuenta atr¨¢s finaliza en 8 de julio de 2013¡±, asegura la secretaria de Acci¨®n Sindical de UGT, Maribel Ballesteros. Es decir, quedan quince meses para negociar pr¨¢cticamente el 100% de los convenios.
?Y que pasa cuando finalicen estos plazos sin que se haya acordado un convenio nuevo?
¡°Quedan quince meses para negociar todos los convenios¡±, advierte UGT
En aplicaci¨®n de la nueva normativa, los trabajadores mantendr¨¢n sus condiciones ad personam pero a los nuevos se les aplicar¨¢ el convenio colectivo de ¨¢mbito superior (estatal) si lo hubiere y en caso de no existir la ¡°legislaci¨®n b¨¢sica pura y dura, es decir, Estatuto de los Trabajadores y aplicaci¨®n del Salario M¨ªnimo Interprofesional¡±, explica Ballesteros. ¡°Es el fin del modelo que hemos conocido¡±, apunta Irisarri. ELA y LAB han convocado una huelga general para el pr¨®ximo d¨ªa 26 de septiembre que no cuenta con apoyo ni de UGT ni de CC OO.
El intento de blindar los convenios que protagonizaron en febrero CC OO, LAB, UGT y la patronal, Confebask fracas¨® en el ¨²ltimo minuto, al no lograr un acuerdo en los mecanismos para desbloquear las discrepancias entre las partes.
Un fracaso tambi¨¦n, quiz¨¢s, condicionado porque todos los agentes, en este caso especialmente la patronal, estaban a la espera de que Mariano Rajoy hiciera p¨²blico el alcance de su reforma laboral.
Para LAB las perspectivas a corto plazo ¡°son sombr¨ªas¡±
De haber logrado blindar los convenios provinciales, ahora se estar¨ªa hablando de otra cosa. Pero la reforma laboral acab¨® por flexibilizar mucho el despido, y sobre todo puso el l¨ªmite de un a?o a la ultraactividad de los convenios.
El modelo basado en la negociaci¨®n acababa de terminar sus d¨ªas y comenz¨® una nueva etapa de confrontaci¨®n en el seno de la empresa. ¡°Estamos en las v¨ªsperas de explorar un hecho hist¨®rico, un nuevo ciclo, una nueva situaci¨®n en la que no sabemos que va a pasar¡±, explica Irisarri.
Los sindicalistas de todas las fuerzas se preguntan qu¨¦ va a pasar con aspectos como la antig¨¹edad, o ciertos pluses, cuando se instale en la empresa una doble escala salarial, la de los trabajadores antiguos que mantienen sus derechos econ¨®micos y de jornada o permisos como derechos personales, y quienes se incorporan de nuevo a la empresa. Estos empezar¨¢n o bien con el salario que marca el convenio estatal que corresponda si lo hay, o con el Estatuto de los Trabajadores, y el Salario M¨ªnimo Interprofesional. O, en su caso, lo que el empresario negocie de manera individual con cada uno de los nuevos empleados.
Los agentes culpan a ELA de no reactivar algunos convenios
LAB, en su comunicado de convocatoria de la huelga general, califica de ¡°sombr¨ªas las perspectivas que, a corto plazo, se ciernen sobre la clase trabajadora vasca¡±. En su opini¨®n frente a las actitudes de tibieza y ¡°pasividad c¨®mplice¡± es preciso reactivar la lucha por un cambio de modelo pol¨ªtico, econ¨®mico y social. Y para impulsar ese escenario ¡°no queda otra alternativa que responder de forma contundente a las pol¨ªticas neoliberales impuestas por los centros de poder pol¨ªticos, econ¨®micos y financieros¡±.
Todos los agentes sociales responsabilizan a ELA de la ¡°espantada¡± de la realidad que ha dado y de no asumir la responsabilidad que tiene en el bloqueo sistem¨¢tico de muchos convenios sectoriales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.